Miedo en Brasil ante retorno de militares, esta vez por los votos
Un gobierno basado en las ideas y propuestas de Bolsonaro derivará en autoritarismo y violencia, teme el historiador Daniel Aarão Reis, profesor de la Universidad Federal Fluminense. El riesgo más evidente proviene de sus adeptos incontrolables, cuyas agresiones ya se multiplicaron por el país al acercarse su triunfo, destacó. Además “Es la vuelta al poder de los militares, ahora por vía electoral. En 1964 recurrieron a los tanques para tomar el poder a través de un golpe de Estado. En aquel entonces también tenían apoyo popular, pero la sociedad estaba dividida, las armas fueron decisivas”
Bolsonaro es una creación de la clase media
Esta nueva derecha no puede combatirse con argumentos ideológicos, ni aplicándole adjetivos como «fascista» que solo entiende una minoría militante formada en universidades. La clave está en la disputa viva de la vida cotidiana. Eso es lo que vienen haciendo en las últimas décadas las iglesias evangélicas y pentecostales, con un éxito sorprendente. Defienden un patriarcado fundamentalista, con la intención de retrotraer las relaciones sociales al siglo XIX. Han levantado miles de templos, sobre todo en los barrios pobres y favelas, desde donde proclaman sus verdades y han jugado un papel destacado en el crecimiento de la nueva derecha.
Reporteros sin Fronteras: «Jair Bolsonaro es una seria amenaza para la libertad de prensa y democracia»
Discursos de odio, desinformación, violencia contra los periodistas, menosprecio de los derechos humanos: la campaña de Jair Bolsonaro, favorito en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Brasil, ha hundido al país en un clima de gran tensión y augura un periodo oscuro para la democracia y la libertad de prensa. RSF expresa su preocupación por el futuro de este gigante de América Latina.
«Minutos después de que se dieron a conocer los resultados de la primera vuelta, Jair Bolsonaro manifestó su intención de “poner punto final a todos los activismos en Brasil”, resumiendo en pocas palabras la ideología autoritaria y retrógrada que ha sido propagada en todo el país por este exmilitar de 63 años.»
Bolsonaro y la derecha chilena
Tras el holgado triunfo de Bolsonaro en la primera vuelta en Brasil, la primera reacción del presidente Sebastián Piñera fue elogiar su propuesta económica. Un programa que reinstala el…
Una profunda derrota de la Izquierda
La izquierda pierde en Brasil por sus propios pecados más que por los méritos del ganador. La descomposición moral de la clase dirigente siempre le cobra principal precio político a quienes están en el poder. Ciertamente, no es plausible que el pueblo brasilero se haya transformado en derechista y enemigo de la democracia; en capitalista y neoliberal. Solo que se cansó de ser burlado por un partido de izquierda al que le puso muchas fichas en el pasado y hasta le reconoció méritos antes de que sus líderes se corrompieran.
Bolsonaro: “El error de la dictadura fue torturar y no matar”
El gran héroe ídolo de este hombre (Bolsonaro) fue el primer agente de la dictadura en ser reconocido como torturador por la justicia brasileña. Es responsable, por lo menos, de 45 muertes y desaparecimientos– o sea, ejecuciones sin derechos a defensa o juzgamiento judicial. Carlos Alberto Brillante Ustra golpeó y aplicó choques en una mujer embarazada de 7 meses. Colocó a mujeres y hombres en ‘pau de arara’, aplicó electrochoques en lugares diversos de sus cuerpos, incluyendo pezones y órganos genitales, sometió a personas a ahogamientos, palmatoria y palizas. Llevó dos niños (de 4 y 5 años) para asistir a sus padres torturados, desnudos, sucios de vómito, heces, orina y sangre. Este es el héroe de un candidato a la presidencia. Pero necesito seguir argumentando.
Sebastián Piñera, el presidente camaleón
Nuestro Presidente es el rey de los lugares comunes de las frases hechos y de “pasar al sol que más calienta”: hace pocos días, con la conmemoración del NO de cartón piedra, se presentaba como un gran demócrata – nada menos que el hijo de don Patricio Aylwin, desplazando a su hija Mariana – que, en su discurso en La Moneda, dijo la vulgaridad de que el triunfo del NO a Pinochet pertenecía a todos los chilenos, en presencia y beneplácito de puros fanáticos del SÍ, y que se les sigue cayendo la baba por el “Tata”.
Brasil en peligro: tres bombas de reloj
Algunas fuerzas de la sociedad brasilera actuaron o reaccionaron con el convencimiento genuino de que el golpe pretendía regenerar la democracia brasileña por vía de la lucha contra la corrupción; otros entendieron que era el modo de neutralizar el ascenso de las clases populares a un nivel de vida que más tarde o temprano amenazaría no solo a las élites, sino también a las clases medias (muchas de ellas producto de las políticas redistributivas contra las que ahora se movilizan). Obviamente, ninguno de estos grupos hablaba de golpe y ambos creían que la democracia era estable. No se dieron cuenta de que había tres bombas de reloj construidas en tiempos muy diversos, pero con la posibilidad de explotar simultáneamente.
José Antonio Kast alista visita a Brasil para dar respaldo a Bolsonaro en segunda vuelta
El ex candidato presidencial José Antonio Kast está preparando una visita a Brasil para dar su respaldo a Jair Bolsonaro en segunda vuelta. Incluso, realizaría una gira de campaña con el polémico postulante de la ultraderecha brasileña a encabezar el gobierno del gigante latinoamericano.
Manuel Castells: Carta abierta “a los intelectuales del mundo”
La cuestión no es el PT, sino la presidencia de un Bolsonaro capaz de decir a una diputada, en público, que “no merece ser violada por él”. O que el problema con la Dictadura no fue la tortura, sino que no matara en lugar de torturar. Yo no represento a nadie más que a mí mismo. Ni apoyo a ningún partido. Simplemente, creo que es un caso de defensa de la humanidad, porque si Brasil, el país decisivo de América Latina, cae en manos de este deleznable y peligroso personaje, y de los poderes fácticos que los apoyan, los hermanos Koch entre otros, nos habremos precipitado aún más bajo en la desintegración del orden moral y social del planeta, a la que estamos asistiendo.