Brasil: ¿Hacia dónde vamos? Impases de la crisis actual
por Leonardo Boff (Brasil)
8 años atrás 3 min lectura
2016-07-01
La actual crisis brasileña, tal vez la más profunda de nuestra historia, está poniendo en jaque el sentido de nuestro futuro y el tipo de Brasil que queremos construir.
Celso Furtado afirmaba con frecuencia que nunca conseguimos realizar nuestra auto-construcción, porque fuerzas poderosas internas y externas o articuladas entre sí lo habían impedido siempre.
Efectivamente, aquí se formó un bloque cohesionado, fuertemente solidificado, constituido por un capitalismo que nunca fue civilizado (mantuvo la voracidad manchesteriana de sus orígenes), financiero y rentista, asociado al empresariado conservador y anti-social y al latifundio voraz que no teme avanzar sobre las tierras de los dueños originales de nuestro país, los indígenas, y por añadidura las de los quilombolas. Siempre frustraron cualquier reforma política y agraria, de suerte que hoy el 83% de la población vive en las ciudades (más exactamente, en las periferias miserables), pues ésta se sentía desplazada y expulsada del campo. Estas élites altamente adineradas se asociaron a unas pocas familias que controlan los medios de comunicación o son sus dueños.
Ese bloque histórico difícilmente será desmontado, una vez que el tiempo de las revoluciones ya pasó. Los pocos cambios de orientación popular y social introducidos por los gobiernos del PT están siendo bombardeados con los cañones más poderosos. Los herederos de la Casa Grande y el grupo del privilegio están volviendo e imponiendo su proyecto de Brasil.
Para ser sucintos e ir al punto central: se trata del enfrentamiento entre dos visiones de Brasil.
La primera: o nos sometemos a la lógica imperial, que nos quiere como socios incorporados y subalternos, en una especie de recolonización intencionada, obligándonos a ser solamente abastecedores de los productos in natura (commodities, granos, minería, agua virtual, etc.) que ellos casi no tienen y necesitan urgentemente.
La segunda: o continuamos osadamente con la voluntad de reinventar Brasil, con un proyecto sobre bases nuevas, sustentado por nuestra rica cultura, nuestras riquezas naturales (extremadamente importantes tras la constatación de los límites de la Tierra y del calentamiento creciente), capaz de aportar elementos importantes para el devenir futuro de la humanidad globalizada.
Esta segunda alternativa realizaría el sueño mayor de aquellos que pensaron un Brasil verdaderamente independiente, desde Joaquim Nabuco, Florestán Fernandes, Caio Prado Jr y Darcy Ribeiro hasta Luiz Gonzaga de Souza Lima en un libro que hasta ahora no ha merecido la debida atención (La refundación do Brasil: rumbo a la sociedad biocentrada, RiMA, São Carlos, SP 2011), y de la mayoría de los movimientos sociales de cuño libertario. Éstos siempre proyectaron una nación autónoma y soberana, pero abierta al mundo entero.
La primera alternativa que ahora vuelve triunfante con el presidente interino Michel Temer y su ministro de relaciones exteriores José Serra, prevé un Brasil que se rinde resignadamente al más fuerte, muy dentro de la lógica hegeliana del señor y del siervo. A cambio recibe inmensas ventajas, beneficiando especialmente a los adinerados (Jessé Souza) y a sus socios. Éstos nunca se interesaron por las grandes mayorías de negros y pobres que ellos desprecian, considerándolos peso muerto de nuestra historia. Nunca apoyaron sus movimientos, y cuando pueden, los rebajan, difaman sus prácticas y con el apoyo del Estado elitista controlado por ellos, los criminalizan. Cuentan con el apoyo de Estados Unidos, como ha señalado nuestro mayor analista de política internacional Moniz Bandeira, pues no aceptan la emergencia de una potencia en los trópicos.
¿De dónde nos podrá venir una salida?
De arriba no podrá venir nada verdaderamente transformador. Estoy convencido de que sólo podrá venir de abajo, de los movimientos sociales articulados, de otros movimientos interesados en cambios estructurales, de sectores de partidos vinculados a la causa popular. El día en que las comunidades favelizadas se conciencien y proyecten otro destino para sí y para Brasil, se dará una gran transformación, palabra que hoy sustituye a la de revolución. Las ciudades se estremecerán.
Entonces sí podrán los poderosos ser «derribados de sus tronos», como dicen las Escrituras, el pueblo ganará centralidad y Brasil tendrá su merecida independencia.
*Fuente: Servicios Koinonia
Artículos Relacionados
Venezuela: Un Polo para descongelar la Revolución
por Aram Aharonian (Venezuela)
14 años atrás 10 min lectura
MOP-Gate, CAE y privatizaciones: El oscuro pasado de Ricardo Lagos
por Abril Becerra (Chile)
8 años atrás 5 min lectura
Lo mejor que puede hacer un chileno es irse de Chile
por Nathan Lustig (EE.UU.)
9 años atrás 5 min lectura
Debemos cuidar los Recursos Naturales de Nuestra América
por EcoPortal
19 años atrás 3 min lectura
Pablo Longueira juega al gato y al ratón con el presidente Sebastián Piñera
por Rafael Luis Gumucio Rivas (Chile)
14 años atrás 3 min lectura
Critica al movimiento por una nueva Constitución para Chile
por Luis Casado (Francia)
17 años atrás 2 min lectura
Los Cinco Héroes de regreso a Cuba, 10 años después
por piensaChile
1 hora atrás
21 de diciembre de 2024
La razón por la que fueron enviados a esa localidad en específico fue el número de actos de terrorismo contra Cuba que procedía de dicha localidad, así como varios atentados terroristas en La Habana organizados por el terrorista anticomunista Luis Posada Carriles.
Vergüenza y olvido: Chile se abstiene en votación contra la erradicación del colonialismo en la ONU
por Félix Madariaga Leiva (Chile)
2 días atrás
19 de diciembre de 2024
¿Qué razones podría tener nuestro gobierno para abstenerse de apoyar la independencia de pueblos y países aún bajo el colonialismo? Sobre todo, nos confunde que un país, como el nuestro, que fue colonia española por tres siglos no vote a favor de esta moción. Aún más desilusionante, pero no extraño, es que los medios de comunicación no incluyan esta importante información en su agenda.
Juana Aguilera y desaparición de Julia Chuñil: «Le dijo a su familia ‘si me pasa algo ya saben quién fue'»
por Radio UdeChile
8 horas atrás
21 de diciembre de 2024
La presidenta de la Comisión Ética Contra la Tortura reflexionó en torno a la situación de la líder mapuche, cuyo paradero se desconoce desde el pasado 8 de noviembre. Sobre los recursos dispuestos para su búsqueda, aseguró que no son suficientes.
“La desaparición de Julia Chuñil es parte y consecuencia de la corrupción del sistema”
por Villa Grimaldi (Chile)
5 días atrás
16 de diciembre de 2024
«Estamos lidiando contra un sistema donde desborda la corrupción y nos toca sobrevivir, pero como nosotros somos defensores del alma, nos nace del alma defender el territorio, pues nadie nos formó, no nos vamos a rendir. A nosotros nos dicen estar atacando este río o este bosque y, a la hora que sea, nosotros nos movilizamos y vamos a detener su destrucción.»