Esta fue la pequeña reflexión que me permití hacer ayer en redes después de un día y medio viendo de todo, especialmente, mensajes de desolación y mucha tristeza ante la pérdida de Notre Dame. Una pérdida que será restaurada en breve gracias a la inestimable ayuda de las grandes fortunas, que están ahí para cuando se las necesita. O, al menos, para cuando el nivel de postureo de la causa lo merece.
Pero, como ya sabemos, todo tiene su otro lado, su otra tonalidad, su claroscuro y su dualidad. Y en ella nos hallamos al leer el siguiente texto que se ha viralizado en redes y que tenéis a continuación.
«Hemos perdido la cabeza.
Estoy flipando, me siento estafada, indignada, me duele la mente y el cuerpo, siento como si me hubieran dado una paliza de realidad. En 12 horas se han recaudado más de 700 millones de euros para restaurar la Catedral de Notre Dame. Es un símbolo de culto católico, sede de la archidiócesis de París, la capital de Francia, uno de los monumentos más populares de la capital francesa y del mundo, sí, pero no deja de ser un edificio. No hay dinero para nada, pero sí para esto.
Mientras todo el planeta mira a la Catedral de Notre Dame, cuelga fotos de sus viajes y escribe bien grande que se le parte el corazón, sabed que se siguen vertiendo al mar 200 kilos de plástico por segundo, siguen muriendo 8.500 niños de hambre cada día, en India hay 4 violaciones cada hora y en el mundo 137 mujeres son asesinadas cada 24 horas.
Cada día, 41.000 niñas se casan sin haber cumplido los 18 años, casi 160 personas al día llegan en patera a España huyendo del hambre y del horror.
SEOM ha estimado que el número de nuevos casos de cáncer diagnosticados en España en el año 2019 alcanzará los 277.234, un 12% más que en 2015…
Hoy mismo, el río Paraguay ha sufrido su mayor crecida y ha dejado 88.000 desplazados, sin hogar.
Hoy mismo, el ciclón Idai provoca uno de los mayores desastres naturales del hemisferio sur que ha afectado al sudeste de África, en concreto a Mozambique, Malaui y Zimbabue, y la ONU lo ha calificado como devastador.
Hoy mismo se ha ha sabido que ya son 370.000 los muertos en Siria.
Así podría seguir y seguir y seguir.
Dejemos de ser tan instagramers, posturitas e HIPÓCRITAS. Preocupémonos por el futuro, por lo que dejamos, por lo que somos, por lo que queremos ser. Debemos preocuparnos por el planeta, es URGENTE.
La Catedral de Notre Dame puede esperar, los niños que mueren de hambre, los océanos sin arrecifes de coral, la disminución drástica de abejas polinizadoras, la sobrecogedora cantidad de enfermos por las mierdas que comemos y los desastres naturales NO pueden esperar.
Centrémonos en lo importante de puta vez, por favor.»
Y claro, ya empiezan las redes a arder, y lo primero que parece incendiarse es esa hipocresía con la que nos revestimos… Porque si hablas de la pena que te supone que se queme Notre Dame eres una persona frívola. Pero, si hablas de que arda entera pues es un símbolo del patriarcado, eres una persona poco menos que inhumana. Claro, pero si se te ocurre hablar de que hay muchas cosas peores en un día en el que el mundo entero clama por Notre Dame, entonces eres lo peor, y una demagoga, por supuesto.
De este modo, volvemos a los enfrentamientos, a las posturas opuestas y a missentimientos encontrados. Me da pena el incendio, y no soy hipócrita (la verdad es que tampoco se me ha ocurrido subir la última foto que tengo junto a la catedral… demasiado postureo), pero más pena me da saber que en un día 750 millones ya están esperando a ser utilizados para su reconstrucción cuando, bien sabemos, eso puede esperar y, sin embargo, otras muchas cosas no. No es demagogia, es realidad, es concienciación con el mundo que nos rodea, con lo que hemos conseguido como sociedad…
Que el mundo se solidarice con Notre Dame ya es un paso, un paso adelante, pero no es el paso que necesitamos. Necesitamos solidaridad en temas que parecen no rozarnos, que parece que desconocemos o que no nos bombardean con ellos a todas horas y, por tanto, pasan desapercibidos ante nuestras retinas.
Tenemos un serio problema, pero parece no importar, pues en nuestra burbuja primermundista no nos afecta.
🌐❗ La mezquita Al-Aqsa en Jerusalén, la tercera más sagrada del islam, se ha incendiado a la vez que ardía la Catedral Notre Dame en París.
En este caso se ha debido a un fallo eléctrico que solo ha afectado a la sala de rezo Marwani. pic.twitter.com/Koi5lJjVOH— Bendita Internacional (@BenditaInter) 15 de abril de 2019
Y todo por una catedral…
Carmen Arísegui
Artículos Relacionados
La política chilena en manos del narcotráfico
por Medios Nacionales
7 años atrás 1 min lectura
Venezuela: Habla la madre de Orlando Figuera, joven venezolano incendiado
por NotiTarde (Venezuela)
7 años atrás 1 min lectura
Chavez, te avísamos
por Manuel José Montañez Lanza (Vancouver, Canadá)
12 años atrás 3 min lectura
Los de siempre, como siempre, ¡mienten descaradamente!
por Redacción piensaChile
6 meses atrás 1 min lectura
Michelle Bachelet y el Imperio
por Haroldo Quinteros Bugueño (Iquique, Chile)
5 años atrás 6 min lectura
Veterano de la guerra de Irak vierte duras críticas contra gobierno estadounidense
por LibreRed
14 años atrás 6 min lectura
Promedio de pensiones de FFAA y de Orden podrían financiar seis pensiones garantizadas universales
por JC Contreras Jara (Chile)
2 horas atrás
Considerando que la Pensión Garantizada Universal (PGU) asciende a $214 mil, con las pensiones promedio entregadas a las Fuerzas Armadas y de Orden podrían financiarse 6,4 PGU. Otro equivalente a lo entregado por Dipreca y Capredena se podría traducir en casi 3 sueldos mínimos.
Los ojos de los niños palestinos
por Alejandro Lavquén (Chile)
3 horas atrás
Los niños de la playa de Gaza avizoraban el mar
con sus ojos palestinos, que son luz y asombro
como los ojos de todos los niños del mundo.
Jugaban con las olas, tan lejos y tan cerca de la muerte.
No lo sabían. No lo imaginaban. No cubrían sus rostros.
Los ojos de los niños palestinos
por Alejandro Lavquén (Chile)
3 horas atrás
Los niños de la playa de Gaza avizoraban el mar
con sus ojos palestinos, que son luz y asombro
como los ojos de todos los niños del mundo.
Jugaban con las olas, tan lejos y tan cerca de la muerte.
No lo sabían. No lo imaginaban. No cubrían sus rostros.
Salka Embarek: «Soy el Sáhara»
por Capire
1 semana atrás
“El poema ‘Soy el Sáhara’ lo escribí en octubre del 2009, después de unas declaraciones del portavoz del régimen marroquí descalificando al POLISARIO y menospreciando al pueblo saharaui. Nos llamó ‘fanfarrones’, se burló públicamente de nuestra decisión y capacidad para retomar las armas ante la sistemática violación de nuestros derechos humanos y el menosprecio a la legislación internacional.