Gigantesco autoengaño histórico
Nuestro mayor autoengaño es respecto del conjunto de la historia de Chile. En primer lugar, creyendo que hemos disfrutado de una ejemplar democracia en casi toda nuestra historia republicana; en circunstancias que, salvo en el período 1958-73, las elecciones presidenciales y -sobre todo- las parlamentarias fueron completamente distorsionadas por los sistemas electorales existentes.
La matanza de la Escuela Santa María y la memoria histórica
A pesar del tiempo transcurrido (111 años) de la matanza obrera, podemos reconocer que las estructuras socio-económicas no han cambiado en lo esencial, y que los problemas más vitales de las mayorías no se han resuelto. Es probable que hayan variado las formas de discriminación, explotación y marginalidad, empero, no se ha transformado el sistema opresor. Está claro que ahora no se masacra masivamente a quienes se alzan contra las injusticias y a los que luchan por mejores condiciones de vida; sin embargo, las iniquidades sociales y laborales siguen a la orden de día.
Entre Guatemala e Israel, una historia antigua y llena de sangre
La asistencia militar israelí en Guatemala había comenzado oficialmente en 1971. Desde 1975, se proporcionaba a este Estado terrorista los aviones Arava y distintos tipos de armamentos – cañones, armas individuales – que los USA se negaban a suministrar. Cuando, en 1977, Cárter interrumpió completamente las ventas de armas, Tel Aviv tomó definitivamente el relevo.
Haciendo historia: 15 mujeres mayas de Sepur Zarco enfrentan la barbarie militar
El 26 de febrero de 2016 las mujeres q’eqch’i de Sepur Zarco escucharon por fin la sentencia dictada a dos criminales, pero mucha justicia sigue pendiente. Nada se sabe de los terratenientes que coordinaron la violencia. Las audiencias contra los militares que descansaron y se divirtieron en Sepur Zarco se iniciaron el 4 de marzo de 2010.
“El Botón de Nácar”: De las estrellas, el agua y la memoria
Guzmán se mueve desde el agua que los astrónomos han encontrado en lejanas constelaciones hasta la larga costa del territorio chileno para situarse en la Patagonia y en el desafortunado destino de los pueblos que la habitaron. Desde el testimonio de los últimos descendientes indígenas del sur, el realizador construye la historia de estos pueblos primero en su habitar en el mar y su poderosa cosmogonía, para posteriormente exponer la brutalidad de la colonización y el exterminio.
Todos a la Bastilla……¡Ahora!
Chile no es un país que nació ayer. En la historia de la patria está en la memoria las tantas masacres que fueron ordenadas por los empresarios. Matanzas donde los caídos fueron clase obrera, pobres del campo y la ciudad que se sintieron compelidos a ocupar la calle para defender sus derechos, asunto tan sencillo como una vida digna, y fue así porque los ricos y los burgueses se los negaban…….y lo siguen haciendo.
Es la hora de la ASAMBLEA CONSTITUYENTE. Es el tiempo de sentar las bases de una patria justa, y para un largo tiempo.