¿Qué es la ideología, quiénes la reconocen y quiénes la asignan a otros ocultando la propia?
Mediante la presión social consciente ejercida desde los sectores populares en apoyo a los partidos de clase que les representaban, en Chile, tras la Ley de Instrucción Primaria Obligatoria de 1920 que establecía tres años iniciales de educación primaria, se avanzó paulatinamente hasta reconocer ocho años de educación General Básica a partir de 1967.
Chile. El pueblo unido puede avanzar sin partido, pero, ¿sin ideología?
Una de las frases que brilló con fuerza en los primeros meses del estallido social decía: “el pueblo unido avanza sin partido”. Una bella ilusión, un anhelo digno de destacar y de concretar, pero, en honor a la verdad, ese ‘avance sin partido’ lleva a ninguna parte. Mejor dicho, conduce hacia el escenario de la derrota a mediano plazo. Miel sobre hojuelas para la derecha. Un pueblo desideologizado es fácilmente manipulable por quienes sí están ideologizados y poseen el poder del dinero, de las armas, de la prensa y de las cruces.
¿Se está gestando una revolución cultural en Chile?
Han transcurrido cinco semanas desde que se produjo el estallido social protagonizado por millones de ciudadanos chilenos, los que han dicho basta a la tremenda desigualdad que existe en el reparto de las riquezas de nuestro país, y también a la indiferencia institucionalizada de una casta política que solo se ha dedicado a “maquillar” el modelo neoliberal impuesto en dictadura, sin escuchar las demandas y necesidades reales del pueblo, las cuales si fueran atendidas permitirían mejorar las condiciones de vida y el desarrollo integral de la mayoría. Léase: educación gratuita, salud de calidad, pensiones dignas, vivienda y cultura, entre otros.
Para Thomas Piketty la desigualdad es ideológica y política
Las desigualdades jamás son “naturales” sino edificadas por una ideología que crea las categorías divisorias: mercado, salarios, capital, deuda, entre otras, sostiene el economista francés
La ideología sin ideología (I)
A principios de 2019 varios diarios occidentales repetían que los nuevos presidentes de Argentina y Brasil se habían propuesto “vaciar de política el Mercosur”, como antes habían prometido “desideologizar la educación” y el resto de la vida social. El 19 de abril, El País de Madrid tituló “El Mercosur vuelve al origen” y subtituló: “Macri y Bolsonaro avanzan sobre la idea de que el bloque está ideologizado y debe recuperar el espíritu comercial que estuvo en el punto de partida”.
El reposo en las sombras de la ideología o el discurso de Bolsonaro
La asunción y primeras medidas del gobierno de Bolsonaro en Brasil, invitan a una reflexión que excede la concepción teórica y política de la ideología para acercarnos -no sin alarma- a cambios importantes en los énfasis de la subjetividad de los dominadores. Es mucho más sencillo desmentir la retahíla de boutades y disparates conceptuales de su discurso de asunción que comenzar a alumbrar la silueta deforme del engendro humano deshumanizado que representa.
El día que Joaquín Sabina canto el futuro del P.S.
Si Ponce Lerou bendice a Patricio Contesse para que financie al PRO siendo Marco Henríquez su presidente. Si el mismo yerno de Pinochet paga las cuentas de luz, agua y teléfono al PPD mientras Carolina Toha es la presidenta. Si a Fulvio Rossi le untan el pan las pesqueras. Si Camilo Escalona define las inversiones del PS como un “error”, pero él no quiere referirse a los millones…
Pasas para la memoria, si, pero toda la memoria
Nosotros que adoramos las pasas, no podemos más que felicitarnos que aquellos que en su día trataron a Allende de pequeño burgués y de reformista, hoy le rindan justicia en tanto que revolucionario, reconociendo, a posteriori, su verdadera estatura. El mérito mayor hubiese sido el reconocimiento en vida, sobretodo por la eventual constitución de una unidad que nos hubiese permitido salvaguardar la revolución chilena. Pero nunca es tarde para aprender de la historia.