Decreto 701: La destrucción del bosque nativo o El gran regalo de la dictadura a las empresas forestales
El Decreto 701, dictado por la Dictadura civico-militar en el año 1974, fue un regalo millonario a 3 familias: Matte, Angellini y Carey. El resultado de ese regalo ha sido un enorme enriquecimiento de esas 3 familias y el empobrecimiento de miles de familias mapuches, chilenas, además de la destrucción de la tierra, lo que hoy provoca hambre, sequía e incendios por doquier. Las plantaciones de pinos y eucaliptos, las plantas de celulosa y toda la infraestructura vial y portuaria a su servicio son elementos que, a la vez de constituir el engranaje de un sustancioso y exclusivo negocio, representa la explotación de los territorios que ocupan y el empobrecimiento de sus comunidades.
En el 2019, ¿Galoparán los Cuatro Jinetes del Apocalipsis?
La sencillez de las personas y su falta de preparación quizás les impiden ver lo obvio y están muy distantes de ver las enormes cifras que se mueven. Estas razones acentuarán una mayor dureza para vivir, y nadie debe extrañarse si llegan los chalecos amarillos (Gilets jaunes), a Chile y otros países. No vendrán de otros países, están aquí, sólo les falta empezar a sentir el agobio asfixiante para que surjan sin que nadie los llame. Estamos asistiendo al inminente rompimiento de uno de los desequilibrios financieros de mayor magnitud creados para beneficio de unos pocos.
Skid Row (Los Angeles, EE.UU.): Infierno en el primer mundo
Aceras atestadas de indigentes, montañas de basura acumulada y miradas hostiles por todas partes: no son las calles de ningún país endémicamente asolado por la pobreza o la guerra, sino las del centro de una de las capitales de la opulencia. Con sus miles de habitantes sin hogar, el barrio de Skid Row en Los Ángeles se ha convertido en un arquetipo de la miseria que a veces puede hallarse en el primer mundo y confronta al país más influyente del planeta con sus propias contradicciones.
Explotación infantil en los campos brasileños del cacao
La cadena productiva del cacao en Brasil se encuentra en manos de ocho mil niños del país, que se encargan de sacar las semillas, para la fabricación del rubro en los principales municipios de la nación suramericana, reseñó Prensa Latina.Así lo denunció el investigador Marques Casara, al portal brasileño de Fato, quien expresó: “todo chocolate a la venta en Brasil está contaminado por trabajo infantil“.
Paraguay, el milagro silencioso y desigual
Ningún diputado paraguayo podrá decir que él no ve la pobreza. En el corazón del centro histórico de Asunción, a menos de 10 metros del Parlamento, separados solo por una calle, resiste firme la Chacarita, el barrio más humilde del centro, con algunas calles de barro y casas de chapa que se inundan constantemente. Es el Paraguay que muchos tienen en la retina: el país más pobre de Sudamérica, destrozado por la dictadura de 35 años de Alfredo Stroessner, una tierra de exilio y emigración.
Diagnóstico Esperanza (Una película de César González)
Un vendedor ambulante más, despreciado por su sociedad. Un niño pobre más, que sueña tener un micrófono para cantar, un preso más, que retorna a la otra cárcel, la de la libertad. Un buen amigo como de costumbre que lo recibe. Una madre soltera más, con muchos hijos, que vende drogas. Extractos espejados del paraíso villero, esqueletos de autos robados desmantelados y prendidos fuego. La utopía atrás de 200 mil dólares ajenos, diferentes clases sociales idénticas traiciones, eternos tejes manejes…
Acuerdo entre el Gobierno de Santos y la guerrilla, y el supuesto fin de la violencia
Con bombos y platillos, vienen anunciando las autoridades colombianas que el acuerdo de paz con la guerrilla, que será sometido a un plebiscito el dos de octubre del presente año […]. Tristemente se trata de una verdad a medias, pues Colombia es un país con múltiples situaciones y fenómenos que de una u otra manera han generado toda una espiral de violencia desde mucho tiempo atrás, muy anterior a la aparición de los movimientos guerrilleros y de las autodefensas a mediados del siglo XX.
En 6 años jubilaré, ¿será júbilo?
La AFP me dice que yo recibiré una jubilación de $199.000 y por solo 12 años y hasta hace un año mi esposo recibiría $ 100.000. Ahora hace un año que no cotiza. En 6 años más jubilaremos los dos y nos llegará una pensión de $ 240.000 pesos y nuestro dividendo hoy es de $230.000… ¡le tengo terror a la miseria! Si esta no es la peor forma de agresión a los trabajadores de este país ¿qué es?
¿Pero qué nos queda a nosotros?, solo la pobreza, la indigencia ya que además el Banco Estado –que es de todos los chilenos– nos quitará nuestra casa. Hemos conversado largamente con mi esposo la situación y no nos queda otra cosa que luchar para que este sistema cambie o si no en el año 2022, es decir, en 6 años más deberemos tomar una decisión atroz… el suicidio, porque después de tantos años, sólo nos quedarán años de sufrimientos, viviendo en el peor de los abandonos económicos, nuestro mes a mes será en negativo y esa situación no es vida.
Bernie Sanders: "Los Demócratas deben despertar"
No son sólo los británicos los que están sufriendo. La economía crecientemente globalizada, establecida y mantenida por la elite económica mundial, maltrata a los pueblos en todas partes. Increíblemente, las 62 personas más ricas del mundo poseen tanta riqueza como la mitad más modesta de la población del planeta, unas 3 mil 600 millones de personas. Los muy, muy ricos, disfrutan de un lujo inimaginable mientras miles de millones de personas sufren de una pobreza abyecta, del desempleo y servicios de salud, educación, vivienda y agua potable inadecuados.
¿Este rechazo de la actual forma de la economía global podría darse en los Estados Unidos? Puedes apostar que sí.
Venezuela herida y humillada (I)
Venezuela, que disfrutaba de la renta petrolera más alta de Latinoamérica y que aquel año (1977) solo tenía 12 millones de habitantes, mantenía al 70% de sus habitantes en la pobreza. Unas escuálida clase media y pequeña burguesía, reaccionarias, ignorantes y bobaliconamente admiradoras del imperio del norte, que se beneficiaban de las migajas que dejaban en el país las grandes petroleras, estaban egoístamente contentas con poder comprarse enormes carros norteamericanos que consumían petróleo como si fuese aire, enormes frigoríficos y enormes chalets en las urbanizaciones que rodeaban Caracas.