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Abogado Jorge Bofill y crisis institucional: “El país ya se jodió”

Abogado Jorge Bofill y crisis institucional: “El país ya se jodió”
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01 de julio de 2023

Estimados Carol, Edison y Nathan:

No quisimos darnos cuenta pero este fue un modelo de sociedad corrupto e injusto desde que se impuso por una dictadura terrorista que sobrecogió al mundo por su crueldad y vesania. ¡Fue el primer país del mundo condenado por Naciones Unidas por gravísimas violaciones de derechos humanos en sí mismo! Antes sólo lo habían sido Sudáfrica por el apartheid e Israel por los territorios ocupados. Y después, producto de la reacción contra Pinochet, Naciones Unidas fue extendiendo progresivamente su condena a numerosos regímenes violadores de derechos humanos.
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Y concretamente, a través del control total del poder la dictadura fue imponiendo, una a una las «modernizaciones», eufemismos usados para mercantilizar a favor de grandes grupos económicos las diversas estructuras económicas y sociales: minería, agricultura, industria, sistema laboral, previsional, educacional, de salud, etc. Como lo reconoció Andrés Allamand en su libro: «La travesía del desierto», en el «matrimonio» Pinochet-economistas Chicago-boy, «el modelo (económico) le aportaba (a Pinochet) una propuesta coherente y de paso le brindaba una coartada para el ejercicio prolongado del poder (…) Una revolución de esa magnitud -eso es lo que era- necesitaba tiempo. desde el otro lado, Pinochet le aportaba al equipo económico algo quizás aún más valioso. el ejercicio sin restricciones del poder político necesario para materializar las transformaciones. Más de alguna vez, (Red.: antes de 1973) en el frío penetrante de Chicago los laboriosos estudiantes que soñaban con cambiarle la cara a Chile deben haberse devanado los sesos con una sola pregunta: ¿Ganará alguna vez la presidencia alguien que haga suyo este proyecto? Ahora no tenían ese problema» (Edit. Aguilar, 1999; p. 156).
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En definitiva la corrupción total derivada necesariamente del poder absoluto que fue expresándose en todas las formas imaginables durante la dictadura, y particularmente en las privatizaciones a precio vil de grandes empresas y servicios públicos, lo que se transformó como muy bien lo analizó y graficó María Olivia Monckeberg en «El saqueo de los grupos económicos«. Y desgraciadamente este modelo que se había comprometido a sustituir la dirigencia de la Concertación, luego de su llegada a la Presidencia en 1990, lo legitimó, consolidó y «perfeccionó»  en sus 20 años ininterrumpidos de gobierno.
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Con los años esto lo han reconocido desfachatadamente Boeninger, Foxley, Tironi, Correa y Brunner, entre otros. Y lo han alabado pública y fervorosamente desde la derecha Hernán Somerville, César Barros, Herman Chadwick, Ricardo Claro, Oscar Godoy, Ena von Baer, Mario Desbordes, Jalime Bellolio y Arnold Harberger, entre muchos otros. Lo que pasa es que este modelo esencialmente injusto, corrupto y corruptor ha naturalizado las más diversas formas de corrupción pública- privada, lo que está saliendo completamente a flote hoy: Desde las «elusiones» generalizadas de impuestos de los más ricos; financiamientos regulares o «irregulares» de las campañas electorales; subsidios gigantescos -directos e indirectos- a grandes empresas; colusiones de precios entre ellas virtualmente impunes; acceso a información privilegiada; «entrega» de la pesca a «siete familias»; «irregularidades» al por mayor en el negocio inmobiliario; el escándalo omnipresente de las notarías y conservadores; los escándalos generalizados en las municipalidades y ahora se abre la caja de Pandora de las labores multimillonarias encargadas por el Estado a fundaciones y corporaciones en que las formas de fiscalización y control han sido extremadamente deficientes y nominales, ajenas a la labor de la Contraloría General de la República.
¡Por supuesto que estamos «jodidos»!…
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Felipe Portales
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Abogado Jorge Bofill y crisis institucional: “El país ya se jodió”

Marcelo Soto

En esta entrevista, el abogado Jorge Bofill hace un crudo análisis del país, al que considera fracasado y en camino a convertirse en un estado fallido. Sobre el escándalo de Democracia Viva, el socio del estudio “Bofill Escobar Silva” señala: “Es parte de un estado lleno de grasa, donde se gasta plata a manos llenas sin ninguna necesidad ni justificación”.

 -Me gustaría conocer tu diagnóstico del país, donde hay hartos temas preocupantes. La delincuencia; la corrupción; un montón de señales negativas. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

-La gente que se dedica a la tecnología dice que el futuro siempre está en los márgenes del presente y que lo que hay que hacer es escuchar las señales débiles de la actualidad para darse cuenta de por dónde va la mano. Nos pasó que las señales débiles respecto del deterioro institucional nunca las vimos venir y de repente estamos en una crisis muy profunda y muy extendida, que nos está llevando cada vez más a ser un estado fallido.

-Esa es una definición bien fuerte.

-El Estado fallido es una realidad, en el sentido de que en algunas partes mandan los narcos, las mafias. En la Macrozona Sur los que mandan son violentistas; no el Estado. Tenemos un Estado que no se atreve a actuar, porque tiene una especie de complejo histórico, que viene de la dictadura. Para entender lo que sucede basta mirar a países como México, por ejemplo, donde hay un montón de estados que están controlados por el narco y donde el gobierno federal está ausente.

-Pero, ¿en Chile estamos aún lejos de eso?

-Bueno, eso ya pasó en Chile. No estamos hablando de algo que va a pasar, ya pasó. Unos 15 años atrás Chile era el país que tenía la menor tasa de homicidios en el continente americano después de Canadá. Eso ya no pasa.

Yo soy abogado de la familia del joven norteamericano que fue asesinado en el barrio Yungay, Eric Garvin. Y su único pecado fue que andaba a las 21:30 de la noche como turista después de haber ido a comer. Lo mataron a balazos ahí en la calle.

-Es la zona donde vive el presidente Boric.

-Exacto. A cuadras de donde vive el presidente Boric, las calles están tomadas por las bandas y son manzanas completas. Donde ellos lo que hacen es profitar; se toman estos cités grandes; arriendan por piezas generalmente a muchos inmigrantes que además no tienen como buscar ningún tipo de protección legal. Eso está pasando en el centro de Santiago.

Años atrás uno escuchaba que había algunas poblaciones en Santiago en las cuales la policía no se atrevía a entrar. Hoy día tenemos en el centro de Santiago, muchos pedazos de territorio tomados por estas mismas bandas. Y el Estado sabe que eso está pasando. Y no hace nada.

-¿Crees que ha aumentado mucho la violencia de los delitos, la crueldad, la tortura?

-Hoy estamos enfrentando formas de delincuencia que nunca existieron en Chile. Esto está muy probablemente asociado a la inmigración. La pregunta es cuánto nos falta para que eso ya sea irreversible, como sucede en otros países. ¿Vamos a reaccionar o no? Ojalá no reaccionemos dictando leyes, que es el deporte favorito del Estado chileno.

-¿En que materias observas esa tendencia?

-En el caso de la Fundación Democracia Viva de RD, escuché que (Carlos Gajardo) decía que esta es la oportunidad para lanzar la agenda de Probidad 2.0. ¿Qué agenda de probidad? Si el Código Penal ha sido modificado 20 veces en los últimos diez años para endurecer las penas por corrupción. Esto de que vamos a discutir una ley nueva es otra de las grandes mentiras sobre cómo funciona el Estado, no necesitamos más leyes.

-¿Han cambiado los delitos?

-Yo soy abogado desde hace 40 y tantos años. Te cuento que una de las formas del homicidio calificado es lo que se denomina el homicidio del sicario. Cuando alguien le paga a otro o le hace una promesa remuneratoria por matar. Pero los casos de sicariato eran contados con los dedos de la mano en una década. Y hoy día es una industria. Para qué hablar de los mausoleos y de los funerales narco, donde el Estado se declara en quiebra. El Estado en vez de funcionar, observa, como si no tuviera ninguna herramienta.

-A propósito de esto, ¿qué te parece la ley Naín Retamal, como parte de la agenda de seguridad?

-Fue celebrada porque se consagró que los policías tienen legítima defensa, cuando en el ejercicio de sus funciones enfrentan una agresión en la calle. ¿De verdad necesitamos una ley para eso? Este es un escándalo gigantesco desde el punto de vista conceptual. Yo lo asocio a un evidente complejo del Estado de Chile. Pero resulta que alguna vez, durante los primeros gobiernos de la Concertación tuvimos un órgano no regulado que se dedicaba a las labores de inteligencia, que era la famosa Oficina, que fue eficiente en lo que estaba haciendo.

-Ahora existe la ANI. ¿Cómo evalúas su labor?

-La ANI no sirve para nada, lo digo súper responsablemente. Yo fui uno de los abogados a los cuales el Presidente Piñera, con ocasión del estallido social, a fines del año 2019, le encargó la representación de los órganos del Estado para perseguir los delitos más graves que se habían cometido durante el estallido social.

La cosa es que nosotros estuvimos con la ANI, para ver qué información había y no había nada. Recibía unos reportes que eran puras redes sociales. Entonces, frente a lo que está pasando, si hay que dictar alguna ley sería una que genere un sistema de inteligencia en Chile que funcione. Porque del lado de las bandas, el crimen organizado, partiendo por el narcotráfico, funcionan con mejor inteligencia.

-¿Cuál es tu opinión sobre cómo lo está haciendo el gobierno?

-Yo no soy partidario de este gobierno, para nada, pero no creo que uno lo pueda culpar por las cosas que están ocurriendo en la calle. La cosa viene de antes y crece de forma constante. Hoy día hay mafias nuevas por todos lados.

-¿Por ejemplo?

-La mafia de las tomas de terreno. Que son tipos que se toman un terreno, los demarcan y venden parcelas. Mi punto es cuántas mafias más necesitamos que se instalen para darnos cuenta de esto y de asumir que tenemos que reaccionar.

-¿Has pensado salir del país?

-Yo tengo 63 años. Probablemente todas estas cosas que yo estoy mirando no me van a afectar mucho más a mí. Más allá de que ya me da lata salir a la calle a comer afuera, porque para qué me voy a andar exponiendo. Yo tengo cinco hijos, tres nietos y un cuarto en camino. Somos de acá y nos gusta vivir en este país. Pero ¿cómo va a ser el futuro de mis nietos? ¿Qué les espera en este país? ¿Vamos a vivir como si fuera el estado de Sonora en México, donde secuestran a 50 personas al día, aparecen muertos y no pasa nada?

-Hay un libro famoso que se llama Por qué fracasan las naciones, que habla sobre el estado fallido. ¿Crees que Chile está fracasando como país?

-Sí, está fracasando, es un fenómeno que está a la vista. Mira cualquier índice de aquellos en los que participa Chile y te vas a dar cuenta que en los últimos 15 años hemos experimentado un retroceso feroz, gigantesco.

-¿Y el tema de la Fundación Democracia Viva te parece que es una señal de lo mismo que estamos hablando?

-Por supuesto. Obviamente que el escándalo político tiene que ver con esta prédica que le escuchamos durante tanto tiempo a estos jóvenes, sosteniendo que con ellos íbamos a ver a una generación de políticos virtuosos, que no iban a incurrir en ninguno de los problemas que hemos cometido nosotros los viejos.

Pero es parte de lo mismo: un estado lleno de grasa, donde se gasta plata a manos llenas sin ninguna necesidad ni justificación. Se informó hace poco que en el último año el Estado ha incorporado 90.000 funcionarios públicos nuevos por vía de contratos a honorarios.

-Estás defendiendo al ex subsecretario de Previsión Social, Christian Larraín. ¿Cómo ha sido ese proceso?

– Él fue despedido el 26 de mayo de este año y estamos trabajando en una acción de tutela laboral, porque a él se lo humilló, denostó, se le afectó su honra con ocasión del despido. Se dijo que se lo estaba echando, no porque tuviera problemas con la ministra, sino porque supuestamente había información de que él habría actuado de una manera incorrecta cometiendo un acoso sexual ambiental, que es una cosa que yo no sé en qué consiste. Nunca tuvimos información de ningún sumario.

-¿Cuál es tu receta para salir de esta crisis?

-Dejemos de lado los complejos históricos, ejerzamos y apliquemos la ley. Utilicemos el monopolio del uso de la fuerza. Persigamos a los que tenemos que perseguir, que el Estado se coordine. Yo trabajé en la reforma procesal penal desde el año 93. Partí con Soledad Alvear, que era la ministra de Justicia del gobierno de Frei. Hay un viejo anhelo que ha fracasado: el banco unificado de datos.

-¿En ese tiempo votabas concertación?

-No importa lo que yo vote. Me defino como un ciudadano profundamente laguista. Me gusta la socialdemocracia como concepto. La pregunta es: ¿qué tiene que pasar en Chile para que haya una reacción? Si hoy en día hay una mafia que ocupa parte del territorio a unas pocas cuadras de donde vive el presidente de la República, y eso no es un motivo de preocupación general del Estado de Chile. Yo simplemente lo encuentro un escándalo.

-¿Se jodió el país, como diría Vargas Llosa?

-El país ya se jodió. Constituciones más constituciones menos, con eso no lo vamos a arreglar.

*Fuente: Ex-Ante

María Olivia Mönckeberg: La gente que se enriqueció en dictadura es responsable de lo que ocurre hoy

Hay que ser muy car’e r…..!

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