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Desinformación sobre consumo de alimentos transgénicos en Chile

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Para justificar la introducción de los transgénicos en Chile
y desalentar la cada vez más poderosa campaña pro moratoria que realizan
organizaciones ciudadanas y la
Alianza por una Mejor Calidad de Vida (RAP-Chile),  Chile Bio, que agrupa a los productores de
semillas transgénicas  publicó el 5 de
diciembre un nuevo  artículo, ahora en La Tercera, firmado por
Alexis de Ponson. Se titula "Cuántos alimentos transgénicos comemos los
chilenos
" y mezcla información verdadera con
supuestos no confirmados, para concluir que todo lo que consumimos ya es
transgénico. Miguel Ángel Sánchez, citado en el artículo, es  presidente de Chile Bio y lobbyista de la
introducción de los cultivos genéticamente modificados en el mercado interno,
con el apoyo de Monsanto y las otras transnacionales involucradas en el
negocio, como Pioneer.

El maíz importado
Entre las afirmaciones aventuradas del artículo destacamos:
"Se puede aceptar que la totalidad de la soya y el maíz importado en Chile
son transgénicos". Pero el maíz es un cultivo que todavía se produce en
forma convencional en algunos países exportadores del grano, como Paraguay, que
no ha autorizado el maíz transgénico, mientras que en Brasil hay producción
convencional (60 %)y transgénica de maíz.   
El 29% del maíz importado en 2010 por Chile provino precisamente desde
Paraguay (ODEPA 1) [1]. En 2009 Argentina aportó 54% de las importaciones de Chile,
muy por debajo del 81% que ha representado en los últimos diez años. Estados
Unidos mantiene un 11% de participación en el mercado nacional y de Brasil se
importó un 15% del maíz. Por tanto, es falso que todo el maíz importado sea
transgénico.

Hay que considerar además que Chile también produce maíz
para el mercado interno, y hasta ahora, esa producción es convencional. En
2009, un 43% del maíz consumido en Chile provino de la producción nacional y el
57% fue importado (con Argentina, Estados Unidos y Brasil, como principales
proveedores). Pero en 2010 bajó la importación de maíz lo que mejoró la
situación de los productores nacionales. 
En esta temporada, entre abril y junio, se importaron en promedio 7.690
toneladas de maíz mensuales, cifra muy inferior al promedio de 24.647 toneladas
importadas en el mismo período de la temporada anterior. El principal
importador, Graneles de Chile, que durante el resto del año trae un promedio
mensual de 70.708 toneladas de maíz, en el período de cosecha nacional de este
año importó sólo 2.384 toneladas promedio por mes. En la temporada 2009/10, la
superficie de cultivos de maíz abarca 122.547 hectáreas,
con un rendimiento que alcanzó a 111 quintales por hectárea. (ODEPA 2) [2]

El almidón modificado en lácteos y sopas
María Elena Rozas, coordinadora de RAP-Chile, señala: "Otra
afirmación discutible es sostener que las sopas y cremas en polvo, así como los
yogures y otros lácteos, son todos transgénicos debido a la presencia de
‘almidón de maíz modificado’ que les da la consistencia. La lista roja y verde
de Greenpeace España sobre alimentos transgénicos -que La Tercera cita como fuente-
especifica claramente que el almidón modificado (modified starch en inglés) no
debe confundirse con almidón transgénico. Pero el artículo nada dice de esta
advertencia".

El almidón modificado [3] es un aditivo alimenticio que se
prepara tratando la sustancia, degradándola parcialmente para convertirla en un
agente de espesamiento, de estabilización o emulsión.  Generalmente el tratamiento se realiza con
ácidos inorgánicos, y en la etiqueta ello se expresa con diferentes números
E.  Por ejemplo, el almidón alcalino-modificado
(E1402), almidón blanqueado (E1403), almidón oxidado (E1404), almidón tratado
enzimáticamente (INS: 1405), almidón acetylated (E1420), y almidón oxidado
acetylated (E1451).

El almidón modificado genéticamente proviene en cambio de
plantas transgénicas  cuyo ADN se ha
modificado. En ese caso la modificación se refiere a la manipulación genética
del ADN de la planta y no al procesamiento o tratamiento del almidón o los
gránulos de almidón.  El almidón
transgénico se usa para fabricar polímeros biodegradables, como insumo de la
industria del papel, y para crear nuevos aditivos alimentarios.

Una omisión adicional del artículo se refiere al caso de los
atunes y mariscos, que ubica en la lista de productos transgénicos, pero nada
dice nada acerca de que actualmente hay amplia disponibilidad de atunes y
mariscos en lata libres de transgénicos: se pueden consumir simplemente
eligiendo los productos preparados en agua (sin aceite).

Finalmente, es pertinente recordar que el peligro
representado por los transgénicos no se limita a  sus efectos para la salud humana y el
ambiente sino también genera graves impactos sociales que están a la vista en
Argentina (cambio de la estructura agraria, desempleo rural, entre otros). Está
demostrado que en el campo no hay barreras tampoco para los polinizadores, por
tanto, es totalmente imposible que un cultivo transgénico no contamine
genéticamente campos próximos y/o lejanos. Como consecuencia,  el agricultor convencional y orgánico además
de sufrir la contaminación de sus cultivos con un  producto transgénico patentado, deberá pagar
al dueño de la patente.  A ello hay que
agregar los graves impactos en el patrimonio genético de Chile y  la penalización del libre intercambio de
semillas que realizan campesinos indígenas y pequeños productores agrícolas que
son los mayores proveedores de la canasta familiar de frutas y verduras, entre
otros alimentos básicos.
Santiago de Chile, 6 de diciembre de 2010

Notas:

1.- Maíz, Impactos del terremoto,
http://www.odepa.gob.cl/odepaweb/publicaciones/doc/2308.pdf.

2 Maíz: rendimiento, la clave del éxito, agosto 2010
http://www.ingenierosagronomos.cl/2010/sept/maiz_odepa.pdf  

3.- La
información anterior, tomada de Wikipedia, cita las siguientes fuentes:
"Vickie Vaclavik, Vickie A. Vaclavik, Elizabeth
W. Christian" (2007).
"Essentials of food science" (3rd ed.). Springer.
p. 61. ISBN 9780387699394
 Starch derivatization: fascinating and unique industrial opportunities,
K. F. Gotlieb, A. Capelle, Wageningen Academic Publishers, 2005, ISBN 9789076998602 ^ a b c d e f g h Codex
General Standard for Food Additives (GSFA) Online Database
  GCSE
Food Technology for OCR
, Jenny Ridgwell. 2001. ISBN 9780435419516 Revise for OCR GCSE Food Technology,
Alison Winson. 2003. Degradable Polymers, Recycling, and Plastics Waste
Management
. S Huang, Ann-Christine Albertsson. 1995. Modified Starch,
Jenny Ridgwell, Ridgwell Press, 2001, ISBN 9781901151077

– Viste el blog de Lucía Sepúlveda Ruiz: www.periodismosanador.blogspot.com

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