ALAI AMLATINA, 24/07/2015.- La geopolítica del decadente imperio estadounidense (EUA) sigue activa en América Latina. ¡Cuidado! La apreciación raya en la desconfianza, porque la ofensiva contra Venezuela es opción.
Dos indicadores: con el imperio vale pensar mal para acertar, porque allende sus fronteras solo hay intereses de “seguridad nacional”, y todo el aparato de Estado se empeña en su resguardo —la historia lo pone en evidencia y la práctica militarista lo corrobora—, y; para atender los asuntos de interés los gringos mueven lo necesario, “falsas banderas” para salirse con la suya, utilizar los artilugios posibles y apostarle a no perder. Cuando pierde arrebata.
Los peligros:
1.- EUA tiene la mirada puesta en Venezuela, porque el país bolivariano posee la reserva petrolera más grande del mundo; un pastel apetecible para sus avasallantes petroleras. Es claro que ha intentado casi de todo: golpe de Estado contra Chávez, amenazas contra Maduro, descalificación electoral, revuelta social, movilización vandálica, compra de voluntades, propaganda interna y externa, descrédito internacional, crímenes endilgados al gobierno, descrédito de instituciones, entre otras acciones.
Obama dijo en marzo pasado que Venezuela era una “amenaza extraordinaria e inusual para la seguridad nacional y la política exterior estadounidense”. La alarma se encendió. No le resultó, de momento, pero tampoco se dio por vencido. Claro que los intereses están por delante, y por el petróleo —lo ha demostrado— está dispuesto a lo que sea. Como el autoatentado a las Torres Gemelas el 11/S para justificar la invasión a Irak, e ir por el petróleo bajo pretexto terrorista. Imperio con una derecha voraz. De ese tamaño es la amenaza, y la ofensiva que no termina.
2.- En la geopolítica imperial EUA trabaja pacientemente con una estrategia de mediano a largo plazo. Aplica el plan perverso —y le sale porque le invierte comprando traidores—, tal que si las acciones previas no le resultan insiste como sea, incluido el uso de la fuerza. Y esa es una opción contra Venezuela. EUA se atreve a eso y más. Tenerlo presente es actuar en consecuencia. La variable sigue siendo acción directa o indirecta, que para los fines es lo mismo. Es decir, apostarle a una invasión indirecta, que puede resultar directa. No es trabalenguas, es probabilidad.
El pretexto ya lo tiene. Se trata de la defensa de los intereses de sus empresas. Recuérdese que tras la ofensiva de los corporativos multinacionales está el Pentágono, que la estrategia comercial es de guerra. Y por ahí anda la Exxon Mobil apostándole a desestabilizar a Venezuela, atizando el conflicto interno con Guyana, su vecino. Igual en marzo (¿coincidencia? No) la petrolera inició operaciones en la excolonia británica, en la Guayana Esequiba que desde 1777 fue reconocida como territorio venezolano.
La Exxon ha firmado con el gobierno de David Granger inversiones por 200 millones de dólares en diez años. La Guayana Esequiba, disputa no resuelta y herencia de la Colonia española. En 1840 inicia el avance paulatino inglés por el oro. El arrebato se consuma en 1897 entre EUA y Gran Bretaña por 159 mil km2. En 1899 se legaliza el despojo vía el “Laudo de París”. El caso está en la ONU desde 1962, más como la Guyana se independiza en 66, el problema sigue.
Lo último, se dice, es que Exxon financió la campaña de Granger y ahora él plantea su derecho al progreso guyanés, en apoyo al interés de la petrolera. Ese es un escenario favorable a los intereses gringos. El Pentágono está realizando “maniobras militares conjuntas” en los estados del sur: Texas, Nuevo México, Arizona, California, Nevada, Utah, Colorado. ¿Con qué fin? Puede ser contra Latinoamérica. Por la construcción del Canal de Nicaragua, o en apoyo a Exxon. EUA le apuesta a ganar. El pastel está, sin fiesta o invitados.
Pero la principal amenaza es contra Venezuela. Sin perder de vista que pegarle al país bolivariano es golpear sus grandes logros en pro de la unidad Latinoamericana; es decir, a organismos prósperos como Celac, Unasur, Alba y Petrocaribe. Y de refilón a los países integrantes, a unos más que otros, como Bolivia, Ecuador, Brasil, Cuba, Dominicana, la propia Venezuela, etcétera.
Por el hecho de que eso atenta contra la dignidad, pues en pleno siglo XXI el espíritu colonialista imperial permanece y los ideales de Bolívar —que Hugo Chávez Frías impulsó—, causan tirria. Pero los proyectos quieren, y deben reivindicar la historia común de América Latina, sacudirse las herencias muertas: la española, portuguesa, inglesa, holandesa. Sobre todo la española, para una aspiración común hacia la prosperidad de los pueblos. Aspiraciones legítimas.
Seguro que con este fin, desde Washington la elite, los petroleros también, mueven sus piezas. Cabe por ello que suavizar la relación con Cuba, vía el restablecimiento diplomático condicionado, la señal no es lo que parece. ¿Cómo un restablecimiento sin Guantánamo o el desbloqueo económico, financiero y comercial? Palmaditas a Raúl que avanzan contra la isla, deslumbrados por renovar relaciones con su siempre verdugo. Como que Raúl no tiene una pizca de la desconfianza que sí tenía Fidel. Pero son “tiempos modernos” para ellos.
No solo eso. Ya mencionábamos a Nicaragua. Pero fijándose bien, hasta el intento por desactivar el conflicto armado en Colombia tiene jiribilla; suena como para utilizar las bases militares estadounidenses en ese país libremente, sin la interferencia de las guerrillas. Como la intentona vigente de derrocar al presidente ecuatoriano Rafael Correa. Los negocios son la parte central de la trama, llevan la delantera para abrirse paso, luego viene lo demás.
Como la posibilidad de la llamada “operación popote”, si la Exxon perfora en la Guayana Esequiba. De ahí el peligro a la invasión. ¡Cuidado con eso! Los movimientos citados, todos, parecen encaminados a un fin; o a matar varios pájaros de un tiro. Esto es una advertencia para Venezuela, para la región latinoamericana, Cuba incluida. Las secuelas del decadente imperio siguen amenazantes, aún y cuando recolecta derrotas en sus travesías mundanas. Luego entonces, los focos rojos deben estar encendidos, por la propia unidad latinoamericana.
Correo: sgonzalez@reportemexico.com.mx
Tw.: @sal_briceo
*Fuente: Agencia Latinoamericana de Información
Artículos Relacionados
Chile popular: Asambleas y Organizaciones de base emplazan a convencionales electos
por Organizaciones Populares (Chile)
5 años atrás 6 min lectura
Puerto Rico : Tras un encarcelamiento de 35 años Estados Unidos liberará al independentista Óscar López Rivera
por Servicio de Prensa Alternativa
9 años atrás 7 min lectura
Trump y la desintegración latinoamericana
por Eva Golinger (EE.UU)
8 años atrás 7 min lectura
Homenaje al pueblo boliviano en su larga lucha por independencia y libertad
por Sergio Rodríguez Gelfenstein (Chile)
5 meses atrás 17 min lectura
Vergüenza y olvido: Chile se abstiene en votación contra la erradicación del colonialismo en la ONU
por Félix Madariaga Leiva (Chile)
1 año atrás 7 min lectura
El arte mural callejero. Crónica de lo que está sucediendo
por La Calle
6 años atrás 1 min lectura
«Tengo una pena que me desborda el alma»
por Ruben Ricardo Cortes Montero (Chile)
18 horas atrás
21 de diciembre de 2025
«Tengo tanta pena, que me gustaría irme a la c… e’mi madre. Me gustaría irme a la chucha. Por que no hay… no se realmente que hacer. No es que esté desesperado, pero si… tengo mucha pena, tengo mucha pena. No se que hacer. Decepcionado… no es la primera vez que me decepciono. No se que hacer. No tengo ganas de trabajar. Realmente tengo vergüenza de mis conciudadanos.».
La culpa también es de Boric
por Miguel Torres Romero (ile)
19 horas atrás
21 de diciembre de 2025
Mientras la izquierda siga explicando sus derrotas como malentendidos, traiciones o manipulaciones externas, seguirá perdiendo. La política no castiga la falta de pureza. Castiga la falta de eficacia. Kast llegará a La Moneda no solo por lo que prometió, sino por lo que el gobierno dejó de hacer.
¡Frente al avance de la reacción, el único camino es la organización!
por Bloque de Organizaciones Populares (Chile)
5 días atrás
17 de diciembre de 2025
Que no nos engañen cuando hablan de libertad, porque esa es solo la libertad para los dueños del poder y del mercado para seguir explotando y oprimiendo. Hablan de orden y seguridad, pero nada cambiará mientras nuestras condiciones de vida sigan siendo las mismas y nuestros derechos continúen siendo negados.
De feministas, socialistas, populares, terroristas y cínicos, con el Sáhara Occidental okupado de fondo
por Luis Portillo Pasqual del Riquelme (España)
2 semanas atrás
09 de diciembre de 2025 Artículo publicado originalmente el 13 de noviembre de 2025 en el periódico El Independiente. Lo republicamos con la autorización del autor. La Redacción de…