Alto al Fuego entre el ELN y el estado colombiano
En este programa se analiza el significado político del acuerdo de paz alcanzado en Cuba entre el presidente colombiano Gustavo Petro y el jefe del ELN Antonio García. Con la participación especial de José Ramírez Vélez, ex miembro de la guerrilla M-19 y exiliado colombiano.
Ecuador: Lenín Moreno, el enemigo de la paz
La paz es un bien intangible sobre el cual se construyen los demás valores sociales. En tal sentido Ecuador prestó sus buenos oficios para terminar con la violencia en Colombia a través de las conversaciones entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el gobierno de Santos. Hoy, sin embargo, el gobierno de Lenin Moreno, sin consulta previa a las partes, ha tomado intempestivamente la decisión de restarse de tan noble causa.
Colombia: Carta abierta a la mesa de negociaciones Gobierno – ELN
Como organización defensora de derechos humanos, comprometida con el fortalecimiento de los procesos sociales, la construcción de la paz con vida digna y la salida negociada al conflicto social, armado y político en nuestro país, firmamos y compartimos la carta enviada por diversas organizaciones, procesos y personalidades a la mesa de negociaciones Gobierno -ELN que se lleva a cabo en Quito Ecuador…
Colombia: Mafias, conspiraciones y la «Coin»
Si llegáramos a acordar un cese al fuego bilateral en la Mesa de conversaciones de Quito, ¿quién detendría las operaciones paramilitares?
Es de conocimiento público que a las zonas de donde salieron las FARC están llegando paramilitares y al tiempo arrecian sus ataques contra territorios en donde está el Ejército de Liberación Nacional. Todos saben que estos escuadrones son el soporte de las mafias del narcotráfico y que el régimen les deja hacer su negocio a cambio de que hagan contrainsurgencia, en una réplica al modo de guerra usado por los Estados Unidos en Afganistán.
Carta Abierta del ELN a las FARC: “seguiremos asumiendo el derecho a la rebelión”
Siempre hemos dejado claro que ese esfuerzo de buscar la paz, no es porque valoremos que el alzamiento armado no esté vigente, sino porque nuestras convicciones nos hacen buscar los caminos del entendimiento y las soluciones dialogadas, debido a que no somos amantes de la guerra; esta la aceptamos como el último recurso al que la clase en el poder nos ha obligado y mientras esto no cambie seguiremos asumiendo el derecho a la rebelión.
Plan Paz Colombia otro capítulo de ignominia y colonialismo
Quince años de intromisión le costaron al imperio en asistencia técnica, militar e inteligencia, alrededor de 10 mil millones de dólares y al pueblo pobre de Colombia litros de sangre y torrentes de dolor. Con esa “ayuda” se desplazaron violentamente millones de personas; de acuerdo con la Unidad de Víctimas del gobierno nacional de 1985 a 2014 se habían desplazado 6’200.000 personas.