Peña acorralado, ¿y ahora qué?
por Guillermo Almeyra (Rebelión)
10 años atrás 5 min lectura
Las manifestaciones, marchas y protestas tienen acorralado y a la defensiva a Peña Nieto, ponen al desnudo su ilegitimidad y acentúan su descrédito internacional.
The Guardian, del Reino Unido, y el New York Times lo critican, al igual que The Economist y hasta la conservadorísima “gran prensa” latinoamericana así como televisiones oficiales, como el canal 7 argentino denuncian los crímenes y la corrupción en México. En las clases dominantes mexicanas y en el gobierno de Washington –sus amos y mandantes- hay también tendencias evidentes a tomar distancia de un servidor que les está resultando peligroso.
La protesta social en México parte ya de exigencia de “¡Fuera Peña Nieto!” que es más que el reclamo de su renuncia voluntaria y poco menos del “¡echémoslo a como dé lugar!”. Cuando los hogares populares pasan estrecheces y soportan terribles carencias, la soberbia, la inconsciencia social y la impunidad con que se exhiben la corrupción –como en el caso de la Casa Blanca- añaden nueva leña al fuego. La venta de la mansión del escándalo confirma por otra parte las acusaciones ya que, si la operación hubiera sido cristalina y legal, ¿por qué anularla?
Existe por consiguiente el peligro de que Peña Nieto, que está contra la pared, recuerde su feroz actuación en Atenco y responda a los fascistas que en su partido le piden hacer lo que Díaz Ordaz: matanzas masivas para imponer el terror estatal y ganar años en el poder. Pero la situación política y social en los años 1968-69 era muy diferente, en México y en el mundo.
El Estado mexicano era aún vigoroso y el aparato estatal estaba unido detrás del presidente. La situación económica era próspera y las exigencias sociales eran incipientes y, casi exclusivamente, de los estudiantes y pocos sectores urbanos en un país aún mayoritariamente campesino. Por otra parte, el levantamiento en armas de los obreros húngaros y polacos, en los cincuenta, y el triunfo de la revolución cubana, así como las ocupaciones de la fábricas y las gigantescas manifestaciones estudiantiles y obreras en París, las ciudades italianas, argentinas, en Checoeslovaquia y las luchas estudiantiles en México en 1968-69 hacían que las clases dominantes temiesen perder el poder y, por lo tanto, recurriesen al ejército, que aún estaba intacto y no corroído y destrozado por la infiltración del ala más agresiva e ilegal del capital, el narcotráfico.
La represión aparecía entonces como una salida posible, con más ventajas que costos políticos. Hoy, después del desmantelamiento de las bases de la soberanía nacional y del propio Estado, cuando México de facto está integrado a Estados Unidos y constituye un problema interno para Washington, con un mundo en crisis prolongada, un aparato estatal en desintegración y sin consenso ni base y el gobierno de Obama en crisis, una respuesta asesina a la Díaz Ordaz aparece como una aventura aunque está lejos de estar excluida. Recordemos cuando Washington, para evitar el triunfo de los sandinistas en Nicaragua, querían que renunciase Somoza, cosa que éste se negó a hacer en defensa de sus propios intereses de dictador pero poniendo en riesgo los intereses de sus patrones. El mundo político no se rige por la lógica ya que los intereses del gran capital chocan a menudo con los de los capitalistas individuales y sus agentes.
Existe pues una posibilidad de que las clases dominantes tiren lastre por la borda y busquen un reemplazante transitorio para Peña Nieto con el apoyo de Washington. Las movilizaciones de los indígenas y los trabajadores ecuatorianos derribaron tres presidentes, los trabajadores en Brasil impusieron la renuncia de Collor de Melo, el Caracazo abrió el camino a la liquidación del poder de la oligarquía venezolana y el pueblo boliviano echó al presidente Sánchez de Losada y abrió el camino a elecciones limpias y a una Asamblea Constituyente. Los capitalistas perdieron en buena medida el poder político pero no la vida o sus bienes. ¿Por qué en México no podría haber una alternativa de transición con un gobierno no de los partidos del régimen sino de representantes de la que convoque elecciones general limpias y una Asamblea Constituyente que anule todas la leyes antinacionales, antilaborales, liberticidas y retrógradas impuestas por la alianza entre el PRI, el PAN, el PRD y los partidos paleros para responder a las exigencias de las transnacionales?
Hay que impedir una “solución podrida” con el PRI y el Congreso al desprestigio de Peña Nieto e imponer una solución democrática y de masas. Que no quede todo en la condena a unos cabeza de turco –Abarca, un grupo de delincuentes, Aguirre, Peña Nieto- que permita reconstituir el bloque en el poder y preparar nuevos crímenes de Estado. No basta con la fraterna solidaridad del EZLN porque lo que se requiere urgentemente son propuestas, ideas, análisis de perspectivas. No basta con la exigencia de la renuncia de Peña Nieto si el gobierno queda en manos de los mismos. La unión entre todas las resistencias, la confluencia como el 20 de noviembre de las protestas de masas podría en cambio dar base a un Comité Unitario de Organización de la protesta democrática, que se apoye también en las policías comunitarias, los gremios en lucha, las autodefensas guerrerenses, las organizaciones de base de todo tipo y en asambleas de cada comunidad, colonia o centro de trabajo.
¿Estados Unidos podría intervenir? Ya lo está haciendo y lo hará cada día más si no debilitamos su poder en el país. ¿Qué los candidatos a tener Casas Blancas despojando a los ciudadanos para enriquecerse y los que usan los bienes del Estado como propios van a reaccionar? Lo hicieron en defensa de Maximiliano y de Porfirio Díaz pero fue posible derrotarlos. La alternativa no es pasividad y resignación para preservar la paz sino imponer un cambio social o más asesinatos, más degradación, más pobreza, más sumisión a Estados Unidos, más represión. No hay tercera opción.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
*Fuente: Rebelión
Artículos Relacionados
Cruzada transgénica contra los hambrientos
por Silvia Ribeiro (México)
12 años atrás 5 min lectura
También las guerras tienen reglas
por Amy Goodman y Denis Moynihan (EE.UU.)
9 años atrás 7 min lectura
¿Donald Trump ha sido obligado a renunciar?
por Thierry Meyssan (Francia)
6 años atrás 8 min lectura
Ecuador: Nuevo gobierno de izquierda triunfa en la confrontación con la derecha
por Roger Burbach (EE.UU.)
18 años atrás 7 min lectura
Chile reniega de sus pueblos aborígenes
por Hernán Uribe (Chile)
17 años atrás 6 min lectura
2 Comentarios
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Digitalizan icónica revista LUNA, fundada por víctimas del franquismo refugiadas en la Embajada chilena de Madrid
por Universidad de Chile
6 segundos atrás
28 de noviembre de 2024
Bajo un Madrid destrozado por las bombas al poco tiempo de iniciar la dictadura de Francisco Franco en España, un grupo de 17 republicanos antifascistas se refugió durante varios meses en la Embajada de Chile, dando vida a un significativo episodio de solidaridad diplomática y creativa en la historia de ambos países.
La silenciosa guerra civil que se vive al interior de Colonia Dignidad
por Carlos Basso Prieto
3 horas atrás
Un recurso ante la Corte Suprema, una nueva búsqueda de los presos políticos ejecutados en el predio y acciones de lobby por la expropiación, a lo que se suma el desconcierto por la muerte del líder espiritual de la secta, Ewald Frank, son parte del cóctel que se mezcla hoy en el enclave.
“En defensa de la causa saharaui. Testimonios de denuncia, resistencia y solidaridad”
por piensaChile
3 días atrás
Esta recopilación de artículos y testimonios debería contribuir a que se conozcan mejor las razones de la larga lucha del pueblo saharaui por su libertad e independencia, que tanto recuerda a la del pueblo sudafricano contra el régimen del Apartheid, como denunció en su momento el vicepresidente de la MINURSO, Frank Ruddy.
Genocidio en Gaza. La fabricación del consentimiento occidental
por Alain Gresch (Francia)
4 días atrás
«el presidente afirma, en relación a los palestinos, que “la nación entera es responsable” y debe ser “combatida hasta partirla”; el ministro de Defensa declara que no habrá “ni electricidad, ni comida, ni agua, ni combustible”, porque se trata de una guerra “contra animales humanos” y hay que “actuar en consecuencia”.»
¿Y que hay de los bancos europeos y norteamericanos que lavan dinero de los narcotraficantes mexicanos? Junto con el Gobierno Mexicano son parte del negocio.
un poder por encima del capital puede hundir al capitalismo