¿Cuáles son los límites de la derecha en América Latina?
por Emir Sader (Brasil)
9 años atrás 6 min lectura
El ímpetu con que actúan en Argentina y en Venezuela puede dar la impresión de que saben hacia dónde quieren ir, que tienen la clave del futuro de nuestras sociedades, que se han renovado al punto de poder volverse fuerza hegemónica en la región. Critican a los gobiernos progresistas, como si se tratara de un ciclo agotado, al cual ellos se proponen suceder y superar.
Pero, ¿qué tanto es así? ¿Qué se puede desprender de los primeros movimientos del gobierno de Mauricio Macri en Argentina y de los de la oposición victoriosa en las elecciones parlamentarias en Venezuela?
Aunque se propongan imprimir un nuevo impulso a la economía, todos los síntomas indican que retomarán el liberalismo económico, a pesar de su fracaso espectacular en el pasado reciente de esos países y en los que aún lo mantienen como modelo, como México, Perú y otros. Las medidas puestas en práctica en Argentina y las que se anuncian en Venezuela representan la vieja fórmula del retiro del Estado de su capacidad de regulación de la economía, de la liberación de acción de las fuerzas del mercado, de reinserción internacional e incluso subordinación al FMI y a la política norteamericana en la región. Profundización de la recesión y aguda crisis social son los corolarios obligatorios de esas políticas.
Nada que ver con la superación del ciclo progresista, aunque declararon formalmente que mantendrían las políticas sociales de esos gobiernos, reconociendo su éxito y apoyo popular. Pero al reafirmar a los supuestos duros de las políticas neoliberales, cortando recursos y afectando directamente a los núcleos que las implementaban, demuestran, en Argentina, la contradicción entre su política económica y los objetivos sociales. Contradicción clara en Argentina, donde se multiplica el desempleo con enorme rapidez, y probable, en caso de que llegaran a gobernar en Venezuela, por la forma cómo se critica la generación de empleos, supuestamente de manera artificial y política por parte de los gobiernos tildados de “populistas”.
Como llegaron al gobierno por la vía electoral, no pueden recurrir a la represión abierta de los movimientos populares, que dio un margen de maniobra a las dictaduras para imponer su “paz social”. En Argentina se enfrentan, desde los primeros días, a movilizaciones populares masivas e indignadas por la brutalidad con que se intenta desmontar los derechos reconquistados a lo largo de los últimos 12 años. No hay luna de miel para el gobierno de Mauricio Macri que, al contrario, cuando recién empiezan las primeras y duras negociaciones salariales, no va a tener la vida fácil como su risueña campaña electoral auguraba.
¿Qué pasará cuando el gobierno se dé cuenta que la economía no volverá a crecer con las medidas que toma? ¿Qué, al contrario, se ahonda la recesión, con elevación del desempleo y de la crisis social? ¿Qué pasará cuando se dé cuenta que no dispone de mayoría política para seguir gobernando mediante decretos? ¿Qué pasará cuando tome conciencia que no puede establecer acuerdos internacionales que se contrapongan al Mercosur, salvo que intente la aventura de abandonar esa alianza regional de la que tanto depende la economía argentina y se aleje cada vez más de Brasil?
En Venezuela, la derecha, eufórica por su mayoría parlamentaria y proyectando el cambio de gobierno en seis meses, también va a tener que enfrentarse con la dura realidad concreta. En primer lugar, triunfaron en las elecciones parlamentarias, obteniendo 400 mil votos más que en la elección anterior – el voto castigo probablemente de chavistas descontentos -, pero también hubo una gran abstención – 2 millones – de chavistas que no optaron por el voto castigo, pero que son una reserva de apoyo para el gobierno. Esos amplios sectores, frente a un referendo revocatorio que la oposición logre convocar, no se sumarán automáticamente al fin del gobierno chavista, a sabiendas de todas las consecuencias negativas para los sectores populares.
En segundo lugar, las nuevas iniciativas del gobierno para reactivar a la economía, a ser enviadas a la Asamblea Nacional, van a plantear a la oposición el desafío de compartir medidas en contra de la crisis o de mantenerse en la impopular actitud de cuanto peor, mejor. A sabiendas que los problemas económicos son los que más afectan a la gente y que el sector moderado de la oposición quiere ayudar a superar la crisis, mientras que el sector radical solo piensa en cambiar el gobierno, las dificultades y el desgaste para la oposición pueden ser decisivos frente a una población necesitada de soluciones inmediatas para sus problemas.
Por otra parte, las medidas con las que el gobierno se ha blindado, dificultan mucho las primeras medidas anunciadas por la oposición, sea en relación a la amnistía o cualquier otra que busque la sustitución del gobierno en seis meses, van a chocar con una institucionalidad adversa, ya sea del Ejecutivo o del Poder Judicial. La euforia inicial se va agotar rápidamente. Quedaría la convocatoria del referendo en la mitad del gobierno de Nicolás Maduro, que puede ser logrado con el 20% de firmas de los electores.
Pero frente a la disyuntiva de terminar de una vez con los gobiernos chavistas y entregar el poder a la oposición o seguir peleando por la superación de la crisis en el marco de esos gobiernos, la oposición no contará fácilmente con una mayoría. Lo decisivo será la lucha de masas en los próximos meses, junto con la reacción popular frente a las iniciativas del gobierno para superar la crisis y las respuestas de la oposición. Las movilizaciones populares, que se han iniciado ya, favorecen ampliamente al gobierno, que cuenta con una militancia activa, mientras que la oposición cuenta con un gran apoyo silencioso y el descontento de sectores populares que siempre habían apoyado al chavismo.
Pero lo determinante será la postura política de la izquierda, de proponer alternativas concretas, de desencadenar la lucha de ideas y ser capaz de movilizar a los más amplios sectores populares en la resistencia en contra de la derecha, dirigiendo, de forma unificada, la continuidad de las luchas en contra del neoliberalismo y de los intentos de restauración conservadora en nuestras sociedades.
– El autor, Emir Sader, es sociólogo y científico político brasileño, es coordinador del Laboratorio de Políticas Públicas de la Universidad Estadual de Rio de Janeiro (UERJ).
*Fuente: Agencia Latinoamericana de Información
Contribuciones: http://alainet.org/donaciones.
Mas informacion: http://alainet.org
FaceBook: http://facebook.com/America.
Twitter: http://twitter.com/ALAIinfo
RSS: http://alainet.org/rss.phtml
Artículos Relacionados
Legado de Cenizas: El Conservadurismo Chileno
por Jorge Molina Araneda (Chile)
6 años atrás 4 min lectura
Doce años de la OTAN en Afganistán: un fracaso histórico
por Nazanin Armanian (España)
11 años atrás 9 min lectura
Tres caminos del presidente Poroshenko hacia el mismo precipicio
por Actualidad RT
10 años atrás 3 min lectura
México: Un Estado fallido planificado
por Raúl Zibechi (Uruguay)
10 años atrás 8 min lectura
1 Comentario
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Presentan querella contra Fuerzas Especiales por agresión a Alicia Lira en la marcha por los derechos humanos
por Félix Madariaga Leiva (Chile)
5 horas atrás
“hemos presentado esta acción criminal con la firme expectativa de que finalmente se logre establecer la efectividad de los hechos que estamos denunciando, es decir, la conducta brutal que tuvieron funcionarios de fuerzas especiales de carabineros sin mediar provocación alguna en un acto pacífico que se desarrollaba en conmemoración del 11 de septiembre de 1973″
México: la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, no invitó al Borbón a la transmisión del mano
por Medios Internacionales
6 horas atrás
En el programa de hoy, 26/9/2024, Pablo Iglesias, Irene Zugasti, Manu Levin e Inna Afinogenova analizan la decisión del Gobierno de España de no enviar ninguna representación oficial a la toma de posesión de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en reacción a su decisión de invitar al acto solemne al presidente Pedro Sánchez pero no al rey Felipe VI, por los desaires de la monarquía borbónica a las instituciones mexicanas. Con la participación de la periodista mexicana Daniela Pastrana.
Militante saharaui: “Si me envían a Marruecos, me matarán”
por Francisco Carrión (España)
1 día atrás
“Me escapé del Sáhara Occidental por todo lo que está pasando allí, por las violaciones de derechos humanos que ha sufrido. Mi padre se halla encarcelado de manera injusta. Procedo de una familia saharaui de activistas. Es imposible vivir en los territorios ocupados”,
«Denuncia el genocidio que está cometiendo Israel con el apoyo de EE.UU. contra la población civil de Palestina»
por Residente (Puerto Rico)
4 días atrás
Detienete por un momento y denuncia el genocidio que está cometiendo Israel con el apoyo de EE.UU. contra la población civil de Palestina. Porque cada niño asesinado hoy en Gaza estaría vivo si hubiesen dejado de bombardear ayer.
No digas después que no pudiste hacer nada.
Es fácil, en Argentina Macri arrancará en helicóptero cuando las masas lo quieran estrangular, y
Venezuela será invadida por USA y la OTAN, so pretexto de salvar a la población del caos. que se va a armar cuando la oposición se tome el gobierno.