Cambalache, siglo XXI
La carrera presidencial en Chile, no obstante el intento de ordenar los pingos al estilo clásico que se venía practicando en este rincón del mundo hace dos décadas, parece romper el partidero —nombre que se le da en la hípica al punto de partida de los jamelgos— y la salida a sido en un tropel que más recuerda una estampida que a un clásico del deporte de los reyes, y en medio de la polvareda es difícil identificar quién es quién.
El siglo de los derechos de la Madre Tierra
La afirmación más impactante del discurso del presidente de Bolivia Evo Morales Ayma en la Asamblea General de la ONU el día 22 de Abril, al proclamar este día como el Día Internacional de la Madre Tierra, tal vez ha sido la siguiente: «Si el siglo XX es reconocido como el siglo de los derechos humanos, individuales, sociales, económicos, políticos y culturales, el siglo XXI será reconocido como el siglo de los derechos de la Madre Tierra, de los animales, de las plantas, de todas las criaturas vivas y de todos los seres, cuyos derechos también deben ser respetados y protegidos».
Establishment, díscolos y discolitis
El hecho de pertenecer al establishment, no quiere decir que no existan diferencias y fisuras entre las personas y/o partidos e instituciones que lo componen. Más aún, para que sea comulgable la patraña de que el estado es la expresión de la voluntad general, el establishment necesita polémicas y arrebatos gonadales verbales entre sus representantes. Y si no los hay, bueno, los provoca e inventa. De esta manera los llamados « díscolos », lo son en el marco de una cancha previamente rayada. La «discolitis » puede prender tanto a izquierda como a derecha.
Marco Enríquez Ominami: centrifugando la política
El cruce de vereda que hizo Fernando Flores, quizás no lleve muchos votos a Piñera, pero la suya ha sido una actitud que podría significar un espolón en la sentina de la Concertación, allí donde duelen los temas más sensibles, como los casos de corrupción que ha conocido la Justicia. Pero, Fernando Flores tropieza en su soberbia y mesianismo y eso arruina sus denuncias y aminora el peligro potencial que reviste para la Concertación que ahora esté integrando el equipo de Piñera para el Cambio.
«Quitemos la máscara al Estado Chileno»
Comentario a la carta de Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, del Santiago 07 de mayo del 2009.
Es absolutamente saludable para la defensa de nuestras reivindicaciones, la integración con las luchas de todo los pueblos por una sociedad que acaricie el trabajo que hicieron nuestros mártires. No podemos seguir mirándonos el ombligo mientras otros sufren los embates de los nuevos y viejos privilegiados. […] Es hora de calificar y descalificar a todos los que abierta o vedadamente, en nombre de la democracia y una falsa paz social, actúan y actuaron en defensa objetiva de los intereses de los grupos más reaccionarios.
El debate sobre el desarrollo en tiempos de crisis
El peligro de volver a comenzar
¿Tiene sentido debatir sobre el concepto de desarrollo en medio de una crisis como la actual? ¿Hay lugar para otras prioridades, más allá de cómo crear empleo, cómo evitar el avance de la pobreza, o cómo garantizar la financiación de la actividad económica…? ¿Acaso podemos preocuparnos ahora por nuevas orientaciones para el bienestar humano, cuando éste se ve amenazado en primera instancia por una profunda recesión económica?
La Coalición para el Cambio o la Concertación de Piñera
El traspaso de ex líderes concertacionistas a la llamada la Coalición por el Cambio, parece el desarrollo de una nueva Concertación para Piñera, pero no para el cambio.
En el fragor de una batalla naval, la pugna por los liderazgos se acentúa tanto que algunos líderes comienzan a perder fuerza, entonces se suicidan tirándose -o los lanzan- al mar con tiburones, otros siguen peleando sus posiciones internas y otros -si es posible- buscan escapar y abordar otros buques cercanos, pero menos llenos, para poder ejercer ahí el liderazgo perdido.
Los vengadores del futuro
La secretaria de Seguridad Interior de los Estados Unidos, Janet Napolitano, declaró al comenzar este mes de mayo que el alerta mundial por la gripe porcina podría pasar muy pronto al grado 6. Este grado (el máximo que contempla la escala) significa “pandemia de contagio rápido y sostenido entre humanos”.
Su par de la OMS, Margaret Chan, la criticó sin nombrarla y dijo que no debía causarse un pánico innecesario (sic) en la población. No obstante, poco después, la doctora Chan echó más leña al fuego con palabras que parecen extraídas de una tira de Manga o de una historieta barata, diciendo que el virus “se ha retirado, pero busca venganza”, que “volverá con una virulencia sin precedentes” y que “ésta sería la peor de las epidemias que el mundo haya tenido que afrontar en el siglo XXI”.
Narciso y la Pacha Mama
El señor Evo Morales, expresó ente muchos loables pensamientos y sentimientos, que la Pacha Mama era inclusive más importante que el ser humano, que ella podía arreglárselas perfectamente para existir sin nosotros, mientras que nosotros no. Por ende “nosotros éramos el problema, la piedra de tranca en el camino del planeta”.
Yo no lo expresaría exactamente así. De hecho cuando hablamos de la existencia como ecosistema orgánico, como estructuralidad de funciones que interactúan en simultaneidad, ya estamos dando por hecho que todas las funciones son manifestación simultánea, presente e imprescindible. En ese sentido ninguna es superior ni inferior, porque todas se afectan mutuamente y la continuidad de la existencia depende de su integridad.
Influenza A-H1N1 ¿made in USA?
El diario de Washington Post, que ya en su edición sabatina había formulado críticas a la forma en que opera el aparato de salud del país del norte, publicó en su edición dominical un amplio reportaje en el que deja en claro que las autoridades sanitarias de esa nación registraron el 30 de marzo el primer caso de un virus que no pudieron identificar. Ese día, en el sur de California, un niño de 10 años había desarrollado un cuadro de tos y fiebre, al que normalmente no le habrían dado importancia.