Macri y su política monetaria ortodoxa generan su propia bomba
por Julio C. Gambina (Argentina)
8 años atrás 5 min lectura
El objetivo explícito de Macri y su equipo era bajar la inflación, y para eso, nada mejor que un monetarista ortodoxo al frente del Banco Central, Federico Sturzenegger. Su lógica, respondiendo a la teoría, era disminuir la cantidad de dinero en circulación. Había que “secar” la plaza, que no hubiera mayor circulación de dinero, con impacto, claro está, en el consumo y en la producción, por eso el “enfriamiento”, pero con el propósito de disminuir la escalada de precios, que anualizada al presente supera el 40%.
Macri y su gente aún hablan de la bomba que dejó el kirchnerismo con las restricciones a la compra y venta de divisas y otros menesteres del gasto público. Ahora, el macrismo genera su propia bomba, con la cotización del dólar a la baja, un nuevo ciclo de endeudamiento público, con mayor gasto en intereses, y con el fantasma de la inflación continua en el presente,
Sube el dólar y suben los precios, pero al bajar la divisa, los precios no lo hacen, y el estímulo especulativo de la política oficial sostiene la recesión y la inflación con un cuadro de recreación de mayorías sociales perjudicadas y muy pocos ganadores.
Baja la cotización del dólar
El asunto es que ingresaron dólares por préstamos (para cancelar deuda pública y arreglar con buitres y otros acreedores) y por liquidación de exportaciones, especialmente soja. Esto último se dio por la eliminación o reducción de retenciones y suba de los precios de exportación. Todas a favor de grandes productores y exportadores agrarios.
Las divisas ingresan por el Banco Central y ya no hay quien demande esos dólares, ya que las colocaciones en peso son más rentables. Si bien ahora el BCRA paga 32,25% por los LEBAC, cuando llegó a pagar 38% anual a 35 días. La tendencia a la baja proviene de presiones del propio gobierno que teme licuar el consenso político por la recesión económica inducida por el costo elevado del dinero. La discusión desde la ortodoxia está tensionada por la rigidez ideológica en el monetarismo o la disputa del consenso electoral hacia las elecciones de medio tiempo en 2017.
Como opción de inversión mejoraron las colocaciones financieras, entre ellos los títulos ofrecidos por el BCRA, también por las letras del Ministerio de Hacienda y los plazos fijos de la banca comercial.
La retracción económica también deprime el precio de la divisa. A la menor reactivación industrial crecerá la demanda de bienes intermedios y presionará la cotización del dólar por importaciones, y con ello el déficit comercial, junto a una demanda de mayores recursos fiscales para atender vencimientos de la deuda pública.
Al mismo tiempo, los exportadores explican que con la inflación acumulada desde diciembre pasado ya se comieron la devaluación del comienzo del gobierno Macri, con lo que no debiéramos sorprendernos con nuevas y renovadas políticas para la devaluación monetaria para seguir favoreciendo a los grandes productores y exportadores.
El problema es que siempre pierden los de abajo, cuando aumenta el precio del dólar, o cuando baja, ya que el movimiento de los precios siempre es ascendente y los ingresos populares se deterioran por ausencia de actualización o disminución del poder de compra.
Precios en alza
El INDEC dio su primera medición tras un largo silencio, que en mayo fue del 4,2% y pronostica una evolución futura a la mitad, haciendo coincidir el pronóstico con el objetivo del 25% anunciado por el Ministro de Hacienda al comienzo del mandato.
Para que ello sea posible, el macrismo deberá alimentar su propia bomba y parece condenado a no poder bajar la tasa de interés por debajo del 30% para sostener su ideología sobre la inflación y claro, eso le provoca contradicciones para sostener el apoyo político de la sociedad.
Esa es la incógnita: ¿cuánto ajuste soporta la sociedad? El conflicto social crece en dinámica y resta la articulación de esa conflictividad en un proyecto social y político que vaya más allá de las reivindicaciones por los ingresos populares.
La realidad es de fragmentación política de un conflicto social ascendente. Por eso se sostiene la unidad de acción, reconociendo proyectos políticos diferenciados. Sin esas diferencias, no se entiende la unidad de proyectos políticos que incluso aparecen antagónicos, por lo menos en sus perspectivas organizacionales, por ejemplo, entre las CGTs y las CTAs.
No cierra a muchos esa “unidad de acción”, sin embargo, es la mínima acción indispensable para la generación de una densidad social que facilite la emergencia de un proyecto emancipador, claro que también habilita a la disputa de proyectos de contención del conflicto, y/o de acumulación de poder para restablecer una perspectiva posibilista de retorno a los años recientes.
Así se dirime la disputa política en el movimiento popular actual, no solo contra el macrismo, sino con variantes favorables a la dinámica del capitalismo. Ese es el territorio concreto de la lucha de clases contemporánea, con presencia de la identidad peronista reivindicada especialmente desde el movimiento sindical; de quienes imaginan una perspectiva nacional popular desde la transversalidad y más allá del peronismo y claro, de quienes aspiramos a constituir nueva identidad popular más allá del capitalismo, el imperialismo, el patriarcalismo, el racismo y la discriminación.
18 de junio de 2016
– El autor, Julio C. Gambina, es Presidente de la Fundación de Investigaciones Sociales y Políticas, FISYP.
*Fuente: AlaiNet
Artículos Relacionados
Chahin y la orfandad demócrata cristiana
por Felipe Portales (Chile)
5 años atrás 10 min lectura
El grave problema de los tratados de libre comercio
por Ricardo Arturo Salgado Bonilla (TeleSurTV)
8 años atrás 7 min lectura
Un Imperio en pánico intenta hacer a Rusia una «oferta que no puede rechazar»
por Pepe Escobar (París, Francia)
2 años atrás 7 min lectura
Vigencia y novedad del socialismo en América Latina
por Carlos Donoso Pacheco (Crónica Digital)
17 años atrás 12 min lectura
Cediendo desarrollo por imagen: Chile y el TPP (II)
por José Miguel Ahumada (Chile)
9 años atrás 9 min lectura
2 Comentarios
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Chile. Minuta sobre TLC con la UE: No más colonialismo europeo
por Resumen Latinoamericano
7 mins atrás
19 de noviembre de 2024 El Portal argentino «Resumen Latinoaméricano» publicó este artículo originalmente el 22 agosto, 2024, advirtiendo las consecuencias de aprobar «la actualización» del Tratado de Libre…
José ‘Pepe’ Mujica: “Le pido a la vida que me permita seguir ladrando un poco”
por Federico Rivas Molina y Gabriel Díaz Campanella (Desde Uruguay)
17 horas atrás
A los 89 años, el expresidente de Uruguay ha vencido al cáncer. En esta entrevista con EL PAÍS, realizada en su casa rural de Montevideo, donde aún se recupera de las secuelas del tratamiento, habla de la vida y la muerte, el rencor, la felicidad y su legado político.
Madrid, escenario de la lucha por la causa saharaui
por Alfonso Lafarga (España)
4 días atrás
La causa saharaui estará presente en Madrid el sábado 16 de noviembre con dos actos en la capital de España para expresar el apoyo a la autodeterminación del Sáhara Occidental y exigir el cumplimiento de las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, por un lado, y denunciar la traición socialista, por otro.
Entrevista: La historia no tan secreta del apoyo de Netanyahu a Hamás
por Ghousoon Bisharat (Palestina)
5 días atrás
Desde sabotear Oslo hasta canalizar dinero catarí hacia Gaza, Bibi ha pasado toda su carrera respaldando a Hamás para perpetuar el conflicto. Incluso después del 7 de octubre, argumenta el historiador Adam Raz, sigue fomentando la misma estrategia.
Hola!
Gambina es conocido y respetado.
Acá se pregunta: ¿cuánto ajuste soporta la sociedad?
………………..
La Gente (eso que somos “en sociedad”) es la “constante” más “variable” de la ecuación Vida humana.
Ninguna teoría ni modelo económico es seguro, verdadero y bueno,sino que -a lo sumo- intentará ser el menos in-seguro, el menos erróneo y el menos malo.
Dependen de la Gente que somos.
POR LO TANTO:
-Todo “AJUSTE” depende de la “RESISTENCIA de los AJUSTADOS”-
Ninguna Sociedad ni persona está exenta de envilecerse y dejarse “ajustar” hasta su holocausto.
A los pueblos les puede suceder lo mismo que al burro del huaso que decidió, para ahorrar, cortar la comida del burro. Y cuando le preguntaron como le había ido con el experimento dijo: «Muy bien, lastima que se murió justo cuando se estaba acostumbrando.»