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La inclusión, el no- egoísmo y el respeto: claves del desarrollo y del bien común

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A propósito del maltrato y la falta de respeto de los que en este país detentan fuerza y poder, y a propósito de nuestra agrupación  -la cual pretende hacer su aporte movilizando reflexiones, respeto, educación, decisiones y acciones-  les enviamos un trabajo que realizamos hace algunos días atrás, con jóvenes de 3º y 4º Medio de un Colegio de Población, acá en la IV Región. 

Creemos que es un aporte, sobre todo porque participaron jóvenes en su elaboración, e incluso porque permite tocar cuestiones que pocos chicos conocen hoy, por ejemplo el sentido de las instituciones del Estado: ¿para qué sirven? ¿para qué están ahí? ¿qué obligaciones deben cumplir quienes dirigen esas instituciones? Aquí se pone el ejemplo del Banco Central (que por estos días elige a su autoridad máxima). Aunque confesamos: lo del Banco Central y lo del acróstico que se descubre en las letras en negrita, es casi un pretexto para educarnos y educar (si es que podemos) en respeto a la dignidad de todas las personas que habitan este suelo herido llamado Chile. El eje de la reflexión es el respeto a los derechos humanos y la dignidad de todas las personas.

Abrazos revolucionarios.

Movimiento Autónomo de Filosofía
UC del Norte, IV Región, Chile.

La inclusión, el no- egoísmo y el respeto: claves del  desarrollo  y  del bien común
Asistimos a un período histórico en que se posicionan ciertas comprensiones y prácticas

Sociales que han venido instalando y reinstalando  preocupaciones, tareas y prioridades

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efinidas como urgencias por la opinión pública nacional: participación ciudadana, no
Exclusión,   no-violencia,   justicia,   desarrollo,  calidad   de  vida,  derechos  humanos,

Cohesión,  diversidad, tolerancia, diálogo, equidad, unidad, dignidad humana, igualdad,  
Integración,   superar   la   pobreza,  profundización  democrática,  Estado  de   derecho,
Solidaridad, responsabilidad social, inclusión [1]. Se trata de un llamado que expresa el 

Interés   de   una  gran   mayoría   democrática  por   repartir  de  manera   más  justa  las

Oportunidades  y  los accesos al bienestar, y porque  la dignidad  humana sea lo central.
No corre ya el “no estoy ni ahí”. Chile  reconquista  su  vocación cívico-democrática en
Ese llamado. Hemos caído en la cuenta de  que   estas  aspiraciones  son irreductibles al
Sentir de ciertos sectores, a un  speech político-oportunista, a un entusiasmo coyuntural.

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ilatarlas,  eludirlas,   no va.  En  tanto tareas,  en rigor  ético  y  cívico,  no corresponde 

Endosárselas sólo al Ejecutivo; tampoco podemos creer que obligan exclusivamente a

Legisladores. Son  tareas de Estado”, pero parten en mí y en nosotros.  En mí, pues el

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ien común [2] que exigimos nos obliga primero a nosotros mismos: ¿Puedo exigirle  a la
Autoridad  respuestas,  inclusión o diálogo si “yo” en mi convivencia diaria no  respeto,
No dialogo  y excluyo por puro egoísmo la voz de otros?    Eludir esto,  tampoco va.  En
Cuanto al en nosotros: Esas tareas obligan a todos. ¿A qué? A poner fin al  egoísmo. Si
Observamos,  por  ejemplo,  el “mayo  chileno”  de  2006,  los  pingüinos,  es  decir los

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olegiales -los que pusimos razones en la mesa y no piedras- hicimos precisamente eso.
En rigor, nuestra voz y las tareas a que aludimos aquí abogaron y abogan porque   Chile
No vuelva a  unilateralismos egoístas, y  porque las relaciones humanas, la educación, el
Trabajo, no sean abandonados a su suerte o a la ética de un laissez-faire [3] mal  entendido,  
Reductor de  la dignidad humana a la  sobrevivencia darviniana [4]  del más  fuerte.
A cada cual según su esfuerzo y necesidad[5] y siempre al servicio de la dignidad. He ahí
La  condición sine  qua  non para construir  un  país  íntegro[6], integrado y que integra,

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in egoísmos, a  todas y a todos. He aquí la agenda valórica[7] de Chile, y una  imperdible
Oportunidad[8]    para    que  demos   un   salto  histórico   al   desarrollo;   entendido  éste   
No  como  carrera  desenfrenada  por  tener y  parecer, sino como proceso de realización

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e  la  dignidad  humana  en  perspectiva  integral,  pues   fragmentar  al hombre es caer 
En  otras formas  de  egoísmo, de  exclusión, de pobreza. Se trata de ver más allá[9],  para  
Conquistar sin miopía unos bienes[10] y valores que no se reducen  al acumular y al  tener.
Incluir y dar a todos lo suyo, sí,  pero  sin  caer   en  la  trampa  de  los  reduccionismos.

Si  pudiéramos,  en  definitiva,  identificar   la  urgencia  Nº 1    del Chile  no  egoísta   e

Inclusivo aludido aquí, ¿qué diríamos? Que la urgencia Nº 1 se llama respeto: a todos: a

Obreros, a  empresarios,  a  la  señora  Juanita,  al personero público,  a  los privados, a

Niños,  a  ancianos, a jóvenes, a  la mujer, a  los del centro; a  los del sur, del norte,   del
Este  y  del  Oeste;  a   las  minorías, a  las  mayorías,  a  los  inmigrantes [11],  a  los que no
Son creyentes y a los que lo son; a los del barrio A, del B, del C, etc. ¡Pero atención! No

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asta con ese respeto. Si  somos verdaderamente demócratas, debemos incluir   también
A otros destinatarios del  respeto, entendiendo que éste obliga  a nivel  de un imperativo

Kantiano [12] razonado y universal, muy superior a meros gestos de buena crianza. pues,
Aquellos otros destinatarios, ¿quiénes son? Las instituciones [13]  del Estado [14]. Sí,  porque
Nuestras  necesidades de mayores oportunidades, de mayor bienestar y de inclusión,
Exigen que no se pierda de vista que la materialización de esas demandas no se juega

Sólo en nuestras voces y aportes, sino también en las voces y aportes de las instituciones

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e un Estado que actúa a través de éstas en conformidad con la Constitución[15]  y la ley[16].
El Chile no egoísta nos obliga, pues, a ensanchar el respeto, la idea de democracia, la de


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nidad en la diversidad, la de bien común. Tal ensanchamiento debe inscribirse en una
Noción cívico-valórica irrenunciable: el Estado de Derecho[17].  ¿Es realizable   lo  que  el


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aís ha definido hoy por hoy como sus preocupaciones, prioridades,  tareas y urgencias?
Antes de responder,  hay  que  hacer  un  ensanchamiento  también del  enfoque, a fin de
Integrar   -o recordar-  al menos  un dato, uno solo,  referido  al  Estado de Derecho.
Según  Elías Díaz, el Estado  de  Derecho es  “el Estado  sometido  al   Derecho”.    La 


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nformación que suministra esta definición es tan breve como precisa. En Chile, todos
Nos regimos por leyes. ¿Y cuál es la finalidad de nuestro Estado de Derecho? La propia

Constitución   nos     responde: “su   finalidad    es    promover  el   bien  común,    para
Lo cual debe contribuir a crear las condiciones sociales que permitan a todos y a cada

Uno de los integrantes de la comunidad nacional –recuérdese lo dicho arriba, por favor-  
Su mayor realización espiritual y material posible…”[18].¿No es acaso la visión integral e

Inclusiva      de      desarrollo     humano    que     hemos    venido    visualizando    aquí?  

Volvamos ahora la mirada a aquello que dejamos pendiente, vale decir, a las tareas que

Obligan  a todos.  ¿Son éstas realizables?  Por cierto que sí.   ¿Cuándo?   En el  presente


Y
en el futuro. Pero  –y esto es de capital importancia-  sin  olvidar  el  imperativo  ético


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ue  obliga  a  todos  a  no endosar  los  deberes  propios  a  otros.   ¿Y  de qué manera?
Uniéndonos  en  la  diversidad  y  creando  las  condiciones  éticas   y  sociales  para que
Ello sea posible. ¿Y quién tiene el primer deber de crear esas condiciones? ¿Se trata de

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lguien en particular?  Insistimos,  se trata de  deberes que parten  en mí  y en nosotros,
Pero también son “tareas de Estado”. La Educación Cívica  aclara  que  éste   presupone
Un pacto,  un “Contrato Social” asumido  por todos.   Por tanto, hablamos de deberes y
No de un primer deber, y de   una alianza  que no obliga a alguien  en particular[19]  sino a

Todos. En una palabra, la institucionalidad democrática implica la  co-existencia de una
Amplísima red humana de acciones  individuales y colectivas, privadas y públicas, cuyo
Norte es  la construcción cooperativa de  esas condiciones. Respecto a las  instituciones,


A
ntes de pasar  al  epílogo  de    la  reflexión que nos ocupa,  vale la pena insistir en que
La    Constitución  es  la que  legitima  a  estas   instituciones. ¿Y cómo se las reconoce?

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ásicamente, cada vez que  hablamos de  la Administración Pública[20] hablamos de ellas.

Invitamos,  a  continuación   –y ya para terminar-  a revisualizar a una de ellas. Su papel

Es clave: refiere al ámbito de la Economía[21].  Hablamos del Banco Central  de  Chile[22] 
No nos detendremos en detalles.  Puntualmente, ¿Cómo esta institución favorece la

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reación de esas condiciones?  Dicho de otro modo,  ¿Cómo  responde  esta  institución
Objetiva y concretamente a las necesidades materiales de la señora Juanita? Tomando

Medidas claves, por ejemplo, en materia monetaria y resolviendo qué hacer, como

última   instancia técnica decisoria, para  controlar la inflación. Y   la   inflación… 
No puede  “desinflar” la democracia   ni el desarrollo. ¡Que bueno que esté bajo control! 

Notas
1.Palabra lema de nuestra Presidenta Michelle Bachelet, y que al parecer hace carne en el Chile del presente.
2 Bien Común: “Interés general por mantener la subsistencia y asegurar el desarrollo de la Nación, a través de la satisfacción de las necesidades colectivas e individuales de sus miembros”. Historia y Ciencias Sociales, Texto para el estudiante, 1º Medio, Educación Nuestra Riqueza, Gobierno de Chile, Editorial  mn marenostrum, 2006,  p. 163.
3 “No podemos culpar a Adam Smith por un capitalismo sin conciencia. él abogó por el laissez-faire, pero sabemos que no confundió el derecho a la libertad de acción con la licencia para explotar a los trabajadores o involucrarse en prácticas de negocios inescrupulosas”. Rich de Vos, Capitalismo Solidario, Lasser Press Mexicana, S.A. de C.V., 1994, p. 115. Sin embargo, contrástese  lo citado con lo que el propio Adam Smith proclama: “No he visto nunca que quienes dicen comerciar para el bien común hayan hecho mucho bien” (Al parecer no creía mucho en el bien común).  La riqueza de las naciones, citado en Libertad de Elegir – Hacia un nuevo liberalismo económico, Milton y Rose Friedman, Grijalbo, Barcelona, 1980, p. 15.
4 Hacemos analogía, transfiriendo lo planteado por Charles Darwin, respecto a la evolución de las especies, al mundo humano.
5 Aunque la frase se asocia inmediatamente con Karl Marx, nosotros hemos consultado  una nota valórico-trascendente contenida en el Libro de los hechos (Hch. 2, 44) de las Sagradas Escrituras del NT. éstas relatan que en la comunidad cristiana naciente se compartían los  bienes “de acuerdo a lo que cada uno de ellos necesitaba”. Un principio que, a nuestro juicio, debiera estar presente en la distribución de  la riqueza en un país mayoritariamente católico-creyente como el nuestro.
6 General Juan Emilio Cheyre, íntegros e integrados, “Oportunidades y riesgos en el contexto internacional”, ponencia dictada en el XVII Seminario Internacional “Estrategias que crean valor. Crecimiento + rentabilidad en un contexto global”, organizado por el Departamento de Ingeniería Industrial y  de Sistemas de la Escuela de Ingeniería  de la UC, el 4 de enero de 2005, Revista Universitaria, Nº 87, p. 36,  2005.
7 La agenda valórica que algunos discuten no  se reduce al tema del aborto y la eutanasia, sino que compromete todas las dimensiones de los humano, incluyendo por cierto lo económico.
8 A propósito de lo sucedido en mayo de 2006, parece que Chile en general no vio en el paro estudiantil secundario sólo una crisis, sino una oportunidad. Chile entero, como un ratoncito, redefine lo que hay que hacer en materia de Educación Pública. Existe la creatividad para producir más queso (oportunidades en Educación), e incluso con mejor reparto y de mayor calidad. Sugerimos releer  ¿Quién se ha llevado mi queso?, de Spencer Johnson, Ediciones Urano, 2003, Barcelona.
9 Frase-fuerza que acá en el Norte ha hecho famosa la Universidad Católica del Norte y que hemos insertado en  nuestro texto respondiendo a una sugerencia hecha por el  profesor coordinador  de nuestro equipo y trabajo.
10 Referimos a bien económico. La página web del Banco Central de Chile define a los bienes económicos como  “una mercancía capaz de proporcionar la satisfacción directa o indirecta, mediata o inmediata de las necesidades humanas. Existen diferentes tipos de bienes económicos: de consumo, de inversión, bienes duraderos y no duraderos, bienes de capital y bienes intermedios”. Recomendamos esta página.
11 Consúltese sobre el aporte de peruanos a la economía doméstica de algunas familias chilenas, y a la discriminación de que son víctimas. Nota: Nuestra perspectiva es una perspectiva económico-valórica, afín al bien común republicano moderno.
12 Recomendamos echar un vistazo al libro Breve Historia de la Filosofía, de Humberto Giannini, Editorial Universitaria, Santiago de Chile, 1994. Kant: imperativo categórico.
13 Instituciones: “Organismos que realizan una función de interés público.//órganos del poder soberano del Estado”. Diccionario Enciclopédico Ilustrado, Editorial Grupo Libro, Madrid, 1993, p. 783.
14 Estado: “El Estado se concibe… como la personificación jurídica de una agrupación humana que habita dentro de un territorio común, con individuos asociados bajo una misma autoridad y un fin que los vincula a todos”. Definición contenida en la p. 46 del libro Educación Cívica, Enseñanza Media, de María Francisca Sandoval Precht, Ernesto J. Basaure y Humberto Nogueira, Santillana, 1997.
15 Constitución: “Ley fundamental de un Estado que establece esencialmente los derechos y obligaciones de los ciudadanos y de sus gobernantes, y la organización del mismo”. Diccionario Enciclopédico Ilustrado, Editorial Grupo Libro, Madrid, 1993, p. 367.
16 Artículo 1º del Código Civil de Chile: “La ley es una declaración de la voluntad soberana que, manifestada en la forma prescrita por la Constitución, manda, prohíbe o permite”. Editorial Jurídica de Chile, Santiago de Chile, edición 1993, p. 31.
17 Es igual a decir Estado Democrático de Derecho. Si quiere saber más, consulte a Elías Díaz, Estado de Derecho y sociedad democrática, Madrid, Taurus, p. 31,  o vaya a  Google.
18 Artículo 1º, inciso cuarto de la Constitución Política de la República de Chile.
19 Sin embargo, en lo que refiere a lo económico puntualmente, lo dicho no debe interpretarse como una postura que aboga por desincentivar la iniciativa privada para crear mejores condiciones y calidad de vida. No estamos postulando aquí un Estado Padre. De hecho estamos totalmente de acuerdo con lo que dice
un grande de la iniciativa económica de los particulares, Milton Friedman: “La libertad económica es un requisito esencial de la libertad política”.  Sin embargo,  nos parece que no es muy  justo que una nación se sustente en el principio jeffersoniano-estadounidense de que cada persona tiene derecho “a perseguir sus propios intereses”; principio enfatizado por Milton Friedman, quien minusvalora el papel del bien común en la Economía. Consúltese  Libertad de Elegir – Hacia un nuevo liberalismo económico, Milton y Rose Friedman, Grijalbo, Barcelona, 1980. p. 16.
20 Administración Pública: “Conjunto de organismos del Estado. // Conjunto de funciones del Estado”. Diccionario Enciclopédico Ilustrado, Editorial Grupo Libro, Madrid, 1993, p. 24.
21 Economía: “Rama de las ciencias sociales que trata de la producción, distribución y consumo de los bienes y servicios. Ciencia cuyo objeto de estudio es la organización social de la actividad económica. En otras palabras, economía es la ciencia de cómo las sociedades resuelven o podrían resolver sus problemas económicos”. Página web Banco Central de Chile.
22 Banco Central de Chile: “Es un organismo autónomo, de rango constitucional, de carácter técnico, con personalidad jurídica, patrimonio propio y duración indefinida, cuyo objetivo es velar por la estabilidad de la moneda y el normal funcionamiento de pospagos internos y externos.”. Ver  Google.

Nota de cierre: Léase las letras en negrita, al inicio de cada frase, de arriba abajo. Es un acróstico


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