Los conflictos posteriores al 11-S han matado a más de 4,5 millones de personas
por Brett Wilkins (Common Dreams/CTXT)
11 meses atrás 4 min lectura
06 de junio de 202
Un informe de la Universidad de Brown computa las víctimas directas e indirectas provocadas por la guerra contra el terrorismo en Afganistán, Irak, Libia, Pakistán, Somalia, Siria y Yemen
La guerra contra el terrorismo iniciada tras el 11S podría haber provocado al menos 4,5 millones de muertes en una media docena de países, según un informe publicado a principios de mayo por la eminente institución académica que estudia los costes, víctimas y consecuencias de una guerra en la que bombas y balas estadounidenses siguen matando e hiriendo a personas en multitud de naciones.
El nuevo informe del proyecto Costs of War (Los costes de la guerra) del Instituto Watson de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Brown demuestra que “la muerte sobrevive a la guerra”, y lo hace basándose en el cómputo de muertes indirectas provocadas por la guerra contra el terrorismo en Afganistán, Irak, Libia, Pakistán, Somalia, Siria y Yemen.
“En lugares como Afganistán, resulta imperioso preguntarse si hoy en día hay alguna muerte que no esté relacionada con la guerra –declara Stephanie Savell, codirectora de Costs of War y autora del informe–. Las guerras a menudo matan a más personas de forma indirecta que en combate directo, sobre todo a niños pequeños”.
La publicación “examina las investigaciones más recientes para analizar las relaciones causales que han provocado entre 3,6 y 3,7 millones de muertes indirectas en las zonas sumidas en guerra tras el 11-S”, si bien “el número total de víctimas mortales en estas zonas de guerra podría ser de al menos 4,5 o 4,6 millones, cifra que continúa en aumento, aunque los datos exactos de muertes siguen sin conocerse”.
Como destaca The Washington Post, el primero en informar sobre el análisis:
“Desde 2010, un equipo de 50 académicos, especialistas en derecho, profesionales del campo de los derechos humanos y médicos que participan en el proyecto Costs of War han llevado sus propios cálculos. De acuerdo con sus últimas estimaciones, más de 906.000 personas (entre ellas, 387.000 civiles) murieron de forma directa en las guerras iniciadas tras el 11-S. Otros 38 millones se han visto desplazados o convertidos en refugiados. El gobierno federal de Estados Unidos, entretanto, lleva más de ocho billones de dólares invertidos en estas guerras, señala el informe.
Sin embargo, Savell afirma que, según la investigación, hay muchísimas más personas, sobre todo menores y miembros de las poblaciones más empobrecidas y marginadas, que han muerto por los efectos de la guerra: aumento de la pobreza, inseguridad alimentaria, contaminación del medioambiente, el trauma generado por la violencia y la destrucción de infraestructuras públicas y sanitarias, junto con la de la propiedad privada y los medios de subsistencia.
Como indica el informe, “la inmensa mayoría de muertes indirectas que provoca la guerra se producen por desnutrición, por problemas relacionados con el embarazo o el parto y por multitud de enfermedades, tanto de tipo infeccioso como no contagiosas, como el cáncer”.
Un estudio del año 2012 halló que más de la mitad de los bebés nacidos en la ciudad iraquí de Faluya entre 2007 y 2010 tenían malformaciones congénitas. Entre las mujeres embarazadas que participaron en el estudio, más del 45 % sufrieron abortos espontáneos en los dos años posteriores a los ataques estadounidenses a Faluya en 2004. Las lecturas que realizan los contadores Geiger en áreas contaminadas con uranio empobrecido, en zonas urbanas iraquíes con gran densidad de población, muestran sistemáticamente niveles de radiación que son entre 1.000 y 1.900 veces más altos de lo normal.
Asimismo, el estudio ha revelado que algunas muertes “también son consecuencia de lesiones provocadas por la destrucción de infraestructura que genera la guerra, como las de las señales de tráfico, y por las repercusiones del trauma y la violencia interpersonal”.
Savell indica que “las partes beligerantes que dañan infraestructuras y afectan a la salud de la población tienen la responsabilidad moral de ofrecer asistencia rápida y eficaz y reparaciones”.
“El gobierno de Estados Unidos, aunque no sea el único responsable de los daños, tiene la importante obligación de invertir en ayuda humanitaria y en la reconstrucción de las zonas donde iniciaron guerras tras el 11-S –añade–. El gobierno estadounidense podría hacer mucho más de lo que está haciendo para cumplir con esa responsabilidad”.
Este artículo fue publicado originalmente en Common Dreams. Traducción de Ana González Hortelano.
*Fuente: CTXT
Artículos Relacionados
La OTAN desarrolla nuevos métodos de guerra cognitiva
por Leonid Savin
2 años atrás 16 min lectura
Colados para bebés de Nestlé tienen restos de pesticida
por David Abrigo B. (Chile)
13 años atrás 3 min lectura
Michel Nash, el joven soldado fusilado por negarse a disparar contra su pueblo. Hermana pide restitución de su honor militar
por Anyelina Rojas Valdés (Iquique, Chile)
2 años atrás 9 min lectura
Honduras: Se está echando a andar una política de exterminio de militantes del FNRP y del Partido LIBRE
por Comunicaciones del FNRP (Honduras)
12 años atrás 8 min lectura
¿Quiénes son los cobardes que matan gente desarmada?
por Alejandro Kirk (Chile)
2 años atrás 4 min lectura
Vladimir Putin y Ki JIngping informan a los medios tras las conversaciones entre Rusia y China
por piensaChile
6 segundos atrás
Los presidentes de Rusia y China informan a la prensa acerca de los temas tratados y los acuerdos tomados en las reuniones de trabajos realizadas en Pekin. Practicamente no queda área económica, científica, técnica, que no esté siendo coordinada entre ambos países. En un mundo, en que occidente habla de guerras y caos, Como dijo el Presidente Xi Jingping «China y Rusia mantendrán su compromiso con el objetivo primordial de trabajar en beneficio de las dos naciones y contribuir eficazmente a promover una paz y un desarrollo duraderos en todo el planeta con sentido de la responsabilidad«.
Se desintegra el “orden económico mundial”
por Alfredo Jalife-Rahme (México)
52 mins atrás
Las alucinaciones geofinancieras de los globalistas hoy son intratables por la realidad geopolítica. Quizá debido a su especialidad economicista, The Economist pasa por alto tres fechas nodales que (en)marcan la caída, para no decir “colapso”, del hoy ya caduco “orden globalista financiero”.
Estudiantes acampan en la en Casa Central de la U: «Estamos en alerta hasta que Chile rompa relaciones con Israel»
por piensaPrensaTV (Chile)
21 horas atrás
«Estamos en alerta hasta que Chile rompa relaciones con Israel»: Catalina Lufín, Pdta federación Estudiantes de la U de Chile. En banderazo y acampada por palestina en la casa Central.
La paz comienza con la membresía de Palestina en la ONU
por Jeffrey D. Sachs (EE.UU.)
22 horas atrás
El pasado 10 de mayo, la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó una resolución sobre algunos derechos de Palestina como futuro Estado Miembro de Naciones. El día anterior a esa votación, el economista y profesor estadounidense Jeffrey Sachs, analizó las posiciones y conductas de los diferentes aspectos y actores miembros de las Naciones Unidas, en un problema extramedamente dificil de solucionar respetando los derechos de Palestina, pero el mundo hoy, no es el mismo de antes del 7 de octubre de 2023. E Israel tiene una enorme responsabilidad en ello.