Ayer por la noche, luego que Evo Morales presentara la renuncia, grupos de violentos saquearon y quemaron las casas de varios gobernadores y funcionarios del gobierno del Cambio, incluida la casa del presidente depuesto. “Se espera una reacción popular en respuesta a lo que fue un golpe de estado que se desató con furia sobre todo el país y que fue amparado por los gobiernos de derecha de la región”, remarcó Teruggi.
El periodista precisó que consumado el golpe de estado, la oposición aún no logra conformar un gobierno de facto debido a las disputas internas que subsisten entre los golpistas. “No está claro quien asumiría la conducción de lo que intentan hacer parecer como un ejercicio democrático cuando es a todas luces un golpe de estado civil, empresarial, militar y con complicidad de la cúpula de la iglesia”, explicó.