Elecciones en Brasil: criminalización de la política, retroceso de la izquierda, autocrítica y resistencia
Frei Betto, en una valiente autocrítica, señala que en 13 años no se promovió la alfabetización política de la población ni se trató de organizar las bases populares. Tampoco se valoró los medios de comunicación que apoyaban al gobierno y, mucho menos, se dio un paso hacia la democratizar los medios.
Sinceramente, ¿tiene arreglo el Brasil actual?
01/07/2016 Quien observa la escena político-social-económica se pregunta: ¿Tiene arreglo Brasil? Una banda de ladrones, travestidos de senadores-jueces intenta, contra todos los argumentos en contra, condenar a una mujer…
La crisis en Brasil
El PT creyó, durante determinado tiempo, que podría valerse del orden institucional brasileño para beneficiar a los pobres sin perjudicar los ricos e incluso contar con su ayuda. Y de hecho hubo beneficios para los pobres, tal como se propusieron. Pero una vez aceptado el precio de entrar en un sistema político moribundo, la puerta para volver atrás se cerró.
Brasil: El golpe parlamentario y la estrategia de la derecha
[…] el alto nivel de corrupción de la mayoría de integrantes de la casta política y empresarial brasilera – más del 70% de los diputados y senadores han sido imputados por la justicia por la mezcla entre la política y los negocios
Noam Chomsky: “La corrupción fue tan grande en Sudamérica que se desacreditaron a sí mismos y desperdiciaron grandes oportunidades”
… creo que un montón de grandes oportunidades, en gran medida, se han desperdiciado en formas muy desagradables. En Brasil, el país más importante de América Latina, cuando el PT llegó al poder tenía verdaderas oportunidades de conseguir logros –un gran apoyo popular, buenos programas, un liderazgo impresionante–, y algunas de las políticas fueron exitosas, pero la magnitud de la corrupción era tan grande que el partido se desacreditó a sí mismo y ha, esencialmente, sacrificado esas oportunidades.
La destitución: ¿repetición de la tragedia brasilera?
¿En qué consiste esta tragedia? Consiste en esto: siempre que el pueblo, los pobres, sus movimientos y sus líderes carismáticos irrumpen en el escenario político, surgen las viejas elites, que cargan dentro de sí la estructura de la Casa Grande para negarles derechos, conspirar contra ellos, difamar y criminalizar a sus líderes, empujarlos a las periferias de donde nunca deberían haber salido. A los negros, a los indios, a los quilombolas, a los pobres y a otros discriminados se les niega reconocimiento y dignidad. Y, sin embargo, constituyen la gran mayoría del pueblo brasilero. Esto es lo que está ocurriendo actualmente en Brasil.
Una nueva derecha apareció en Brasil
Brasil ha cambiado mucho en los últimos 15 años, pero los cambios tienen que ver más con beneficios económicos que con beneficios públicos, más con la distribución social de los recursos económicos y el consumo y menos con la transformación social de unos servicios públicos igualitarios y de calidad. Además de los casos de corrupción, este es el motivo de la gran decepción de los ciudadanos con una administración federal de izquierdas en Brasil desde hace más de una década.
Brasil: la democracia al borde del caos y los peligros del desorden jurídico
Con el orden jurídico transformado en desorden jurídico, con la democracia secuestrada por el órgano soberano que no es elegido, la vida política y social se convierte en un potencial campo de despojos a merced de aventureros y buitres políticos. Llegados hasta aquí, se imponen varias preguntas. ¿Cómo se ha llegado a este punto? ¿Quién se aprovecha de esta situación? ¿Qué debe hacerse para salvar la democracia brasileña y las instituciones que la sostienen, incluyendo en particular a los tribunales?
Brasil: La manipulación de una escucha ilegal
Primero, en la conversación entre Rouseff y Lula, no hay una palabra, una frase, en el transcurso del diálogo que permita sustentar esta afirmación. En la conversación, Dilma simplemente informa a Lula que le está enviando el “plazo de posesión” (termo de posse), documento jurídico que hace parte de la documentación de todo ocupante de un cargo político. Y segundo ningún agente de policía está autorizado para interceptar el número de la presidenta, ni con la autorización de un juez de primera instancia. Es preciso autorización expresa del Tribunal Superior Federal. Para varias personas que tuvieron acceso al audio, el ruido de la marcación y voces posteriores muestran que ella era el blanco que permitió aquella intercepción.
Brasil: El escándalo Lula y el PT. Dossier
La cuestión dramática de los días que corren es que terminó el pacto de clases, firmado en 2002, con la Carta a los brasileños. A través de ella, un significativo sector popular, capitaneado por el PT, aceptó los términos impuestos por la burguesía – asumir el gobierno – pero no tocar ningún comando vital del Estado.