Brasil: La contención institucional frente a la arremetida de la ultraderecha
En su estremecedora novela Si esto es un hombre, el escritor italiano Primo Levi, nos advierte con infinita amargura que, si el nazismo fue capaz de asesinar a millones de personas, nada nos asegura que ello no pueda volver a suceder. Eso es precisamente lo que está sucediendo en estos instantes en Brasil.
La cabeza de Lula da Silva se entrega en bandeja a los golpistas
Es más que sabido que la persecución judicial contra Lula da Silva se ha convertido en un juicio con tintes de proceso medieval de caza de brujas, cuyo punto fuerte han sido las irregularidades en el procedimiento, y que ha culminado con una sentencia del juez de primera instancia, confirmada por el tribunal de apelación, que no aporta ninguna prueba de la culpabilidad del condenado. Al contrario, el famoso triplex de Guarujá, que Lula da Silva habría recibido como soborno, y por el que ha sido condenado a prisión por más de 12 años, jamás ha sido suyo, puesto que siempre ha pertenecido a la empresa constructora OAS. Es difícil entender cómo semejante aberración jurídica puede prosperar en un Estado democrático y de derecho.
Elecciones en Brasil: criminalización de la política, retroceso de la izquierda, autocrítica y resistencia
Frei Betto, en una valiente autocrítica, señala que en 13 años no se promovió la alfabetización política de la población ni se trató de organizar las bases populares. Tampoco se valoró los medios de comunicación que apoyaban al gobierno y, mucho menos, se dio un paso hacia la democratizar los medios.
Y hubo golpe en Brasil
El sueño de la derecha brasileña, desde 2002, se ha realizado. No bajo las formas anteriores que ha intentado. No cuando intentó tumbar a Lula en 2005, con un impeachment, que no prosperó. No con los intentos electorales, en 2006, 2010, 2014, cuando fue derrotada. Ahora encontraron el atajo, para interrumpir los gobiernos del PT, aún más cuando seguirían perdiendo elecciones, con Lula como próximo candidato.
La destitución: ¿repetición de la tragedia brasilera?
¿En qué consiste esta tragedia? Consiste en esto: siempre que el pueblo, los pobres, sus movimientos y sus líderes carismáticos irrumpen en el escenario político, surgen las viejas elites, que cargan dentro de sí la estructura de la Casa Grande para negarles derechos, conspirar contra ellos, difamar y criminalizar a sus líderes, empujarlos a las periferias de donde nunca deberían haber salido. A los negros, a los indios, a los quilombolas, a los pobres y a otros discriminados se les niega reconocimiento y dignidad. Y, sin embargo, constituyen la gran mayoría del pueblo brasilero. Esto es lo que está ocurriendo actualmente en Brasil.
Cuidado, la historia puede repetirse!!!!!
Las empresas transnacionales y las poderosas oligarquías industrial y agraria comenzaron a acusar a Goulart de establecer alianzas con el “comunismo internacional” y en particular con Cuba, creando las condiciones para un golpe de Estado, el cual se inició el 31 de marzo de 1964 y se concretó el 2 de abril cuando la mayoría del Congreso votó para destituir a Goulart y poner en su lugar al presidente de la Cámara de Diputados Ranieri Mazzilli, quien duró en su cargo sólo 13 días siendo sustituido por el General Humberto Castello Branco, inaugurando una dictadura que duraría 21 años.
“La credibilidad del PT como un instrumento de cambios está en crisis terminal”
Se ha calculado que por cada dólar que una empresa aporta a las campañas electorales en Brasil, recibe luego 8 dólares de beneficios, pues se le otorgan contratos para realizar obras públicas, etc. Y desde que ha estado en el Gobierno, el PT no ha conseguido cambiar esta situación. Esta es una de las principales críticas que desde la izquierda muchos compañeros le hacemos a este partido.
Brasil: El escándalo Lula y el PT. Dossier
La cuestión dramática de los días que corren es que terminó el pacto de clases, firmado en 2002, con la Carta a los brasileños. A través de ella, un significativo sector popular, capitaneado por el PT, aceptó los términos impuestos por la burguesía – asumir el gobierno – pero no tocar ningún comando vital del Estado.
Evo Morales, Nicolás Maduro, Inácio Lula da Silva y…otros
A pesar de la ofensiva de la derecha, los gobiernos progresistas resisten, pero es evidente que se hace visualizar nuevos escenarios para la izquierda, en un período de baja, no sólo en el precio de los commodities, sino también de la política, que no va acompañada de una respuesta adecuada de los movimientos sociales. La gracia de la política es ser capaz de superar las bajas mareas y resistir y movimiento de reflujo.
¿De qué acusan a Lula?
El intento de impeachment de Dilma Rousseff está políticamente derrotado, no tiene más viabilidad, aunque pueda tener todavía coletazos, de parte de una oposición política que optó por jugarse…