Articulos recientes

Al navegar en nuestro sitio, aceptas el uso de cookies para fines estadísticos.

Noticias

Opinión

San Francisco de la Maza líbranos de los pecadores travestis

Compartir:
Francisco de la Maza es el único hombre chileno que, por un acto de magia, puede encarnar a varios personajes contradictorios de la historia: puede ser un señor feudal, dueño del millonario pueblito que se llama Las Condes; puede ser un integrante de los Huasos Quincheros o un gran Señor Rajadiablos de los campos chilenos; en él se puede reencarnar el terrible y autoritario moralista Savonarola, de la Florencia del renacimiento o, en el extremo opuesto, un hereje revolucionario, enemigo del papa y de los cardenales de la UDI, como Martín Lutero. Su apariencia es de un jipi maduro, de barba hirsuta, como era la moda hace algunos años. También puede ser un bailarín un tanto rebelde, como Nelson Mauricio Pacheco – ex integrante del programa Rojo -. Cómo un hombre, me preguntarán, puede representar tantos papeles a la vez y, en cada uno de ellos, personificarlos como un consumado actor.

Sólo Francisco de la Maza se ha atrevido a cerrar las calles del barrio El Golf al transporte automotriz; es que ese tranquilo sector habitacional se ha convertido en una depravada Babilonia, según nuestro Savonarola de La Maza. Los travestis ofrecen sus servicios sexuales a los honestos y desprevenidos transeúntes, que no se atreven a reconocer, públicamente, su opción sexual. El alcalde de Las Condes está poseído del mismo fanatismo y valentía que el monje florentino; si bien no está dispuesto a ir a la hoguera, al menos no temía pasar algunos días en la cárcel. Al fin, la Corte revirtió el resultado del plebiscito, convocado por De La Maza, y los travestis le muestran la lengua celebrando su triunfo.

En el convento del Sagrado Corazón de la UDI, Francisco de la Maza es un revolucionario: fue el único que acertó al predecir la derrota de Joaquín Lavín, en las elecciones presidenciales; posteriormente, no se le ocurrió nada mejor que proponer que la mesa del Partido y los candidatos a alcaldes fueran elegidos por todos los militantes. Como Martín Lutero, desafió a los papas y obispos del convento del Opus Dei, con la sola diferencia que De La Maza no logró el apoyo de ningún príncipe de la UDI , y Martín Lutero salvó su vida porque los príncipes, desafiando a Carlos V, lo protegieron. Francisco De La Maza, nuestro genial hombre biónico, ahora quiere participar en programa de baile, en el canal nacional de televisión, que como cualquier Nelson Mauricio Pacheco, seguramente tendrá sus ataques de rebeldía. Dios le de larga vida a este hombre de las mil caras. 
Compartir:

Artículos Relacionados

Deja una respuesta

WordPress Theme built by Shufflehound. piensaChile © Copyright 2021. All rights reserved.