El femicidio latifundista-empresarial de Baucis
Denise Obrecht Samson, madre de Emilia Milen Herrera Obrecht (o Bau, o Baucis como se llamaba asi misma), asesinada en el Lago Riñihue: “Su elección fue hermosa”[1] “Era una…
“La suprema ha legitimado la misoginia”
La Corporación por los Derechos Sexuales y Reproductivos (Miles) expresó hoy su máximo rechazo a la determinación de la Corte Suprema de rebajar la pena a Mauricio Ortega, el agresor de Nabila Rifo. En la resolución, la Suprema rebajó la pena de 26 a 18 años de cárcel por considerar que no hubo femicidio frustrado.
El feminicidio de la activista Macarena Valdés Muñoz en Liquiñe
La activista ambiental murió en agosto de este año, mientras se encontraba en conflicto con la empresa RP Global por la instalación de torres de tensión en el terreno donde vivía. Personeros de dicha empresa la habrían amenazado días antes su muerte.
La carta del hermano de Lucía Perez
Hace casi 10 días que la familia de Lucía Pérez conoció el horror tras saberse que la joven argentina de 16 años había sido violada hasta morir, en circunstancias que la fiscal del caso calificó de «aberrantes» e «inhumanas». Hoy, por si fuera poco, los familiares de la chica sufren amenazas de muerte.
Crónica: La violencia machista y el asesinato de los sentidos
Un catastro que causa escalofríos, pero que obliga a la sociedad a cuestionarse qué está pasando, qué está fallando y cómo se puede detener. Una sociedad que parece haber perdido la capacidad de solidarizar con el dolor ajeno. Pareciera que para poder sentirnos en la piel de otra tenemos que imaginarnos que se trata de nuestra madre, nuestra hija o nuestra hermana. No basta con saber que a una desconocida le sucedió.
Los machistas miran los cuerpos como cosas y a las mujeres como objetos
“Existe el privilegio de los hombres de tratar a otras personas como si fueran sus objetos y cuando ven que hay un acto de humanidad de esa persona, que es el acto de romper con una relación, de enfrentarse a la violencia, el agresor hace el acto máximo de disposición de un objeto: deshacerse de ese objeto, como podría ser venderlo o destruirlo, que es lo que define la propiedad en nuestro sistema legal patriarcal”
Matar a las mujeres es “natural”
Marco Antonio Olmos Barraza en julio de 2015 golpeó y apuñaló con unas tijeras de podar a Karen en el rostro, el cuello, hombro, tórax, en la mama derecha… Paró de apuñalarla sólo porque un carabinero disparó un tiro. (Están casados). El feminicida frustrado está en «libertad vigilada intensiva». La defensa dijo que justo antes de apuñalarla, se había enterado de que ella “le había sido infiel”. Y eso es una “atenuante”.
¿Cuánto vale la vida de una mujer?
Con estupor vemos el “Fallo de Ovalle”. A la ya horrible noticia de conocer cómo una mujer más es violentada dramáticamente por su pareja, debemos sumarle la inédita decisión judicial que pone como “atenuante” de la causa la infidelidad de la víctima. Sí, leyó bien: “atenuante” de infidelidad. Porque después que Marco Antonio Olmos Barrera golpeara en el cráneo (hasta la fractura) e hiriera con unas tijeras de podar el cuello y cabeza de su esposa, el Tribunal Oral en lo Penal de Ovalle aceptó la posición de la defensa y rebajó la pena para el homicida frustrado, considerando la infidelidad de la mujer como una razón de peso para justificar el estado emocional del agresor.
El Tribunal Permanente de los Pueblos y la violencia de Estado contra las mujeres en México
A los cuatro vientos debe difundirse lo que del 21 al 23 de septiembre se denunció y sentenció desde la ciudad de Chihuahua, México. Cuando en un espacio, así sea sólo simbólico y de conciencia, se escuchan casos como los presentados en la audiencia final del Tribunal Permanente de los Pueblos sobre “Feminicidio y violencia de género” es deber de conciencia informar, indignar.