Comunicado Público de Presos Políticos Mapuche desde la cárcel de Temuco
En el contexto de pandemia del Coronavirus, independiente si es una respuesta natural al Yafkan permanente de la humanidad o producto de conspiraciones de los poderosos, el virus existe y la catástrofe continua expandiéndose; si bien en quienes habita el Feyentun/Mupiltun real y profundo, entendemos que será lo que deba ser en torno a la supervivencia de diversos sectores de la humanidad y hasta nuestro pueblo, tal vez, también debemos contemplar la diferencia explicita entre quienes se encuentran en el medio libre y los que estamos prisioneros, en cuanto a medios de resguardo y supervivencia con el peligro constante del contagio, el colapso total del sistema carcelario y sus trágicas consecuencias.
¿El coronavirus salió de un laboratorio chino? Las no tan nuevas teorías que se volvieron denuncias
La teoría de que el coronavirus escapó de un laboratorio de Wuhan no es nueva, pero resurge con fuerza más de tres meses después del inicio del brote en China. Te contamos por qué.
"Que el miedo no te paralice": manifestantes llegan a Plaza de la Dignidad en medio de la pandemia
Al ritmo de «El pueblo unido jamás será vencido» un grupo de manifestantes llegó hasta la Plaza de la Dignidad para revivir las protestas del estallido social, esta vez, en medio de las medidas restrictivas impuestas debido a la pandemia de coronavirus Covid-19 que afecta al país. Cabe mencionar que la comuna de Providencia no se encuentra bajo cuarentena por lo que no se necesita un salvoconducto para transitar por el lugar donde los convocados desplegaron un lienzo con la frase: “Que el miedo no te paralice”.
Baltasar Garzón escribe: «El virus de la impunidad»
El covid-19 se ha convertido, o corre el riesgo de hacerlo, no solo en el elemento más destructivo contra la humanidad en los últimos tiempos, un enemigo invisible y letal, sino también en el virus de la impunidad, el virus que se ocupa como pretexto para justificar esas políticas tramposas que algunos dirigentes ya ensayaron en el pasado y que, ahora, se empeñan en activar mientras el mundo tiene puesta toda su atención en la pandemia.
Senadores de Chile Vamos exigen libertad para condenados por crimenes de lesa humanidad
En medio de todo este escenario ayer en la noche un grupo de senadores de Chile Vamos (Jacqueline van Rysselberghe (UDI), Juan Castro (RN), José García (RN), Alejandro García Huidobro (UDI), Juan Antonio Coloma (UDI), Ena Von Baer (UDI), Víctor Pérez (UDI), Francisco Chahuán (RN), Rodrigo Galilea (RN) y Kenneth Pugh (Independiente) y Carmen Gloria Aravena (Independiente) decidió ir al Tribunal Constitucional (TC) para que se declare la inconstitucionalidad de la exclusión del resto de la población penal, es decir, presos por delitos de lesa humanidad en Punta Peuco, y todo aquel que haya cometido un ilícito de gravedad.
El factor humano
Y los medios –no sólo los hegemónicos- no saben cómo o qué informar, se pierden en lamentar las pérdidas bursátiles y se olvidan de los condenados de la tierra, los marginados de estas sociedades de consumo. Muchos, queriéndolo o no, desde derecha e izquierda, se han transformado en armas funcionales a la batalla que Estados Unidos ha lanzado para no perder su hegemonía económica frente a China.
El sencillo mensaje Lavarse las manos frecuentemente es para muchas familias más que un consejo, una ilusión o burla, en una región donde el 40% de hogares carece de acceso al agua potable en sus casas, señala Álvaro Verzi Rangel.
La máscara neoliberal y la del coronavirus
La máscara nos reveló a esas clases sociales que son generalmente invisibles y que hoy están afuera, en la calle, trabajando, para garantizar nuestra supervivencia. Ahora bien, esta nueva geografía social existe desde hace mucho. En Francia, como en la mayoría de los países occidentales, hay una polarización del trabajo y de la sociedad. Por un lado, están los empleados calificados, móviles, que hablan varios idiomas, trabajan en las empresas internacionales y venden por mucho dinero su capacitación en el mercado del trabajo. Por el otro, están los empleados poco calificados, en su mayoría mujeres mal pagas que están al servicio de la otra clase social para ir a buscar a los niños a la escuela, hacer tareas de limpieza.
Corona, medios de comunicación, propaganda
Incluso en la situación actual, se aplica la vieja y probada regla de la propaganda: cuanto menos se conoce, mayor es la especulación. Para los lectores atentos, en cambio, esto ofrece la oportunidad de evaluar la seriedad y la orientación de los diversos medios y autores. Cualquiera que simplemente muestre curvas exponenciales con el número de pruebas positivas o muertes está engañando al lector (o ha sido engañado por él mismo). En la situación actual, sólo se puede confiar en aquellos que hacen las verdaderas preguntas. Y no muchos lo hacen.
La histeria interminable
Desde que en Wuhan, con sus 11 millones de habitantes, con constantes neumonías y todo tipo de gripes y enfermedades, saltó la alarma se empezó una campaña muy sensacionalista. Se monitorizó la temperatura de sus habitantes y ya entonces, de forma inmediata, hilamos cualquier temperatura alta con coronavirus y, a su vez, relacionamos el coronavirus con una letalidad que, al final, va a ser mayor que las medidas tomadas contra él.
A todo esto, se llenan los telediarios de datos sin contrastar con otras epidemias, de ansia por engullir a la población en las pantallas sin darle tiempo a pensar ni a reaccionar, sometiéndola a un estrés y una psicosis irresponsable en busca de audiencias y de competir a ver quién alerta más.
Carta Abierta a Angela Merkel; "mi preocupación radica sobre todo en las consecuencias socioeconómicas verdaderamente imprevisibles de las drásticas medidas de contención que se están aplicando"
«El motivo de mi preocupación radica sobre todo en las consecuencias socioeconómicas verdaderamente imprevisibles de las drásticas medidas de contención que se están aplicando actualmente en grandes partes de Europa y que también se practican ya en gran escala en Alemania.
Mi deseo es discutir críticamente -y con la necesaria prudencia- las ventajas y desventajas de restringir la vida pública y los efectos resultantes a largo plazo.
Para ello, me planteo cinco preguntas que aún no han sido respondidas adecuadamente, pero son indispensables para un análisis equilibrado.»