Los cuatro jinetes… y Apocalipsis, 17, 1-8
20 de mayo de 2019 Son los cuatro jinetes que nos envía la historia contra el capitalismo, que parece que no va a durar ni siquiera un siglo más. Una…
La solución de la crisis no es alinearse con Estados Unidos
En los altos niveles militares y en las élites adineradas se esgrime el siguiente argumento: no tenemos ninguna posibilidad de ser una gran nación, aunque tengamos todas las condiciones objetivas para ello. Hemos llegado tarde, y no participamos del pequeño grupo que decide los caminos del mundo. Hemos sido colonia y se nos impone una recolonización para abastecer de materias primas naturales (commodities) a los países avanzados.
La guerra alimentaria
El control de las materias primas genera múltiples batallas con millones de víctimas, más que ningún otro conflicto haya provocado. Y no solo mata el hambre.
Dicen que si a las cosas no les ponemos nombres no existen. Así que cuanto antes bauticemos a la actual escalada militar que se ha convertido ya en una tercera guerra mundial, mejor. Antes la reconoceremos y antes podremos, tal vez, detenerla. Propongo llamarla la Guerra Alimentaria.
Joseph Stiglitz: “El poder del mercado es abuso de poder”
«[…]si realmente tuviéramos libre comercio, sería muy sencillo. Se eliminan todas las barreras al comercio, los aranceles, los subsidios. Si se tratara de eso, los acuerdos serían muy cortos. En las recientes negociaciones para revisar el NAFTA, se eliminó directamente la expresión “libre comercio”. Al menos en eso Trump ha sido honesto: este asunto tiene que ver con todo menos con el libre comercio. Por fin reconocen que estamos ante un comercio dirigido para favorecer ciertos intereses particulares. «
Un Nobel de economía que tiene poco de ecología y mucho de los banqueros
El recién asignado Nobel de Economía generó una enorme confusión donde unos cuantos entendieron que por fin las ciencias económicas convencionales incorporaban las cuestiones ambientales o que estábamos frente a una renovación en el desarrollo. En realidad nada de eso ocurre, y el premio sólo refuerza el mito del crecimiento económico como meta del desarrollo y la fe en resolver la crisis económica dentro del mercado y del capitalismo. Y lo que es peor, algunos en América Latina aprovecharán esto para para reforzar las estrategias de desarrollo que nos condenan a ser proveedores de recursos naturales para la globalización.
¿Por qué gana la ultraderecha? Una lectura posible
De triunfar Bolsonaro en la segunda vuelta en Brasil, con sus 207 millones de habitantes, pasaría a formar parte de los países que tienen gobierno de ultraderecha en América, conformando el 66% de toda población de este continente, esto es, más de 600 millones de seres humanos. El tercer Reich de Hitler en su mejor momento (1941), logro tener bajo su dominio una población, que apenas superaba los 107 millones de habitantes. Es duro constatar que los herederos de este fracasado imperio del siglo pasado, con un pensamiento muy cercano a éste, hoy dominan en tan vastos sectores de la población mundial. ¿Qué ha estado pasando para que esto sea así?
Guerra comercial: El aislamiento de Estados Unidos y el liderazgo de China en el escenario internacional
Los verdaderos motivos del enfrentamiento contra China se observan claramente en tres documentos estratégicos publicados por el gobierno de Trump entre fines de 2017 y principios de 2018: el National Security Strategy, el National Defense Strategy, y el Nuclear Posture Review. En ellos se identifica a China como un adversario, a la par que Rusia, y se advierte que “China quiere moldear un mundo contrario a los valores e intereses estadounidenses”.
Las causas del crecimiento del mal llamado populismo
¿Cómo es que estos sectores de la clase trabajadora votan a la ultraderecha y no a los partidos tradicionalmente enraizados en las clases trabajadoras, como son la mayoría de partidos de izquierdas? Y la respuesta a la pregunta es muy fácil, pues gran parte de los partidos gobernantes de las izquierdas fueron también responsables de la aplicación de las políticas neoliberales, las cuales incluyen las políticas de reforma de los mercados laborales, las políticas de austeridad, los recortes y las políticas facilitadoras e incentivadoras de la globalización.
Juego sin límites – La mentira del libre comercio
¿Cuán injusto puede ser el libre comercio? El reportaje muestra los trucos, engaños y amenazas habituales en el comercio mundial. Y no sólo por parte del presidente norteamericano Donald Trump o de la potencia económica China, sino también de la Unión Europea. Sólo que todo esto permanece en gran parte oculto. «América primero» exige Donald Trump, y critica a Alemania como líder exportador mundial, establece aranceles punitivos y amenaza con medidas proteccionistas.
El ocaso de la guerra
Si en vez de ver la guerra en Siria como un acontecimiento en sí mismo la consideramos el clímax de un conflicto mundial de más de un cuarto de siglo, tenemos que interrogarnos sobre las consecuencias del final, ya próximo, de las hostilidades. Su fin no marca la derrota de una ideología sino el fracaso de la globalización y del capitalismo financiero. Los pueblos que no han entendido eso, fundamentalmente en Europa occidental, se ponen al margen del resto del mundo.