Triunfo de la izquierda en Chile: se abrieron las grandes alamedas
por Atilio Borón (Argentina)
4 años atrás 4 min lectura
18 de mayo de 2021
Como condición para aceptar el llamado a la Convención Constituyente la derecha había impuesto la regla de los dos tercios para el quórum y para aprobar los contenidos de la nueva constitución. Piñera y sus compinches estaban seguros de que las urnas arrojarían un resultado que les garantizaría disponer de ese poder de veto, al obtener un 35 o 40 por ciento del voto popular. Pero la ciudadanía decidió lo contrario. Castigó a su gobierno y sus aliados por tres razones: la desastrosa gestión de la crisis de la covid-19 (tan admirada por el sicariato mediático argentino y la dirigencia de Juntos por el Cambio), la brutalidad de la represión a las protestas populares, y la súbita toma de conciencia del saqueo a que había sido sometido por décadas el pueblo de Chile por el neoliberalismo gobernante, principalmente por obra de un perverso régimen previsional y el desorbitado endeudamiento al que fueron condenadas millones de familias caídas por debajo de la línea de pobreza. Resultado: la peor elección de la derecha desde 1965. Particularmente desastroso fue el resultado de la otrora poderosa Democracia Cristiana, que apenas contará con tres de los 155 convencionales que conforman el cuerpo.
La debacle de la derecha se verificó también más allá de los resultados de la Convención Constitucional. Hubo otras derrotas igualmente emblemáticas, como la experimentada en un bastión tradicional (y estratégico) como la Alcaldía de Santiago, nada menos, que consagró para el cargo a Irací Hassler, una joven comunista que derrotó al incumbente, Felipe Alessandri, nieto del expresidente conservador Jorge Alessandri, que se había postulado para su reelección. O la arrolladora victoria de Daniel Jadue, alcalde comunista de la comuna de Recoleta, al norte de Santiago, que se impuso con un 65 por ciento de los votos y se perfila como uno de los precandidatos mejor posicionados para la elección presidencial que tendrá lugar en noviembre del corriente año. En Valparaíso fue reelecto Jorge Sharp, de Revolución Democrática/Frente Amplio. Pero sus compañeros le arrebataron nada menos que Viña del Mar a las fuerzas conservadoras más reaccionarias y también conquistaron las comunas de Ñuñoa, Maipú y Valdivia, en la región de Los Lagos, en donde salió electa una ex dirigente estudiantil e integrante de Revolución Democrática, Carla Amtmann.
También se disputaron cargos de gobernadores de las dieciséis regiones, algo novedoso en Chile. No disponen de muchas atribuciones en un país históricamente unitario, pero igual se dieron situaciones ilustrativas de este cambio en el clima político trasandino. El Frente Amplio se alzó con la gobernación de Valparaíso en primera vuelta, y otras fuerzas opositoras hicieron lo propio en el extremo sur: Aysén y Magallanes. En las otras 13 regiones habrá ballottage y las estimaciones previas señalan que será muy poco probable que la derecha se alce con más de dos gobernaciones. En la de Santiago se librará una gran batalla entre el democristiano Claudio Orrego, hijo de un dirigente histórico de esa fuerza (y encarnizado opositor al gobierno de Salvador Allende, estrechamente vinculado a la embajada de Estados Unidos como lo demostraron documentos desclasificados de la CIA) y Karina Oliva, del Partido Comunes, una nueva agrupación popular que cuenta con el apoyo de otras fuerzas de izquierda. Oliva se encuentra en las antípodas de Orrego, una familia perteneciente a la casta política tradicional de Chile, y se autodefine como “madre soltera de Emilia, feminista y mujer popular, politóloga, frenteamplista y militante del Partido Comunes.”
En resumidas cuentas: la coyuntura político-electoral cambió para bien en Chile y esto alienta promisorias expectativas no sólo para ese país sino para toda Latinoamérica. El proyecto neoliberal, del cual Chile era su nave insignia, está agotado, y en la elección del pasado fin de semana se estampó la primera firma en su certificado oficial de defunción. La segunda y definitiva se conocerá en lo que resta del año. Mientras, en la Argentina, todavía hay algunos que anhelan imitar al “exitoso” modelo chileno y su ejemplar control de la pandemia y de la crisis económica. Tendrán un rudo despertar, también ellos.
*Fuente: Página12
Santiago de Chile, 4 de septiembre de 1973. Quilapayún en vivo
Servia, marzo de 2019
París, Theatre de L’Odeon en toma (marzo 2021)
Artículos Relacionados
Indultos presidenciales, la estela de la Operación Gedeón y el Covid-19
por Jesús A. Rondón (Venezuela)
4 años atrás 7 min lectura
“Yo acuso”. Llamamiento y denuncia
por Michel Collon (Bélgica)
9 años atrás 1 min lectura
La rebelión latino-caribeña estremece a la OEA
por Ángel Guerra Cabrera (Rebelión)
12 años atrás 4 min lectura
¿El G-7 aprovecha los incendios para intentar la internacionalización de la Amazonia?
por Aram Aharonian (Uruguay)
6 años atrás 5 min lectura
Chile, Paraíso de la esclavitud asalariada
por Manuel Hidalgo Valdivia (Chile)
9 años atrás 11 min lectura
«Mientras dormimos destruyen nuestros sueños, nos gobierna la soberbia, de todo se creen dueños»
por Murga La Cayetana (Argentina)
1 día atrás
03 de marzo de 2025
Mientras soñamos un futuro diferente,
Ellos borran sus cagadas, esconden los expedientes,
Defienden lo indefendible, salen por todos los medios
Desfilan por los juzgados, le mienten al parlamento,
La geopolítica de la paz
por Jeffrey D. Sachs (EE.UU.)
1 día atrás
03 de marzo de 2025
Por favor, tengan una política exterior europea. Van a vivir con Rusia durante mucho tiempo, así que negocien con Rusia. Hay cuestiones de seguridad reales sobre la mesa tanto para Europa como para Rusia, pero la grandilocuencia y la rusofobia no sirven en absoluto a su seguridad. No sirven en absoluto a la seguridad de Ucrania. Esta aventura estadounidense en la que se han embarcado y de la que ahora son los principales animadores ha contribuido a que haya alrededor de un millón de víctimas ucranianas.
Abre tus ojos al Sáhara
por Rosa María Sardá (España)
2 días atrás
02 de marzo de 2025
«Los acuerdos de Madrid [de 1975] no han transferido la soberanía del Sáhara Occidental ni han otorgado a ninguno de los firmantes el status de potencia administradora, status que España no puede transferir unilateralmente».
«Ocupación S.A»., el robo de las empresas españolas en el Sáhara
por Resumen Latinoamericano
4 días atrás
28 de febrero de 2025 Programa de Resumen Latinoamericano tv, donde se aborda los intereses de las empresas españolas en la guerra de liberación que lleva adelante el Frente…