50 años de la masacre de Tlatelolco: el octubre rojo mexicano
Plaza de Tlatelolco. 2 de octubre de 1968. Más de 500 estudiantes asesinados en pocos minutos.
Veinte minutos después del inmenso tiroteo, el silencio se apoderó del gigantesco escenario; los muertos y los heridos se amontonaron en el suelo junto a zapatos, chaquetas y bolsos que la gente perdió mientras huía para refugiarse de las balas. La historia de México había cambiado y el entusiasta e inocente movimiento del 68 nunca volvería a ser pacífico. En general, la sociedad mexicana nunca volvería a conocer la paz integral con el Estado. Después llegó la llamada «Guerra de baja intensidad», el narcotráfico a gran escala y las revueltas indígenas de Guerrero, Chiapas y Oaxaca.
¡Lo llaman democracia y no lo es!
Quienes en España ostentan el poder del dinero tramaron que el Régimen del 78, precedente de lo que en Chile se conoce como Concertación, sustituyera a la dictadura militar para no solo preservar sus privilegios, sino también incrementarlos y, desde entonces, sus medios de comunicación cacarean que los españoles vivimos en una democracia representativa, en la que la soberanía reside en nosotros y que la ejercemos por medio de nuestros representantes; pero el Movimiento Ciudadano 15M hizo suya la exclamación ¡lo llaman democracia y no lo es!, basándola en la falsedad de que el voto de cualquier elector valga igual para ser representado, que es el principio básico de cualquier democracia representativa que se precie.
«La Segunda Vuelta en el Ecuador. ¿Pueden suicidarse los pueblos?”
No puedo dejar de pensar que la disyuntiva que se abre en el Ecuador el próximo domingo podría, según fuese el resultado de la elección presidencial. aportar un nuevo y triste ejemplo de esta serie de desatinos que causaron indecibles sufrimientos a sus protagonistas. Porque, al escuchar a encumbrados dirigentes de diversos movimientos sociales y autoproclamadas fuerzas de izquierda decir una y otra vez que preferían un banquero neoliberal a un dictador recordé inmediatamente el libro de Tuchman y sus valiosas enseñanzas.
Respuesta de Vicenç Navarro a Varoufakis: inter-nacional no es lo mismo que supra-nacional
En este artículo el profesor Navarro señala que hoy están apareciendo fuerzas políticas y sociales que están rechazando las políticas impuestas por el establishment europeo (rompiendo con ellas), fuerzas que Varoufakis parece minusvalorar y que el profesor considera esenciales para la estrategia de democratización de los Estados, así como de la Eurozona y de la Unión Europea. Sus alianzas paneuropeas pueden jugar un papel determinante en tal estrategia de democratización europea, para lo cual se requiere una reversión de las relaciones de poder existentes a nivel de Estado y a nivel de Europa.