El entramado del lobby marroquí en Chile: El Mostrador, El Periodista, El Dinamo, Diario Financiero, un Rector y una Fundación

24 de abril de 2021
Cuando una embajada, una empresa o alguna institución quiere hacer apología de su labor, del trabajo que realiza o que dice efectuar respecto de sus logros, sean estos reales, fantasía o simplemente inflados, los medios de comunicación escritos tienen un nicho donde colocar esas cartas enviadas por los representantes diplomáticos de esos países. En general cuando las palabras son claramente obsequiosas, un panegírico de un monarca, de lo brillante que son, eso es simplemente marketing directo y debe ser colocado entonces como un inserto. Una acción de Marketing Directo por el cual suelen pagar generosas sumas a los medios por dicha publicación, que en general, insisto, es más una apología que una información objetiva.

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Podríamos pensar que El Mostrador, al colocar esta carta en su sección Opinión se desliga de cualquier responsabilidad desde el punto de vista de ética periodística. Pero no es ni debe ser así. Y digo esto porque al amparo de una opinión plagada de falsas aseveraciones o al menos infladas desvergonzadamente sabiendo que los ayer alabados en materia de combate al COVID 19 han tenido cifras y hechos que nadie, en este momento puede autocalificarse como exitoso. Marruecos al 23 de abril del 2021 tiene 510.000 contagios y 9.000 muertos. Muy lejos de su vecino argelino que tiene 115.000 casos de contagios y 3.100 muertes.

Menos aún el sionismo que pretende mostrarnos a Israel como ejemplo, cuando no cumplen con sus obligaciones establecidas en el IV Convenio de Ginebra con respecto a los territorios palestinos ocupados, en el plano sanitario, por ejemplo y el team del Covid 19. Misma situación que ocurre con Marruecos y los territorios saharauis ocupados, donde nada se dice ni lo van a decir personajes como la embajadora de Marruecos en Chile o sus amigos en Chile. Cuando es simplemente una opinión, un aporte, el medio tiene cartas al director donde si quiere puede pensar que el monarca es el rey de los creyentes, que es una autoridad impoluta y que es el representante de dios en la tierra e incluso que Marruecos es una democracia.

En este caso se trata de una publicación firmada por la embajadora de Marruecos en Chile, Kenza Elghali donde se destaca la labor de Marruecos en la lucha contra el Covid 19 y el supuesto apoyo que este país daría, gracias a la bondad de su rey Mohamed VI a países africanos. La población está en proceso de vacunación en un proceso gratuito (como debe ser) que según la embajadora “tuvo un eco positivo entre los extranjeros residentes en Marruecos, quienes expresaron su aprecio y gratitud por este gesto generoso por parte de Su Majestad el Rey Mohammed VI, quien les permitió beneficiarse gratuitamente de la vacuna, al igual que el conjunto de los ciudadanos marroquíes”. Hasta aquí, no se ha sabido de algún proceso de beatificación del rey de Marruecos

Gracias a la bondad, sabiduría, conocimientos, capacidad técnica y la enorme sabiduría de este – como nos dice la embajadora – Amir Al Mouminine (Príncipe de los Creyentes) unido a una visión estratégica que “junto con sus esfuerzos dentro del país, Marruecos también ha prestado especial atención a sus hermanos africanos. Así, S.M. el Rey Mohammed VI había propuesto, el 13 de abril de 2020, el lanzamiento de una iniciativa de Jefes de Estado africanos destinada a establecer un marco operativo para apoyar a los países africanos en sus diversas fases de gestión de la pandemia”.

Lo de El Mostrador no es aislado. Marruecos realiza una enorme labor de propaganda, relaciones públicas y lobby en el país abarcando medios donde hay columnistas como es el caso del Diario Financiero donde la Sra. Cristina Arriagada directora de la Fundación América Latina África Siglo XXI (financiada por la Embajada de Marruecos en Chile) escribe en mayo del año 2020 y posteriormente repite sus alabanzas promarroquíes “Marruecos: horizontes y estrategias para luchar contra el Covid 19”.

En el plano de instituciones de educación superior, el Rector de la Universidad de Talca Álvaro Rojas Cónsul Honorario de Marruecos y Coordinador Fundación América Latina/África siglo XXI, es una muestra de otro tipo de lobista, pero también vinculado a El Periodista, es decir, gran parte de aquellos vinculados a la Embajada de marruecos en Chile, que han sido invitados al país magrebí, son asiduos articulistas pro Rabat en este medio dirigido por Francisco Martorell en forma visible y desvergonzada. Un Álvaro Rojas que ha estrechado vínculos con la Embajada y con centros de estudio en Marruecos, y donde nuevamente la expresión de ese vínculo se expresa en artículos y opiniones favorable a Marruecos incluso en temas de violación de las leyes internacionales y alabando la normalización de relaciones con el sionismo (la normalidad de dos entidades colonizadoras y ocupantes de territorios ajenos). Acuerdo entre Israel y Marruecos: gran logro diplomático en tiempos de pandemia

Sumemos al periodista Francisco Martorell y su revista El Periodista, también un medio donde habitualmente los artículos representan loas a quien seguramente aporta a que este medio siga saliendo. Martorell publica un artículo en la sección internacional el 14 de marzo del 2021 titulado “El milagro marroquí: el país africano modelo en control de la pandemia y vacunación” donde afirma que sus medidas para evitar los contagios, así como el plan de vacunación, son alabadas por organismos internacionales, como la OMS, personalidades y diversos gobiernos. El milagro marroquí: el país africano modelo en control de la pandemia y vacunación. Un artículo con muchas similitudes a la carta enviada por la embajadora de Marruecos en Chile y publicada en El Mostrador.

Resulta una incógnita este viraje de Martorell (aunque podemos imaginarlo) considerando que conoce los campamentos saharuis en Tinduf, sabe de la acción colonizadora y de ocupación contra un pueblo que lo acogió en sus campamentos de refugiados, invitado por el gobierno saharaui y presentando esa experiencia, en formato audiovisual en el local de le Monde Diplomatique en diciembre del año 2011 ¿Qué te pasó Francisco? ¿Podríamos preguntarnos, hay algo con los marroquíes que no sabemos con certeza?

¿Qué pasó con aquel periodista que en mayo del año 2012 participó como expositor en el “Programa Seminario Política exterior chilena y su deuda con el Pueblo Saharaui” organizado por la vicepresidencia del Senado chileno y donde los panelistas calificaron de “deuda pendiente la cuestión del reconocimiento de la República árabe saharaui democrática por parte del Estado de Chile “, así como «la deuda de la sociedad chilena en generar acciones de solidaridad internacionalista y de sensibilización y toma de conciencia frente a la justa lucha del pueblo saharaui por su autodeterminación”

El Periodista es un medio que además le da tribuna al ex Diputado Roberto León, viejo amigo de Marruecos con varios viajes invitado en su época de parlamentario, gozando de las bondades de la monarquía feudal disfrazada de un reino aparentemente democrático (imposibilidad y contradicción evidente). Un Roberto León, actual lobbista marroquí en orden a frenar cualquier intento de apoyo a la causa saharaui de lograr su autodeterminación. Este personaje en un artículo publicado en El Periodista titula “Marruecos continúa aferrado a la legalidad en el Sahara” nos dice tras esta afirmación “Mientras que Marruecos se aferra a la legalidad internacional, las milicias del Polisario se lanzan en operaciones de bandidaje obstaculizando y atacando la libre circulación de personas y mercancías en la zona tampón de Guergarat cerca de la frontera con Mauritania”. Es evidente que el Diputado tiene el deber de escribir cada cierto tiempo un artículo donde las alabanzas a su empleador tengan una dimensión que indudablemente da vergüenza ajena.

Ambos medios, El Mostrador y El Periodista tienen un deber como medios de información, dar voz al pueblo saharaui y su lucha por la autodeterminación, negada desde el año 1975 por esta Monarquía, que la ha colonizado y ocupado. Construido un Muro de segregación de 2.700 kilómetros de largo, reprime a la población saharaui que habita tras el muro y robas sus recursos naturales como el fosfato, sus acuíferos y genera acuerdos comerciales ilegales en los caladeros pesqueros del Atlántico frente a las costas saharauis.

En el caso de Álvaro Rojas, Médico veterinario, ex Ministro de Agricultura en el primer gobierno de Bachelet, ex Embajador en Alemania también bajo la administración de Bachelet, democratacristiano, que ejerce por segunda vez su cargo de Rector de la U. de Talca (lo ha hecho por 25 años no consecutivos) , debería enfocar su labor a visibilizar a aquellos que son sometidos por los poderosos, a aquellos que esperan de hombres y mujeres dotados de un sentido de justicia que defiendan esos derechos conculcados pero… difícil esperar esto de quien es sindicado como el rector mejor pagado de Chile lo que hace pensar que poderoso Sr. Es Don Dinero.