“Difícil decir quién soy yo, porque el Estado no nos reconoce y nos niega”
por Miguel Lawner (Chile)
3 años atrás 5 min lectura
Este artículo llegó a la Redacción de piensaChile sin datos acerca de la fuente de su publicación. Lo reproducimos por la importancia de su contenido y porque el video del Canal de la Convención Constituyente demuestran su veracidad.
La Redacción de piensaChile
13.08.2021
Estas dramáticas palabras fueron dichas ayer, en la Convención Constituyente, por el representante del pueblo Selk’nam José Luis Vásquez Chogan, emocionado hasta las lágrimas, al igual que yo, cuando escuché su testimonio, trasmitido por redes sociales y que adjunto con esta columna[1].
Vivimos un momento histórico trascendental en la historia de Chile. Ha comenzado el reconocimiento de nuestros pueblos originarios, víctimas de un genocidio practicado durante quinientos años, primero por los conquistadores españoles y, más tarde, por el Estado Chileno, en particular con el pueblo mapuche, desde fines del siglo XIX.
En el caso de los pueblos Selk’nam, kawéskar y yaganes, que poblaron la Tierra del Fuego y los canales australes durante diez mil años, su exterminio comenzó a fines del Siglo XIX, a raíz de las matanzas organizadas por compañías chilenas y algunas extranjeras, con motivo de la colonización de la Tierra del Fuego. Estancieros, compañías balleneras, loberos, o buscadores de oro, como el cruel Julius Popper, se ensañaron en la cacería de los aborígenes que osaban pisar los territorios asignados a su dominio, o que se permitían navegar en las proximidades de las aguas entregadas a su voracidad.
Desafortunadamente debemos admitir que el eminente naturalista Charles Darwin contribuyó a la imagen negativa de estos pueblos originarios, a raíz de su histórico viaje, cruzando el Estrecho de Magallanes, en 1831.
Darwin calificó a estos indígenas como «las criaturas más abyectas y miserables». Al oír a un fueguino hablar su idioma, Darwin comentó que «los gritos de los animales domésticos eran mucho más comprensibles».
Nada más injusto. Los Selk’nam dominaban una lengua normal y creían en valores espirituales superiores, anteriores al tiempo, que definían como El Ser que Está Allá Arriba. Su nombre era Timáuke[2]
Tras el viaje de la Beagle, se intensificaron los navíos cruzando el Estrecho de Magallanes y comenzó a hacerse un hábito la captura de indígenas, que eran trasladados a Europa, a fin de ser objeto de estudios científicos y anatómicos, o su confinamiento en los que pasaron a llamarse Zoológicos Humanos.
Nos avergüenza, hoy día, tener que admitir la existencia de actos tan bárbaros, cometidos por la supuesta civilización occidental, contra pueblos primitivos que no hacían daño alguno a nadie e, incluso, que acogían con asombro y cariño a estos extraños hombres blancos.
A fines del Siglo XIX, se estableció, en la Isla Dawson, una misión salesiana, con el fin de salvar del exterminio a los pueblos Selk’nam, kawéskar y yaganes, que estaban siendo diezmados por los colonizadores de la Tierra del Fuego. El Estado Chileno les concedió una concesión por veinte años, para cumplir con esta noble misión.
Pero, la metodología empleada por dichos misioneros con los pueblos nativos fue muy inadecuada, por cuanto se esforzaron en evangelizarlos, imponiéndoles una cultura ajena, en conflicto con sus tradiciones milenarias. Cien años atrás, la metodología de relación con las minorías étnicas era muy primitiva. No había conciencia respecto a la necesidad de preservar una cultura y valores considerados paganos. Es de imaginar, entonces, las dificultades enfrentadas por las hermanas y los padres salesianos, empeñados en justificar los beneficios de un asentamiento sedentario, en disciplinar el horario de los indígenas, en imponerles hábitos de higiene, en despojarlos de los parásitos adheridos a su cabellera, en habituarlos a comer en un plato, o a hacerles entender las ventajas de un vestuario convencional. Todo esto, además de la inevitable trasmisión de los virus, desconocidos para estos pueblos primitivos, que terminaron siendo diezmados por la tuberculosis.
En su testimonio, José Luis Vásquez señala, que varios de sus antepasados fallecieron al ser enviados a la misión establecida en la Isla Dawson.
Cuando nosotros fuimos confinados en esa isla, en septiembre de 1973 [Miembros del Gobierno Popular, parlamentarios y dirigentes de izquierda, tornados –ilegítima e ilegalmente– maltratados prisioneros políticos por la naciente vil dictadura], pudimos echar un vistazo al cementerio indígena donde fueron sepultados los antepasados de José Luis. Es una vergüenza. Las tumbas están invadidas por la maleza, matorrales y por animales que invaden el terreno desprovisto de cercos adecuados.
La Isla Dawson fue entregada por el gobierno de Salvador Allende al dominio de la Armada, dado su alto valor estratégico. Tras el advenimiento de la democracia, hasta ahora, los marinos niegan el acceso a la isla a toda persona que no sea personal de las Fuerzas Armadas. Es una conducta inaceptable, ya que las instalaciones militares, que podrían calificarse de valor estratégico, ocupan un área muy reducida de la Isla. Esta conducta irracional es parte de los numerosos privilegios concedidos por la Dictadura a las Fuerzas Armadas, que se mantienen hasta nuestros días.
Los aires que soplan en Chile a partir de la insurrección popular iniciada en octubre de 2019 y la admirable composición de la Convención Constituyente, aseguran que tendremos un nuevo texto constitucional que pondrá fin a privilegios tan irritantes.
No habrá territorio nacional alguno proscrito para nadie y podremos ir junto a José Luis Vásquez Chogan, a rendir tributo a sus antepasados, cuyos restos reposan en la Isla Dawson. Es uno de los numerosos derechos que podremos disfrutar todos los chilenos.
Notas:
[1] https://www.youtube.com/watch?v=PYKwFj-jzMY
[2] Darwin y los hijos del Fuego. Katia Chornik. Open University. 20 noviembre 2009; actualizado el 23 noviembre 2009
Mas sobre el tema:
Artículos Relacionados
Miembro de «Primera Línea» fallece al caer en cámara con cables de electricidad y agua del Guanaco
por Diversas Fuentes
5 años atrás 1 min lectura
La tecnología del exterminio
por
8 años atrás 6 min lectura
Ante la propuesta presentada por el gobierno alemán y la inacción del Estado chileno
por Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos Colonia Dignidad (Chile)
6 años atrás 5 min lectura
Brutalidad policial contra afroamericanas en las carreteras gringas
por María Peña (NY, EE.UU.)
10 años atrás 2 min lectura
Krassnoff y otros seis ex agentes de la DINA condenados por el secuestro de estudiante de enseñanza media en 1974
por Daniela Caucoto T. (Chile)
3 años atrás 4 min lectura
Una mediación sospechosa, la de Lula y Petro
por AtilioBoron, Stela Calloni y Paula Klachko (Argentina)
3 meses atrás 3 min lectura
1979, Fidel en la ONU: «Basta ya de la ilusión de que los problemas del mundo se puedan resolver con armas nucleares»
por Fidel Castro Ruz (Cuba)
6 horas atrás
26 de noviembre de 2024 DISCURSO PRONUNCIADO POR EL COMANDANTE EN JEFE FIDEL CASTRO RUZ PRESIDENTE DE LOS CONSEJOS DE ESTADO Y DE MINISTROS Y PRESIDENTE DEL MOVIMIENTO DE…
Rusia prepara su respuesta al Armagedón deseado por la administración Biden
por Thierry Meyssan (París, Francia)
12 horas atrás
Moscú considera el ataque misilístico contra Kursk como la continuación de la guerra secreta de la CIA estadounidense a través de Ucrania e incluso una continuación de la guerra organizada contra la URSS en los años 1950, realizadas ambas con la participación de los nacionalistas integristas ucranianos de Stepan Bandera, quien colaboró con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
“En defensa de la causa saharaui. Testimonios de denuncia, resistencia y solidaridad”
por piensaChile
1 día atrás
Esta recopilación de artículos y testimonios debería contribuir a que se conozcan mejor las razones de la larga lucha del pueblo saharaui por su libertad e independencia, que tanto recuerda a la del pueblo sudafricano contra el régimen del Apartheid, como denunció en su momento el vicepresidente de la MINURSO, Frank Ruddy.
Genocidio en Gaza. La fabricación del consentimiento occidental
por Alain Gresch (Francia)
2 días atrás
«el presidente afirma, en relación a los palestinos, que “la nación entera es responsable” y debe ser “combatida hasta partirla”; el ministro de Defensa declara que no habrá “ni electricidad, ni comida, ni agua, ni combustible”, porque se trata de una guerra “contra animales humanos” y hay que “actuar en consecuencia”.»