Los nuevos abolicionistas
por Oscar Taffetani (Agencia de Notcias Pelota de Trapo)
19 años atrás 4 min lectura
El Principio 5 del Pacto Global, ya convertido en doctrina, propone, taxativamente “abolir cualquier forma de trabajo infantil”.
Desde ese momento, gobiernos y corporaciones se han dedicado a vigilar y a castigar (supuestamente) a las instituciones o personas que en pleno siglo XXI se atreven a hacer trabajar a los niños; no importa si los niños tienen 9 o 14 o 18 años, si su patrón es una sociedad anónima transnacional, una pyme, un horticultor del suburbio o una madre desesperada y sin fuerzas para ser madre.
En la bolsa indiscriminada del trabajo infantil se equiparan la explotación y superexplotación de menores (una lacra que debe desterrarse, sin duda) con el trabajo de los chicos en economías familiares de subsistencia, y hasta la asignación al niño de trabajos domésticos como lavar la ropa, barrer el piso o cuidar a los hermanitos mientras mamá y papá salen a trabajar o a buscar trabajo.
Como consecuencia de los nuevos inventos y doctrinas -ya que no de la aparición de nuevas realidades- han surgido respuestas como los NATs (niños y adolescentes que trabajan), especie de sindicato infantil que procura atenuar mediante el cuentapropismo o el trabajo subsidiado la explotación de menores.
Está todo mal, verdaderamente.
Así como los sindicatos se desentendieron de la suerte de sus trabajadores pasivos, consintiendo la más grande exacción y asalto al sistema previsional argentino, en la década pasada, hoy consienten el atropello a su propia escuela de iniciación en los oficios. Y pierden -o ignoran- al niño trabajador.
Qué decir de los informales (otro eufemismo, para suavizar la masacre). A ésos no hay sindicato que los vaya a buscar, ni Estado que los contemple. ésos aprenden en la escuela del no-trabajo, guarecidos bajo un no-techo provisto por un no-Estado, esperando la dádiva que humilla o entregándose a la muerte rápida del “paco”.
“Este movimiento social -los NATs- llegó tarde a la Argentina; en el Tercer Mundo, tiene varios años…”, escribe una periodista, cual si se tratara de una moda o de un avance tecnológico.
En medio de la confusión y a riesgo de parecer desactualizados, queremos recordarle a los nuevos abolicionistas que el trabajo no es necesariamente una tortura, ni una humillación, ni una tristeza.
El trabajo es el maravilloso camino que conduce a la transformación de la naturaleza, a la transformación de la sociedad y a la transformación de un orden injusto, llegado el caso.
Ni Marx, ni Engels, ni Fourier, ni Owen ni cualquier otro utopista del siglo XIX se habría permitido considerar al trabajo una lacra; y ninguno de ellos habría osado excluir al niño del mundo del trabajo, como tampoco de la escuela o del juego.
El trabajo, la escuela y el juego son dimensiones imprescindibles de la vida humana. El niño debe acceder a ellas progresivamente, de acuerdo con su cultura y su tradición. Pero no le debe faltar ninguna.
“Leyendo a Owen –escribió Marx– brota el germen de la educación del futuro, en la que se combinarán para todos los chicos, a partir de cierta edad, el trabajo productivo con la enseñanza y la gimnasia, no sólo como método para intensificar la producción social, sino también como único método que permite producir hombres plenamente desarrollados”.
Marx no quería abolir el trabajo. Marx quería abolir el trabajo servil y el trabajo esclavo. Quería abolir la explotación del hombre por el hombre.
Qué anticuado, Marx. No quería abolir el trabajo infantil. Quería acabar con la injusticia.
http://www.pelotadetrapo.org.ar
Nota de la Redacción: Recomendamos también leer el siguiente artículo:
Artículos Relacionados
Galeano sobre Garzón: ¿Hasta cuándo la justicia seguirá siendo injusta?
por Diversos Medios
15 años atrás 7 min lectura
Expertos y parlamentarios denuncian maniobras en busca de privatización de Codelco
por Fernando Seymour (Chile)
10 años atrás 11 min lectura
Carta al responsable de la masacre de 14 presos políticos en Antofagasta
por Héctor Vera Vera (Valparaíso, Chile)
18 años atrás 3 min lectura
Joaquín Lavín Infante: desde el sueño del cambio a una pega digitada y segura
por Rafael Gumucio Rivas (Chile)
9 años atrás 6 min lectura
El fusil del Presidente Allende no era un AK 47
por Hermes H. Benítez (Edmonton, Canadá)
14 años atrás 8 min lectura
Denuncian a la pseudoizquierda latinoamericana como instrumento imperial/colonial
por Katya Colmenares y Ramón Grosfoguel
1 día atrás
03 de septiembre de 2025
En este capítulo especial del programa “Entrevistas desde Abya Yala”, conducido por la Dra. @KatyaColmenares, analizamos los ataques que la llamada “pseudoizquierda” latinoamericana —financiada y organizada por el imperio estadounidense— dirige contra la Revolución Bolivariana de Venezuela.
Piden al gobierno español que exija a Marruecos la liberación de los Presos Políticos saharauis
por Alfonso Lafarga (España)
1 día atrás
03 de septiembre de 2025
El Movimiento por los Presos Políticos Saharauis (MPPS) reclama al presidente del Gobierno y al ministro de Exteriores que España, potencia administradora del Sáhara Occidental, exija al régimen marroquí la libertad de los presos políticos saharauis, condenados en juicios injustos y con confesiones obtenidas bajo tortura .
Piden al gobierno español que exija a Marruecos la liberación de los Presos Políticos saharauis
por Alfonso Lafarga (España)
1 día atrás
03 de septiembre de 2025
El Movimiento por los Presos Políticos Saharauis (MPPS) reclama al presidente del Gobierno y al ministro de Exteriores que España, potencia administradora del Sáhara Occidental, exija al régimen marroquí la libertad de los presos políticos saharauis, condenados en juicios injustos y con confesiones obtenidas bajo tortura .
Fracasó consulta del Estado chileno que buscaba «la extinción gradual del pueblo mapuche»
por Andrés Figueroa Cornejo (Chile)
6 días atrás
29 de agosto de 2025
Este 28 de agosto, las autoridades de las comunidades mapuche de la Región de Los Lagos realizaron una marcha hasta la delegación presidencial de Puerto Montt con el propósito de manifestar su absoluto rechazo a la consulta devenida de la llamada Comisión Presidencial de Paz y Entendimiento, creada por la administración de turno de La Moneda.