La Constitución Política vigente en el Chile del siglo XXI es un engendro de la dictadura militar y significa que nuestro país vive bajo un Estado de Excepción, desde hace ya 35 años. Bajo la apariencia de una democracia, todos los chilenos estamos sometidos, en lo fundamental, a una legislación que prolonga el brazo autoritario de la extrema derecha.
La actual Carta Magna no ha nacido de la soberanía popular sino de las prerrogativas delegadas en la Junta Militar por el mismo Augusto Pinochet y de la cual, los militares oficiaron como garantes. Nuestra Constitución Política fue concebida como un instrumento político contrario a los intereses de la amplia mayoría de los chilenos. Nuestra actual Constitución está hecha a la medida de los privilegiados en el Chile actual. El Estado de Excepción es la norma, en cuanto delata una situación de sometimiento de la mayoría a los dictados de las grandes fortunas.
No nos engañemos, más allá de algún telegénico candidato de mirada cautivadora, que tanto le debe a la cosmética y la cirugía; la triste realidad es que es, apenas, el más agraciado de una caterva de desgraciados. Por simpático que pueda ser un candidato de derechas, no alcanza para ocultar la vieja mano codiciosa que lo sostiene. Por mucho que insista en sus fragancias liberales, lo cierto es que su entorno tiene la hediondez del billete sucio y mal habido, el fétido olor de tumbas sin sosiego.
La derecha sabe que está jugando con una baraja marcada. La derecha sabe que su hegemonía política depende, en gran medida, de la jaula constitucional a la que somete a todos los chilenos. La derecha defiende cada punto y cada coma de la herencia pinochetista, pues ese es el libreto que sostiene el tinglado que asegura no sólo sus ganancias sino la impunidad de aquellos que, en su hora, hicieron el trabajo sucio.
Mientras a clase política degrada, precisamente, la Política con su conducta frívola y carente de todo sentido democrático, cívico y ético; las grandes empresas multiplican sus ganancias con el apoyo del Estado, convirtiendo los sueldos miserables en su mejor ventaja competitiva. Mientras los partidos políticos diseñan sus plantillas electorales para repartirse los cargos entre los rostros conocidos, las grandes corporaciones chilenas y extranjeras atropellan a las minorías étnicas y devastan el patrimonio medioambiental de nuestro país.
Mientras la clase política siga jugando el juego con la misma baraja, reinará el Estado de Excepción, un sutil toque de queda que le recuerda a los adormecidos chilenos los límites de la jaula. Mientras no se plantee en Chile la necesidad imperiosa y urgente de restituir la soberanía popular bajo la forma de una Asamblea Constituyente, la derecha seguirá venciendo, mostrándonos en la vida cotidiana el sometimiento político, económico y cultural sobre los vivos; y el olvido y la impunidad que humilla a los muertos.
– El autor es investigador y docente de la Escuela Latinoamericana de Postgrados. ELAP.
ARENA PÚBLICA, Plataforma de Opinión de Universidad ARCIS.
Artículos Relacionados
“Los 33” un país anormal: de la miseria de los mineros a un glamur hollywoodense
por Rafael Luis Gumucio Rivas,padre (Chile)
9 años atrás 4 min lectura
El Siete, chileno y ecuatoriano, caído durante la Rebelión de Abril en Quito
por Luis Sepúlveda (Chile)
19 años atrás 4 min lectura
Argentina: Alberto Fernández ataja un estallido social, mientras tratan de seducirlo y condicionarlo
por Aram Aharonian (Uruguay)
5 años atrás 16 min lectura
Cómo hacer la transición del viejo al nuevo paradigma
por Leonardo Boff (Chile)
14 años atrás 4 min lectura
En esta Navidad… no me olvides
por Niños palestinos
1 día atrás
Cientos y miles de ellos en este tiempo de ataques, han quedado enterrados vivos bajo los escombros, mientras otros, mutilados por las explosiones, enfrentan un futuro marcado por el dolor físico y emocional. Los sobrevivientes, muchos de ellos en orfandad, cargan con el trauma de haber visto a sus amigos y familiares convertidos en cifras en un desfile interminable de cadáveres, según han relatado organismos humanitarios.
20 de diciembre de 1964: debut de la primera Orquesta Sinfónica Infantil de La Serena
por Comité Memorial Puente Bulnes (Chile)
2 días atrás
La Serena, Chile.- El 20 de diciembre de 1964, es decir, hace exactamente 60 años, tuvo lugar el debut de la primera Orquesta Sinfónica Infantil de La Serena, de Chile y de la Patria Grande (América Latina).
Juana Aguilera y desaparición de Julia Chuñil: «Le dijo a su familia ‘si me pasa algo ya saben quién fue'»
por Radio UdeChile
4 días atrás
21 de diciembre de 2024
La presidenta de la Comisión Ética Contra la Tortura reflexionó en torno a la situación de la líder mapuche, cuyo paradero se desconoce desde el pasado 8 de noviembre. Sobre los recursos dispuestos para su búsqueda, aseguró que no son suficientes.
“La desaparición de Julia Chuñil es parte y consecuencia de la corrupción del sistema”
por Villa Grimaldi (Chile)
1 semana atrás
16 de diciembre de 2024
«Estamos lidiando contra un sistema donde desborda la corrupción y nos toca sobrevivir, pero como nosotros somos defensores del alma, nos nace del alma defender el territorio, pues nadie nos formó, no nos vamos a rendir. A nosotros nos dicen estar atacando este río o este bosque y, a la hora que sea, nosotros nos movilizamos y vamos a detener su destrucción.»