Un gran empresario estadounidense, estando en Roma, quiso mostrarle a su hijo la belleza de una puesta de sol en las colinas de Castelgandolfo. Antes de situarse en un buen ángulo, el hijo preguntó al padre: «papá, ¿dónde se paga?». Esta pregunta revela la estructura de la sociedad dominante, asentada sobre la economía y el mercado. En ella se paga todo, también una puesta de sol. Todo se vende y todo se compra. Según hizo notar ya en 1944 el economista estadounidense Polanyi, en esa sociedad dominante se operó la gran transformación al conferir valor económico a todo. Las relaciones humanas se transformaron en transacciones comerciales y todo, realmente todo, desde el sexo a la Santísima Trinidad, se vuelve mercancía y oportunidad de lucro.
Si quisiéramos calificarla diríamos que ésta es una sociedad productivista, consumista y materialista. Es productivista porque explota todos los recursos y servicios naturales buscando el lucro y no la conservación de la naturaleza. Es consumista porque si no hay un consumo cada vez mayor tampoco hay producción ni lucro. Es materialista porque su centralidad es producir y consumir cosas materiales y no espirituales como la cooperación y el cuidado. Está más interesada en el crecimiento cuantitativo −cómo ganar más− que en el desarrollo cualitativo –cómo vivir mejor con menos, en armonía con la naturaleza, con equidad social y sostenibilidad socio-ecológica-.
Cabe insistir en lo obvio: no hay dinero que pague una puesta de sol. No se compra en la bolsa la luna llena «que sabe de mi largo caminar». La felicidad, la amistad, la lealtad y el amor no están a la venta en los centros comerciales. ¿Quien puede vivir sin esos bienes intangibles? Aquí no funciona la lógica del interés, sino la de la gratuidad, no la utilidad práctica sino el valor intrínseco de la naturaleza, del cálido paisaje, del cariño entre dos enamorados. En esto reside la felicidad humana.
Alguien tan fuera de sospecha como Daniel Soros, el gran especulador de las bolsas mundiales, confiesa en su libro La crisis del capitalismo global (1998): «una sociedad basada en transacciones solapa los valores sociales; éstos expresan un interés por los demás; presuponen que el individuo pertenece a una comunidad, sea una familia, una tribu, una nación o la humanidad, cuyos intereses tienen preferencia frente a los intereses individuales. Pero una economía de mercado es todo menos una comunidad. Todos deben cuidar de sus propios intereses… y maximizar sus lucros con exclusión de cualquier otra consideración».
Una sociedad que decide organizarse sin una ética mínima, altruista y respetuosa de la naturaleza, está trazando el camino de su propia autodestrucción.
No es de extrañar entonces que hayamos llegado adonde hemos llegado, al calentamiento planetario y a la aterradora devastación de la naturaleza, con amenazas de extinción de amplias porciones de la biosfera y, en último término, hasta de la especie humana
Sospecho que al no romper con el paradigma productivista/consumista/materialista en dirección al cultivo del capital espiritual y al sostenimiento de toda la vida con un sentido de pertenencia mutua entre la tierra y la humanidad, podemos encontrarnos con la oscuridad.
Debemos intentar ser, por lo menos un poco, como la rosa cantada por el poeta místico Angel Silesius (+1677): «la rosa existe sin un porqué: florece por florecer, no se preocupa de sí misma ni pide ser mirada» (aforismo 289). Esa gratuidad es uno de los pilares del nuevo paradigma salvador.
2008-04-04
* Fuente: Servicios Koinonia
Artículos Relacionados
Fernando Atria: "La Constitución chilena está pensada para proteger el modelo neoliberal y el TC es parte de ese diseño"
por EL MOSTRADOR
9 años atrás 3 min lectura
Terminemos con la Constitución de Pinochet
por Enrique Villanueva M. (Chile)
11 años atrás 7 min lectura
¡Mucha suerte, "a los vilipendiados de toda la vida"!
por Manuel Cortez (Chile)
19 años atrás 6 min lectura
La desafección a la democracia electoral
por Rafael Luis Gumucio Rivas (Chile)
11 años atrás 4 min lectura
Carta a Sebastián Piñera: “Señor Presidente, El Bono de Maternidad Asegura la Disponibilidad de Esclavos”
por Vanessa Rivera de la Fuente (Chile)
12 años atrás 11 min lectura
¿Dónde están? Cantata Popular por los Detenidos Desaparecidos
por Agrupación Manifiesto (Chile)
6 horas atrás
13 de abril de 2025
A 51 años ya del golpe civico-militar, como Agrupación Manifiesto consideramos de importancia mantener vivo este relato, para así educar a las futuras generaciones sobre la historia de nuestro pueblo, sus luchas, sus sueños, sus derrotas y sus tragedias, y así, ojala algún día, volver levantar lucha y organización popular, que le den a nuestro país la dignidad que tanto se merece.
Gaza / Israel: justicia internacional alista audiencias públicas mientras Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas adopta resolución sobre obligación de prevenir genocidio
por Nicolás Boeglin (Costa Rica)
1 día atrás
12 de abril de 2025
Desde el 19 de enero y hasta el 25 de marzo, se recuperaron un total de 897 cadáveres de zonas que antes eran inaccesibles, informó el Ministerio de Salud. Desde el 7 de octubre de 2023 y hasta el 25 de marzo de 2025, el Ministerio de Salud de Gaza informó de que al menos 50 144 palestinos han muerto y 113 704 han resultado heridos».
Gaza / Israel: justicia internacional alista audiencias públicas mientras Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas adopta resolución sobre obligación de prevenir genocidio
por Nicolás Boeglin (Costa Rica)
1 día atrás
12 de abril de 2025
Desde el 19 de enero y hasta el 25 de marzo, se recuperaron un total de 897 cadáveres de zonas que antes eran inaccesibles, informó el Ministerio de Salud. Desde el 7 de octubre de 2023 y hasta el 25 de marzo de 2025, el Ministerio de Salud de Gaza informó de que al menos 50 144 palestinos han muerto y 113 704 han resultado heridos».
Gaza: mensaje al Dr. Mahmoud Abu Amsha, asesinado por no abandonar a sus pacientes
por Medios Internacionales
2 días atrás
11 de abril de 2025
Cuando el ejército israelí asaltó el norte de Gaza y la mayoría de los médicos huyeron para salvar sus vidas, Mahmoud se quedó. Él y el Dr. Hussam Abu Safiya fueron los últimos en mantener la línea en el Hospital Kamal Adwan. Mahmoud, el único cirujano que quedaba, trabajó incansablemente en un lugar que se había convertido más en un cementerio que en un hospital.