Articulos recientes

Al navegar en nuestro sitio, aceptas el uso de cookies para fines estadísticos.

Noticias

Opinión

Sentencia Corte Suprema de Justicia: «Caso Parral»

Compartir:

El texto que reproducimos a continuación fue insertado como comentario por su autor en al artículo Qué Hacer con los Jueces Torcidos, redactado por Amado de Mérici. Por la gravedad de la denuncia que hace, por el dolor que expresa, por las obligaciones que se imponen, a partir de él, para todos los ciudadanos chilenos demócratas, lo reproducimos a continuación. Al final encontrarán el artículo que escribió el periodista Jorge Escalante en el diario La Nación y que narra los hechos ocurridos en 1973 y el fallo de la justicia chilena.
La Redacción de piensaChile

Con nocturnidad y alevosía, la Corte Suprema de Justicia Chilena y todos los poderes del estado (enquistados por los poderes fácticos y los acuerdos secretos) han institucionalizado la injusticia. A los responsables probados del secuestro de 22 personas, (donde este mi hermano y un menor, que fueron llevados a Colonia Dignidad, torturados y usados como conejillos de india para hacer experimentos en el campo de concentración Alemán en suelo chileno y que aún persiste con otro nombre) fueron dejados en libertad, sin sí quiera pasar una tardecita de verano a tomar el té por la hermosa cárcel de 5 estrellas que los gobiernos de la concentración les han construido a estos criminales.
 
Evidentemente concertado con los medios de manipulación, los aparatos del estado eligieron el penúltimo día de las fiestas de fin de año para comunicar él más alevoso de las resoluciones. Una nueva forma de impunidad que tiene el sistema con claros objetivos, donde incluyo, por omisión y acción o dejar hacer, al gobierno de la Señora Bachelet y todos los anteriores de esta democracia pinochetista. El punto final que necesitamos para que el hermano de Abel abrase a Caín y volvamos a ser hermanos dentro del orden económico imperante y celebrar los 200 años de “libertad” el 2009 todos tomados de la mano.

Pregúntele a los temporeros por esta democracia, por esta justicia, por esta libertad. Cuantos de sus hijos van a la universidad, cuantos de ellos solicitan pasaporte para viajar con sus bellas esposas de vacaciones a Paris, Londres, Berlín, etc. Pregúnteles a esos campesinos de Parral, cuando deben implorar trabajo a los mismos (patrones) que mandaron a sus hijos a las cámaras de torturas.
 
Pero además, como si esto no fuera ya mucho, se las han arreglado para que la Colonia Dignidad no aparezca mencionada ni una sola vez, ni por alusión. ¿Cómo van a molestar a los Cristianos Demócratas y Social Demócratas de Berlín y Baviera?. Amén de la Colonia Alemana, (que no es lo mismo que Colonia Dignidad, pero igual han estado calladito hasta el día de hoy respecto de sus compatriotas nazis). A todos les va muy, pero muy bien económicamente, es de agradecer ¿Para qué abrir viejas heridas? Esta herida debe cicatrizar o se esta llamando a futuras asonadas del mismo corte en caso que de verdad el Pueblo chileno tenga una democracia y sea dueño de su destino. Hago responsable también en esto, a los responsables de defender actualmente nuestros intereses. 22 personas de por allá, Parral, no son “emblemáticos” y se discrimina hasta en la desgracia. Solo esto provoca asco. 
 
Pero esto no es todo, seguramente Ud. tampoco se entero de tamaña noticia. Esto no es raro, siguiendo el modelo ya señalado, los medios de comunicación sirvieron de cortina de humo para que esta cayera lo antes posible de primera línea. El Diario la Nación (diario público de todos los Chilenos) solo tuvo un par de horas y al amanecer (chileno) la noticia en sus páginas de Internet y censuro mis reiterados comentarios a la noticia. Desde luego que no hay censura previa en Chile.

Reconozcamos que, al tratar de esconder la noticia, al menos hubo un poquito de vergüenza, porque miedo ya no tienen. La presidenta y Vidal ya lo demostraron con la Chepa, hay un estado de derecho en Chile que encarcela a los “terroristas Mapuches” con todo el rigor de la ley pinochetista, que da miedo, el suficiente como para no moverse. Para esto (como con los no cara pálidas) no solo usaron la marginación de la noticia como cerco, usaron como botes de humo las condenas de la Novena Sala de la Corte con letras grande y destacados, las condenas por los asesinatos del periodista de revista Análisis, José Carrasco Tapia, Gastón Vidaurrázaga, Felipe Rivera y Abraham Muskatblit, ejecutados por la CNI, condenas que puede ser cambiadas por este tribunal de justicia, como esta. Ó sea, una de cal y otra de arena, pero la de cal es para ellos. Esto solo una horas después de entregar públicamente el caso Parral, (como eufemísticamente se llama a parte de la masacre que realizaron los Colonos Alemanes y las Fuerzas Armadas de Chile en Parral), después de esto ya nada mas se habló. Pero además la blanquearon con la traída a Chile, de los resto de la dirigente comunista Cristina Carreño repatriados desde Argentina, la primera víctima chilena de la Operación Cóndor, destacado en primeras paginas y en colores; y ya se cerro el tema con ese formidable articulo de la Nación: “La vicepresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Chile, Viviana Díaz, valoró lo que el Ejecutivo ha hecho este año, pero no se guardó criticas al Poder Judicial en materia de DDHH”, parece que los efectos del niño Dios nos hacen buenos, muy buenos, demasiado buenos. En el caso que nos ocupa, Colonia Dignidad, no hay nada positivo que mostrar, se ha dejado hacer y se mira para otro lado, también por la agrupación. Parece que todos le tienen miedo o no es de su incumbencia.

El 27 de diciembre del 2007 me han vuelto a condenar y se me tortura todos los días con este veredicto. No hay sábado, ni domingo para este dolor.
28-02-2008


Sala Penal de la Suprema dejó libres a autores de 22 secuestros de Parral, VII Región
Por Jorge Escalante  
 
Caso de quemados con fósforo en Dignidad quedó impune
Resolución del tribunal dejó sin sanción uno de los crímenes más espeluznantes cometidos durante la dictadura y provocó desesperanza e indignación entre los familiares de las víctimas.
 
El último "regalo de Pascua" de la Sala Penal de la Corte Suprema tiene a los familiares de los 22 desaparecidos de Parral con la sensación de que lucharon 30 años para buscar justicia, pero no lo lograron.

El ministro Alejandro Solís había condenado a presidio a los autores de los secuestros con desaparición -17 años al coronel de Ejército (R) Hugo Cardemil Valenzuela, 10 años al coronel (R) de Carabineros Pablo Caulier Grant y 7 años al suboficial (R) de Carabineros Luis Alberto Hidalgo-, pero los cinco ministros de la Sala Penal rebajaron las condenas iniciales y los dejaron libres.

Pese a que a Cardemil lo sentenciaron a 5 años y a Caulier a 4 años -Hidalgo había sido absuelto por la Corte de Apelaciones de Santiago-, la Sala Penal les concedió "libertad vigilada".

La nueva "rebaja Suprema" -como ha sido calificada la sistemática reducción de condenas a los violadores de derechos humanos- tiene una especial connotación pues fue aplicada en uno de los casos más espeluznantes.

EN EL FUNDO

Los 22 detenidos fueron sacados, entre septiembre y octubre de 1973, desde la cárcel de Parral y el retén de Catillo en la VII Región, conducidos a la Escuela de Artillería de Linares, donde servía Cardemil, y desde allí llevados a Colonia Dignidad.

Allí los mataron con ayuda de los alemanes y los sepultaron en una fosa clandestina. A fines de 1978, por instrucción de Pinochet, Paul Sch fer ordenó "limpiar el fundo". Los cuerpos fueron desenterrados, metidos en sacos, quemados con fósforo químico y las cenizas arrojadas al río Perquilauquén. La operación la encabezó Gerhard Mücke, como el mismo lo reconoció ante el ministro Jorge Zepeda.

LOS OTROS AUTORES

De esta manera, los ministros de la Sala Penal, principalmente los magistrados Rubén Ballesteros y Nibaldo Segura -jueces partidarios del perdón absoluto a los criminales del régimen de Pinochet-, dejaron en total impunidad uno de los episodios más conmovedores y masivo del pasado sistema opresor.

Los jueces Hugo Dolmetsch, Jaime Rodríguez y el abogado integrante Juan Carlos Cárcamo dejaron las condenas para Cardemil y Caulier en 5 y 4 años respectivamente, pero les concedieron la libertad vigilada. Ballesteros y Segura estuvieron por absolver totalmente a los autores, pues son partidarios de la amnistía y la prescripción por el paso del tiempo y de desconocer tratados y convenciones de la legislación penal internacional que condena los delitos de lesa humanidad.

Agrupaciones nacionales de familiares de desaparecidos y ejecutados, abogados querellantes y los parientes de las víctimas de Parral han comenzado a manifestar su indignación por esta nueva resolución de la Sala Penal.

Ya anteriormente lo hicieron, protestando ruidosamente por otros casos ante las puertas de este tribunal.

Familiares de las víctimas de Parral viajarán a Santiago en los próximos días para protestar por esta decisión, en contra de la que ya no caben más recursos.

La ola de rebajas a las condenas en este tipo de juicios tendrá todavía su punto más álgido cuando el presidente de esta sala, Alberto Chaigneau, se retire en enero próximo al cumplir 75 años. En muchas oportunidades Chaigneau ha inclinado con su voto la balanza a favor de hacer justicia real por los crímenes del régimen militar, aunque también ha dado su visto bueno para rebajar sustancialmente algunas condenas.

Quien suceda a Chaigneau será vital para brindar mayoría en uno u otro sentido.
* Fuente: Sitio web de La Nación

Compartir:

Artículos Relacionados

Deja una respuesta

WordPress Theme built by Shufflehound. piensaChile © Copyright 2021. All rights reserved.