EE.UU.: Pobres e indígenas reciben ayuda venezolana
por Servicio de Prensa Alternativa (Serpal)
18 años atrás 6 min lectura
En una reunión que pareció más un festejo familiar que un acto oficial, se congregaron el pasado fin de semana en una iglesia del Bronx organizadores y beneficiarios de un programa de la petrolera CITGO, propiedad de Petróleos de Venezuela, que proporcionó el pasado invierno petróleo para calefacción con descuento de 40 por ciento a 181 mil hogares de bajos recursos del noreste de Estados Unidos.
Los representantes de los ocho estados y cuatro naciones indígenas que recibieron más de 40 millones de galones de petróleo a bajo costo presentaron sus informes sobre el éxito del programa ante el embajador venezolano, Bernardo Alvarez, y el presidente de CITGO, Félix Rodríguez.
Anunciado por el presidente venezolano, Hugo Chávez, como gesto humanitario durante su visita a Nueva York en septiembre de 2005, el programa fue coordinado por políticos y organizaciones estadunidenses bajo el lema "Del corazón venezolano a los hogares estadunidenses".
El embajador Alvarez enfatizó que es un programa "pueblo a pueblo," que además de ayudar a las familias que sufren de los altos costos del petróleo acercó a los pueblos de los dos países. Las expresiones efusivas de los beneficiados confirmaron que el efecto humano del programa superó lo que muchos nombraron de programa de asistencia económica en una temporada difícil para las familias pobres.
Luego de una presentación de CITGO, representantes de las tribus micmac, maliseet, penobscot y passamaquoddy del estado norteño de Maine agradecieron. El jefe de la nación penobscot, James Sappier, elogió lo que llamó un buen acuerdo entre dos gobiernos, el de Venezuela y el de la nación penobscot, y agregó que su gobierno tribal es de los más antiguos del mundo.
Otra represente indígena explicó que a veces sus pueblos, que colindan con Canadá, son de los puntos más fríos de los dos países, llegando a temperaturas de 50 grados bajo cero. Don Silliboy, consejal de la tribu micmac, informó que además de calentar sus casas, el programa logró unir más a las diferentes tribus de Maine.
Juntando pueblos
El programa también juntó a diversas comunidades del noreste de este país, que compartieron experiencias en la reunión.
Russell Anderson, residente de Maine, dijo: "Para un pobre como yo, 100 dólares significa un montón, y 100 galones de petróleo aún más. Hoy, aunque estoy en tierra extranjera, me siento en casa. Veo muchos colores diferentes y oigo idiomas distintos, pero siento que compartimos amor".
Maine es un estado rural con población 97 por ciento blanca, y en el Bronx, el condado más pobre de la ciudad de Nueva York, la población es 48 por ciento latina y 35 por ciento afroestadunidense.
Anderson concluyó con el elogio más grande dentro del vernáculo de Maine al pueblo de Venezuela, cuando dijo que sus habitantes son "wicked", buena gente.
Punto de esperanza
El presidente de CITGO, Félix Rodríguez, escuchó a los beneficiarios y explicó que quería enterarse cómo funcionó el programa, si estaban felices para informárselo a su pueblo. Cuando Dorothy, beneficiara del Bronx, le expresó su gratitud personal, Rodríguez exclamó: "te quiero, Dorothy."
Al exponer su visión del programa, Rodríguez parecía más un filósofo que un ejecutivo de petrolera: "La primera condición es sentir amor. ¿Qué siento yo si no siento lo que tú sientes? Tu vida es un espejo de mi vida. Ese problema no es tu problema, sino un problema de la vida".
Por primera vez el petroleo pareció punto de esperanza, en vez de una causa de guerra y muerte. Los pobres de Estados Unidos voltearon hacia América Latina por ayuda y, en este caso, reportaron que la respuesta fue rápida y real.
"Quiero decir muchas gracias por pensar en nosotros", dijo una mujer del Bronx. "Invito a otras corporaciones (trasnacionales) a hacer lo mismo".
Wayne Mitchell, de la tribu penobscot, dijo que ahorró 700 dólares este invierno gracias al programa. Sobre su opinión de Chávez, respondió a La Jornada: "No lo conozco, pero me gusta mucho lo que ha hecho por los indígenas de Venezuela, al regresarles sus tierra y compartir la riqueza mineral. Muy diferente a lo que sucede en este país, donde nunca nos dieron nada. Es una vergüenza que permitan a compañías petroleras como Exxon, Shell, Mobil y Conoco Phillips juntar miles de millones de dólares en ganancias obscenas sobre las espaldas de los pobres".
Un residente de Bronx que enseña en un centro de educación para trabajadores invitó al gobierno venezolano a colaborar en un proyecto de educativo, y a continuación exigió: "Hay que hacer la revolución, que empieza en el Bronx, porque aquí vive la clase trabajadora".
"Mamá, tengo frío"
Una madre soltera de Rhode Island mostró fotografías de sus tres hijos, mientras su voz temblaba: "Les prometí dar gracias de su parte, porque son quienes realmente fueron beneficiados, ya que este invierno no tuve que escuchar ‘mamá, tengo frío‘".
El director de uno de los cientos de albergues para gente sin techo, que también recibieron petróleo rebajado, señaló que el programa también redujo las llamadas de personas a punto de perder sus viviendas.
Una mujer de Filadelfia juró que el programa salvó muchas vidas, ya que la gente prende velas o usa calentadores peligrosos para no congelarse, lo que no pocas veces resulta en incendios.
Otra madre soltera de Boston afirmó: "Muchas veces hay vergüenza al pedir ayuda, pero en ese programa no hubo vergüenza. Nunca sentí que estuviera rogando". Se soltó a llorar al recordar cuando sus hijos tenían frío y no sabía cómo calentar la casa: "Ponía agua a hervir, encendía un hornillo, abría la puerta del horno".
Cuando la coordinadora de CITGO quiso seguir con la presentación del programa, un niño de Filadelfia la interrumpió y señaló con voz firme: "Quiero decir que la gente está hablando con la verdad. Es verdad que la gente muere por congelarse en el frío. Es verdad que dejan encendido el horno todo el día con la puerta abierta. Es verdad que queremos un cambio".
El encuentro concluyó emotivamente cuando el embajador les preguntó si realmente querían ir a Venezuela; respondieron con aplausos. Les sugirió inscribirse en una lista para integrar una delegación, lo cual muchos hicieron enseguida.
Un asistente dijo en la fila al inscribirse: "Critican el programa por tener motivos políticos, pero eso qué importa a personas que vieron un cambio real en su vida".
Ahora el Departamento de Estado considera imponer límites a los desplazamientos del embajador venezolano en Washington. Tal vez sus viajes a lugares como el Bronx, donde la gente lo abraza, son demasiado peligrosos, aunque no necesita llegar con un dispositivo de seguridad para protegerlo de la gente, como al parecer lo requiere su contraparte estadunidense en Caracas.
Artículos Relacionados
Protestas en Punta Arenas por el alza del gas: Hablaron los ciudadanos
por Manuel Luis Rodríguez U. (Chile)
13 años atrás 3 min lectura
"La France a connu ce que nous vivons en Syrie depuis 5 ans"
por Xavier Yvon avec M.Du (France)
8 años atrás 3 min lectura
Asesinato de jóven comunero mapuche por la policía: La solidaridad antifascista arde en Santiago
por Andrés Figueroa Cornejo (Chile)
5 años atrás 3 min lectura
«Necesitamos diálogo en el seno de la Iglesia para que no regrese la Inquisición»
por Jesús Bastante (España)
15 años atrás 4 min lectura
Comienza proceso de unidad desde la base de los pueblos de Chile
por Los Pueblos de Chile
17 años atrás 29 min lectura
Tomás Borge rinde Homenaje al presidente Salvador Allende
por Prensa ILAES Posgrados (Chile)
13 años atrás 7 min lectura
De Tel Aviv a Haifa: “¿Crees que es el fin de Israel?”
por Jean Stern (Francia)
2 horas atrás
Lo que hemos conocido, lo que hemos aceptado después de tantos años, aunque no estuviéramos de acuerdo, finalmente se ha infundido en la población. El racismo, la idea generalizada de “deshacerse de los árabes”, nos conduce a una posible desaparición. “Uno se pregunta si el fin de Israel es una cuestión de tiempo o una cuestión de apoyo”, se pregunta un intelectual de Nablus. ¿El fin de Israel? “El fin de un modelo, sin duda, pero no el fin de un país”, matiza un diplomático.
Gaza / Israel: algunos apuntes sobre la ordenanza de la CIJ del 30 de abril relativa a la solicitud de medidas provisionales de Nicaragua contra Alemania
por Nicolas Boeglin (Costa Rica)
1 día atrás
En lo que va del año 2024, es la cuarta vez que la CIJ es llamada a dictaminar una decisión sobre el drama indecible que se vive por pare de la población civil en Gaza: véase al respecto, en la demanda interpuesta por Sudáfrica contra Israel, la ordenanza del 29 de abril, la ordenanza del 26 de enero y entre ambas ordenanzas, el comunicado del 16 de febrero respondiendo en forma negativa a Sudáfrica.
De Tel Aviv a Haifa: “¿Crees que es el fin de Israel?”
por Jean Stern (Francia)
2 horas atrás
Lo que hemos conocido, lo que hemos aceptado después de tantos años, aunque no estuviéramos de acuerdo, finalmente se ha infundido en la población. El racismo, la idea generalizada de “deshacerse de los árabes”, nos conduce a una posible desaparición. “Uno se pregunta si el fin de Israel es una cuestión de tiempo o una cuestión de apoyo”, se pregunta un intelectual de Nablus. ¿El fin de Israel? “El fin de un modelo, sin duda, pero no el fin de un país”, matiza un diplomático.
El Sáhara sigue esperando
por La Base (España)
14 horas atrás
En el programa de hoy, Pablo Iglesias, Paola Aragón y Manu Levin desde Madrid e Inna Afinogenova desde el Sáhara analizan la situación en la que continúa este territorio, ex colonia española, ocupado ilegalmente por Marruecos desde hace casi 50 años.