Las utopías son programas políticos: Los duros años que vienen para el pueblo
La prensa vendida de la televisión se deleitó hablando de nuestro gran sistema democrático y seguirán engordando con este triunfo electoral de la derecha. Matías del Río los deja…
Ahora se entienden muchas cosas: Chile es uno de los países con la percepción más distorsionada de la realidad
Al consultar por cuántas mujeres, de cada 100, entre 15 y 19 años están embarazadas, en Chile la respuesta es 35, cuando en realidad son 4,8.
Al consultar «de cada 100 personas que están en la cárcel, ¿cuántas son extranjeras?», los chilenos respondieron 21, pero las cifras muestran que solo son 3,4.
Más que un triunfo, una derrota
No hay quien no haya asumido, hasta aquí, que a la ideología hegemónica se le hará todavía más difícil gobernar y seguir imponiéndose con el Gobierno electo. Cuando lo más probable sea que los resultados de anoche enciendan la protesta social y colabore a sepultar a los añosos y corruptos referentes de la izquierda y de aquel progresismo “sin progreso”, realmente.
Chile. Gana abstención y Piñera es presidente
Nuevamente triunfó la abstención en las elecciones presidenciales 2017 con más de un 50 % de personas habilitadas para sufragar que no lo hicieron. Chile reafirma su liderazgo de menor participación electoral en América Latina, y segundo en el mundo luego de Madagascar.
Mientras se escribe atropelladamente la presente nota, para las y los empobrecidos, los asalariados, la autodenominada «clase media», los endeudados, los indígenas, las antipatriarcales, los jóvenes sin porvenir, el ambientalismo consecuente, la vejez en la miseria, la disidencia sexual y los pueblos sin derechos sociales que habitan Chile, tendremos que continuar bregando, como desde hace tanto, para volvernos una sola mano. Porque la mano reunida es la condición necesaria del puño blindado capaz de destruir la bota del amo y superar un modo de existencia inhumano
“El resultado del Frente Amplio ha desordenado el panorama político en Chile”
La gran sorpresa de las pasadas elecciones presidenciales fue el resultado del Frente Amplio, una heterogenea coalición de izquierdas encabezada por Beatriz Sánchez. La candidata del Frente Amplio quedó en tercer lugar, obtuvo el 20 % de los votos (quedándose a 2 puntos de pasar a la segunda vuelta) y la coalición logró 18 diputados y 1 senador, algo inédito para una fuerza antineoliberal al margen de los partidos tradicionales.
Balotaje en Chile: : Entre la aritmética simple y el cambio de fondo
Ver al Frente Amplio sólo interesados en acceder al poder, sería, además de mezquino, contraproducente para los seguidores de Sánchez que reclaman una nueva forma de hacer política en Chile. El factor de fondo es el programático y es allí donde Guillier debería captar las señales de un millón doscientos mil electores que al votar por Sánchez apuntaron a abatir pilares del orden heredado de la dictadura que han permanecido bajo los sucesivos gobiernos de la Concertación por la Democracia, primero, y de la Nueva Mayoría con Bachelet.
La débil democracia chilena
Lo más preocupante es que la baja participación electoral no se distribuye de manera homogénea. Son los jóvenes y las personas de origen popular, de nivel socio económico bajo, los que menos votan. Y ello es especialmente manifiesto en las grandes ciudades del país. Y, cuando no acuden a votar es porque no esperan mucho de la política, no creen en los políticos.
“Llévame a Chile, hermanita”
Es hora de que mujeres chilenas, peruanas y bolivianas nos sentemos a conversar. Largo y tendido, como acostumbramos entre nosotras. A charlar sobre nuestros hijos y de los sueños que amasamos para ellos. De nuestros recuerdos y de eso que llamamos futuro. En ese diálogo surgirían ideas y posibilidades de encuentro que terminarían, en particular respecto de Bolivia, con una relación a medio terminar, como quedó hace más de 100 años, y que se viene arrastrando en la lógica masculina del tira y floja, y que nos ha impedido potenciarnos como países vecinos y socios estratégicos.
Los perros (Marcela Said)
«En Chile aún no se ha abordado la complicidad civil con la dictadura»
Cualquier ciudadano de un país democrático en cuyo pasado reciente —en términos históricos— se haya experimentado el trauma de un gobierno totalitario o el enfrentamiento violento de distintos bandos dentro de la población civil puede encontrar en Los perros (Marcela Said) conflictos reconocibles.
Derecha venezolana: Con el culo al aire
En Chile, marzo de 1973, el contubernio de la derecha con la democracia cristiana esperaba que la política de desabastecimiento, de atentados, las asonadas callejeras, y los asesinatos incluso de militares, reducirían el apoyo al gobierno de Salvador Allende a su más mínima expresión. […] Fracasaron rotundamente. No sólo el apoyo electoral a Unidad Popular había aumentado considerablemente, sino que el número de diputados y senadores obtenidos por la izquierda reducía los planes de la derecha a papel mojado. Lo peor era que, extrapolando, ineludiblemente para 1976 la Unidad Popular habría alcanzado la mayoría suficiente para continuar gobernando.