- RED VOLTAIRE | CIUDAD DE MÉXICO (MÉXICO) | 29 DE MARZO DE 2017
FRANÇAIS TÜRKÇE DEUTSCH ΕΛΛΗΝΙΚΆ عربي РУССКИЙ ITALIANO ENGLISH

La reunión de la coalición anti-Daesh realizada en Washington el 22 y el 23 de marzo estuvo muy lejos de ser una muestra de unidad. En apariencia, los 68 miembros de esa coalición reafirmaron su voluntad de luchar contra esa organización terrorista. En realidad, lo que hicieron fue exponer sus profundas divergencias.
El secretario de Estado Rex Tillerson recordó a sus socios que el presidente Donald Trump se comprometió ante el Congreso de Estados Unidos a acabar con el Emirato Islámico (Daesh) y no a limitarse a reducirlo, como pretendía hacer la administración Obama. A la vez que hacía ese recordatorio, y sin aceptar discusiones, Tillerson puso a los demás miembros de la coalición ante hechos consumados.
Primer problema: si ya no se trata sólo de desplazar a los yihadistas sino realmente de liquidarlos, ¿cómo podrán los europeos, sobre todo los británicos, salvar a “sus” yihadistas?
El secretario de Estado Tillerson y el primer ministro iraquí Haider al-Abadi, presentaron un balance de la batalla de Mosul. A pesar de las muestras publicas de satisfacción, es evidente para todos los expertos que los combates por Mosul están llamados a durar aún por largos meses dado el hecho que en esa ciudad iraquí prácticamente cada familia tiene al menos uno de sus miembros enrolado en las fuerzas de Daesh.
En el plano militar, la situación en Raqqa es mucho más simple. En esa ciudad siria los yihadistas son extranjeros. La prioridad sería entonces comenzar por cortarles el aprovisionamiento y después separarlos de la población siria.
Segundo problema: el ejército de Estados Unidos debe obtener previamente la autorización del Congreso, y también la autorización de Damasco, para desplegarse en Siria. Los generales James Mattis –secretario de Defensa– y John Dunford –jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense– han tratado de convencer a los congresistas, pero nada garantiza que obtengan esa autorización. Habrá entonces que negociar con Damasco y, por tanto, aclarar cierto número de cosas.
A la pregunta de los europeos sobre lo que Washington haría con Raqqa después de la liberación de esa ciudad, Rex Tillerson respondió enigmáticamente que haría regresar la población desplazada o refugiada. Los europeos sacaron como conclusión que, dado que esa población es masivamente favorable al gobierno de Damasco, la intención de Washington sería devolver ese territorio a la República Árabe Siria.
Al hacer uso de la palabra, el ministro de Exteriores de Portugal, Augusto Santos Silva, señaló que esa proposición contradecía lo que se había decidido anteriormente. Y afirmó seguidamente que los europeos tiene el deber moral de continuar su esfuerzo por proteger a los refugiados que huyeron de la «dictadura sanguinaria». Eso da a entender que, después de ser liberada de los yihadistas, Raqqa no sería todavía una zona segura ya que el Ejército Árabe Siria sería peor que el Emirato Islámico (Daesh).
No es por casualidad que los europeos optaron por el representante de Portugal para hacer esta intervención. El actual secretario general de la ONU, Antonio Guterres, fue primer ministro de Portugal y tuvo a Santos Silva entre los miembros de su gobierno. El hoy secretario general de la ONU Antonio Guterres fue también presidente de la Internacional Socialista, organización totalemente controlada por las estadounidenses Hillary Clinton y Madeleine Albright. En otras palabras, Guterres es la nueva fachada en la ONU del embajador estadounidense Jeffrey Feltman –a cargo de los “Asuntos Políticos” en la organización internacional– y del clan belicista.
Tercer problema: Todos parecen de acuerdo para liberar Raqqa de Daesh, pero –según los europeos– no para restituirla a Damasco, de ahí las maniobras de Francia en el terreno.
Inmediatamente después del encuentro de Washington, los yihadistas atrincherados en Yobar –un barrio en la periferia de Damasco– iniciaron una ofensiva hacia el centro de la capital. Y los de la provincia de Hama emprendieron ataques contra aldeas aisladas. Quizás se trata para ellos de un intento desesperado por obtener un premio de consuelo en Astaná y Ginebra antes de que termine la partida. Pero es también posible que sea una estrategia coordinada por Londres con París.
En este último caso, seguramente veremos una gran operación de las potencias coloniales en Raqqa. Londres y París decidirían atacar Raqqa antes de que esté completamente cercada, propiciando así la huida de Daesh, o sea obligando a los yihadistas a desplazarse nuevamente y salvándolos con ello del exterminio. Daesh se replegaría entonces hacia la frontera turca y sería la fuerza que podría liquidar a los kurdos por cuenta de Recep Tayyip Erdogan.
Artículos Relacionados
Criminal desinformación sobre Siria
por Stella Calloni (Argentina)
13 años atrás 8 min lectura
Testimonio desde el Campamento de Agadaym Izik, en El Aaiún ocupado
por Una valerosa mujer saharaui
15 años atrás 5 min lectura
Argentina: Los discursos de odio y el atentado a Cristina Fernández de Kirchner
por Mempo Giardinelli (Argentina)
3 años atrás 2 min lectura
A 4 meses de una injusta detención por la Ley antiterrorista
por Victor Montoya (Puente Alto, Chile)
12 años atrás 11 min lectura
Pescador Artesanal marcha desde Cucao a La Moneda, denunciando multa de $ 19 millones por pescar en el “Mar de Chile”
por Medios
10 años atrás 1 min lectura
El olvido mata dos veces
por Alberto Morlachetti (Pelota de Trapo, Argentina)
18 años atrás 2 min lectura
Nuevo alcalde de Nueva York: «»Soy joven, soy musulmán y soy socialista democrático»
por Medios Internacionales
2 horas atrás
05 de noviembre de 2025
Lo mejor de todo es el discurso de victoria donde le dice directamente a Trump: «Soy joven, soy musulmán, soy socialista democrático y no voy a pedir perdón por nada de esto. Para llegar a nosotros tendrás que pasar por encima de todos nosotros».
EE.UU. también quiere controlar Colombia: ¿Las Elecciones más importantes del país?
por La Base America Latina
6 horas atrás
05 de noviembre de 2025
Inna Afinogenova, Estefanía Veloz y Marco Teruggi analizan los resultados de consulta del Pacto histórico del domingo pasado que dio como ganador a Iván Cepeda Castro que perfila como el más probable sucesor de Gustavo Petro. ¿En qué consiste su programa que habla de las tres revoluciones? ¿Quiénes serán sus rivales? ¿Qué esperar de EEUU?
Sobre la autonomía del Sáhara: «¡El País miente a sus lectores!»
por NoTeOlvidesDelSahara
1 hora atrás
05 de noviembre de 2025
Si la ONU viera imposible el referéndum, ¿por qué sigue prorrogando cada año el mandato de la MINURSO, cuya misión incluye la organización de ese referéndum de autodeterminación? De hecho, la propia resolución 2797 (2025) prorrogó, como siempre, la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental, no una misión para supervisar una autonomía negociada.
Hay un fundamento legal, establecido por la ONU, que establece el derecho inherente a la autodeterminación del Sahara. Y este no ha desaparecido ni ha sido cancelado
por María Safónova (Rusia)
2 días atrás
04 de noviembre de 2025
“No pudimos apoyar un texto tan desequilibrado. <…> Para nosotros, este documento representa un alejamiento de la base establecida en la ONU para la solución del conflicto en el Sahara Occidental. Esa base no ha desaparecido ni ha sido cancelada, su fundamento no está sujeto a revisión”