Austeridad fiscal en Chile. Los hechos detrás de las cifras
La semana pasada, con mucha fanfarria, el gobierno de Chile anunció medidas para reducir gastos. El argumento fue que como muchos chilenos tenían que apretarse el cinturón, también lo harían las autoridades. Todo muy bien, excepto que hay una pequeña diferencia. Efectivamente la mayor parte de los chilenos encuentra difícil llegar a fin de mes, con la inflación en torno al 10%, pero Hacienda no tiene ese problema. En realidad, la austeridad en el gasto fiscal es tan relevante como regalarles condones a los eunucos del harem.
De todos modos no es un programa tan, tan austero. El uso de teléfonos celulares y el consumo de electricidad y de agua deben ser reducidos en los círculos oficiales (presumiblemente ya no tirarán la cadena después de cada “cagada”).
Consumidores versus «Retailers»
Los políticos no han hecho suyo el altísimo costo del crédito que pagan los consumidores, lo que se refleja en el hecho que 2.600.000 chilenos son morosos. Esto representa el 40% de la población activa del país.
Pero el chileno en las encuestas no menciona los problemas de endeudamiento. Este fenómeno de opinión pública es similar a lo sucedido con los alemanes encuestados después de la segunda guerra mundial, donde la mayoría manifestó desconocer las atrocidades cometidas por los nazis en los campos de concentración.
Chile: un socialista irlandés en Santiago
“En Irlanda tenemos un gran problema, porque los dirigentes de los sindicatos tienen acuerdos con el gobierno y con los patrones. Los dirigentes no quieren luchar contra el neoliberalismo, en realidad. El Partido Laborista, por ejemplo, que en la actualidad se encuentra en la oposición, se ha convertido en un partido capitalista. Es decir, que el pueblo irlandés necesita un nuevo partido para los trabajadores. Pero no es fácil la tarea. Sin embargo, yo creo que es nuestra responsabilidad procurar la creación de un nuevo instrumento político, con el fin de vehicular la lucha de los jóvenes y los trabajadores contra el neoliberalismo.”
El prudente arquero: elegía a Juan Bustos Ramírez
“Vuestra Excelentísima: Justicia, eso es únicamente lo que solicitan mis representados. Ya desde Aristóteles a Santo Tomás se ha señalado que la justicia es la virtud plena. Y Aristóteles, con aquella metáfora del prudente arquero que lanza su flecha –y la prudencia es inherente a la administración de justicia-, señalaba que lo justo es lo exacto. No es lo excesivo, pero en modo alguno es tampoco lo ínfimo.” Fue la primera frase con que el abogado Juan Bustos inició su contundente alegato, que interpretó a miles de ciudadanos [pidiendo condena para los responsables del asesinato de Letelier].
Para qué sirve el Código de Justicia Militar
El Senado argentino viene de ratificar -el 7 de agosto- una decisión adoptada por la Cámara de Diputados en noviembre pasado y que era esperada por amplios sectores de la población: la derogación del Código de Justicia Militar. “Desde ayer”, escribe el diario Clarín “los militares son como cualquier hijo de vecino en la Argentina”. Los delitos cometidos por militares serán juzgados según el Código Penal en tribunales de la Justicia ordinaria.
¿Está Evo en peligro?
Impresiones antes del referéndum revocatorio del 10 de agosto
Bolivia ha cambiado. Asisto a una gran recepción en la Paz organizada por el embajador de Cuba. Mojitos, bufé y bailes. ¿Dónde estamos? En la sala de fiestas…. del ejército boliviano. ¡Si!, aquel ejército que asesinó al Che.
Bolivia ha cambiado, pero no todo el mundo le desea lo mejor. He venido in situ para informarme junto a otros intelectuales progresistas de distintos países: Frei Betto, Ernesto Cardenal, Ramsey Clark, François Houtart, Luis Britto García, Pascual Serrano… Unas jornadas de encuentros e intercambios con intelectuales, artistas y representantes de las comunidades indígenas de toda Bolivia.
La imposible comensalidad después de Doha
El vergonzoso fracaso de la Ronda de Doha se debe principalmente a los países ricos, que quisieron garantizarse la parte leonina en los mercados de los pobres. En un cuadro de hambre ya instalada se desperdició la oportunidad de asegurar comida en la mesa de los hambrientos. El sueño ancestral de la comensalidad que nos hace humanos, cuando todos podrían sentarse a la mesa para comer y comulgar, se vuelve aún más distante. Además de la crisis alimentaria, todavía nos asolan la crisis energética y la climática.
La derecha busca el golpe y la Central Obrera le es funcional al abrir otro flanco
Los antiguos romanos decían ‘historia magistra vita est’. No es, precisamente, la primera vez que gobiernos que llevaban adelante profundos cambios sociales, cayeron empujados en forma combinada por los que perdían con tales reformas y por aquellos que no aceptaron sostener el proceso revolucionario mediante sistemas de alianzas apropiados para esos tiempos. Los casos a encontrarse son abundantes si se los rastrea y por eso, recordar ese dicho romano que en otros términos también puede encontrarse en ese gran historiador que fuese Tucídides de Atenas, debiera servir hoy a los dirigentes de la COB para reflexionar sobre el rol que están jugando de cara al referendum revocatorio del próximo domingo en la inmediatez y frente a la batalla de fondo que se libra en la sociedad boliviana.
Bolivia: Evo o «p’atrás»
Saben que si se vota, gana Evo
Pero la guerra de desgaste, la operación de "acoso y derribo", o el más explícito "voltear al indio" se ha convertido en una carrera "contra-reloj". Porque todos los indicios apuntan a que el domingo puede que algún prefecto saque más votos revocatorios que los que obtuvo cuando fue elegido. Y legalmente tendría que dejar su cargo.
Y las encuestas predicen que los votos contrarios a Evo Morales no alcanzarán el necesario 53,7 % para que su mandato resulte revocado. Ese fue el margen alcanzado en diciembre del 2005 cuando resultó electo.
Municipales 2008 y el descrédito de la política
La justicia, la tan cacareada igualdad, la protección y seguridad social, sigue siendo una quimera que se ha limitado a la política de lo paliativos, dadivas y mendrugos para los sectores sociales más golpeados por el capital neoliberal, y avalados por la casta política que cogobierna el país, que ahora volverá a solicitar el voto de los electores, para ellos seguir encumbrándose por las redes del poder, de la corrupción, el tráfico de influencias y sus propias carreras políticas.