Sobre el proceso Constituyente y la votación de salida del 17 de Diciembre 2023
«No perdemos la esperanza de que en un futuro no muy lejano, con un pueblo organizado y consciente podamos redactar una Nueva Constitución que esté a las alturas de nuestros anhelos de construir un país más justo y democrático.»
¿Una nueva constitución en contra de las municipalidades de Chile?
Hay que asumir desde ya el fracaso de un proceso constituyente inédito en la historia de Chile, que por muchas razones no convenció a la gran mayoría, lo que no nos debe paralizar, ni mucho menos dejar de pensar en un mejor mundo del que tenemos, sino asumir con convicción y responsabilidad los nuevos escenarios, que aunque se ve vean muy difusos, hay que seguir intentándolo y buscar nuevos horizontes.
Chile. Elección constitucional: El momento caótico
De acuerdo al Servicio Electoral de Chile (Servel), los votos válidamente emitidos fueron alrededor de 10 millones, mientras que más de 2 millones de votos fueron anulados (17%), hubo más de 500 mil boletas en blanco, más quienes se excusaron de asistir a las urnas. El pinochetismo obtuvo una mayoría de 35 escaños, equivalente a más de 3/5 del Consejo Constitucional, mientras los partidos del gobierno y otros, sacaron 25 cupos.
Gabriel Boric y el fin de la transición en Chile
Seremos testigos del fin de la constitución de Pinochet y la transición, la cual no se quiso cerrar por décadas, por lo que ahora es el momento de cambiar Chile y sumarse a este proyecto transversal y transformador de Apruebo Dignidad, encabezado por Gabriel Boric, dejando de lado purismos ideológicos e identitarios de ciertas izquierdas, que pareciera que tampoco entienden el momento histórico que estamos viviendo como país.
¿De qué democracia estamos hablando?
«el poder actualmente instituido jamás se ha allanado a consultar y someterse a la opinión mayoritaria de la ciudadanía en estas y otras materias de interés general, empeñándose por el contrario en imponerle a ella su propia voluntad, e incluso sus prejuiciosas creencias, a la mayoría del país.
Análisis crítico de la coyuntura y los desafíos del pueblo frente al proceso constituyente
La crisis que estamos viviendo hoy día incluye diferentes niveles. Por una parte, una crisis a nivel de fase, un agotamiento del patrón de acumulación; y por otra, una crisis a nivel de período, es decir las trizaduras del régimen político y del bloque en el poder, y ambas sin salida estratégica. ¡Y todo esto en medio de una crisis cultural que afecta las bases biográficas de este invento de las clases dominantes llamado Chile! ¿Qué duda hay que estamos hablando de un país al borde del abismo?
La desesperada necesidad de una nueva Constitución y la traición del proceso constituyente
Tal vez deba comenzar esta columna pidiendo excusas a quien lee. Digo esto, porque en el texto que sigue subyace un conjunto de convicciones atravesadas por la desconfianza y la sospecha.
El problema es que en mi condición de mapuche he aprendido a mirar la realidad desde una posición de suspicacia, luego de un entrenamiento intensivo de discriminación e intento de exterminio sufrido por mi pueblo, desde el momento mismo de la llegada de los conquistadores europeos hace exactamente 485 años.
Carta Abierta a los parlamentarios y presidentes de partidos políticos
No despejar las legítimas dudas que tiene la ciudadanía podría conducirnos a una escalada de violencia, que llevara a intentar legitimar el actuar de carabineros y/o militares, y a desatar una represión incontrolable. No quisiéramos que el Parlamento de la República fuera corresponsable de tal situación.
Izquierda legitíma también Fraude Constituyente
En lugar de interpretar a la gran mayoría ciudadana que se rebeló frente al “modelo chileno” en octubre de 2019; los partidos de izquierda han terminado subordinándose, de una u otra forma, al fraudulento diseño de “proceso constituyente”.
¡Respeto a la voluntad popular expresada en el Plebiscito!
El pueblo debe movilizarse decididamente para exigir que el proceso constituyente que ahora se abre pueda dar cabal expresión a sus sentidas demandas de justicia social, trato igualitario, fin de los abusos y privilegios, término de la corrupción, efectivo respeto a los derechos humanos y castigo a quienes los violan. En suma, debe hacer valer con fuerza su derecho a que éste sea un proceso limpio y transparente, efectivamente democrático, sin trampas ni cortapisas.