Pisagua, 30 de octubre de 1973, asesinan a 4 dirigentes del P.S. por Consejo de Guerra declarado ilegal, 46 años después
Hace justo un año, la Corte Suprema ratificó una verdad que en círculos de los derechos humanos, nunca fue cuestionada y que, incluso, se establece en el informe Rettig, tras la recuperación de la democracia. Y esto es que la ejecución -hoy derechamente asesinato- de los máximos dirigentes del Partido Socialista, se hizo por resolución de un ilegal Consejo de Guerra verificado en Pisagua, el 29 de octubre de 1973. En la madrugada, enfrentan las balas de la dictadura Rodolfo Jacinto Fuenzalida Fernández, Juan Antonio Ruz Díaz, José Demóstenes Sampson Ocaranza y Freddy Marcelo Taberna Gallegos. Los antecedentes en su contra se dieron en el contexto del también falso “Plan Zeta”.
A 30 años del hallazgo de la fosa de Pisagua, recordamos la figura del exjuez Nelson Muñoz
Imposible olvidar aquel 2 de junio de 1990, cuando tras años de búsqueda, se descubre la fosa clandestina de Pisagua, que contenía 19 cuerpos de detenidos políticos, que, hasta esa fecha, mantenían la calidad de detenidos desaparecidos. Muchas personas jugaron un rol fundamental, familiares, paleros voluntarios, el arqueólogo Olaf Olmos, el Dr. Noimann. En fin, muchos más. En este día conmemorativo, queremos marcar esta fecha en la figura del fallecido juez Nelson Muñoz Morales, quien falleció en Labranza, Temuco, el 6 de junio de 2016, a los 70 años.
Corte Suprema anuló sentencia a muerte de un Consejo de Guerra en Pisagua: El condenado fue torturado y fusilado. Fue un asesinato brutal
En el fallo, se establece que hay antecedentes suficientes “para demostrar la existencia de un método, patrón o sistema general de menoscabo físico o mental y de afrenta a su dignidad, al que fueron sometidos los acusados ante los Consejos de Guerra convocados, los que fueron cometidos por parte de sus interrogadores, celadores u otros funcionarios que intervinieron en el procedimiento mientras dichos inculpados eran mantenidos detenidos, todo ello con el objeto de obtener su admisión o confesión de los hechos que se les atribuían, así como para que implicaran o imputaran al resto de los procesados en los mismos hechos”.
Pisagua: dolor, muerte y melancolía
De la noche a la mañana, en mi imaginario, suena el viejo reloj de madera, el mismo que se irguió el año 1887, entonces comprendo que había llegado el tiempo de alzar el vuelo. Rumbo a Iquique me voy con la emoción y la convicción que hoy más que nunca es necesario reivindicar con todas las energías la lucha de las voces de los callados. Fraguo que el arte, como una manifestación social trascendente que se convierte en vivencia, podría contribuir a reanimar la moral ciudadana y a rescatar los valores humanos más fundamentales, los que aún perviven en el espíritu de los viejos pescadores y en la memoria de todos los nortinos.
Un sobreviviente de los Consejos de Guerra en Pisagua, 1973: «Tales Consejos no fueron sino grotescas farsas»
“Tales consejos no fueron sino grotescas farsas, y todos ellos deben anularse, no sólo porque nunca hubo «guerra», no sólo porque todos los acusados fueron sometidos a torturas y ninguno tuvo algún tipo de actuación después del golpe, etc., etc., sino porque en el caso de las sentencias de muerte, debía haber unanimidad entre sus miembros. Y no la hubo”. Una vez que los prisioneros políticos fueron ejecutados, sus cadáveres no fueron entregados a las familias, como es el caso de los cuatro ejecutados tras el Consejo de Guerra del 29 de octubre: Rodolfo Jacinto Fuenzalida Covarrubias, Juan Antonio Ruz Díaz, José Demóstenes Sampson Ocaranza y Freddy Marcelo Taberna Gallegos, que hasta hoy, se mantienen como detenidos desaparecidos, ya que sus restos no fueron encontrados.
La Corte Suprema reconoce, 46 años más tarde, que 4 ejecutados por el ejército en Pisagua, eran inocentes
La noticia causó impacto en las familias y organizaciones de derechos humanos, a quienes les embargó sentimientos encontrados. Por un lado, la alegría que el nombre de los ejecutados y su dignidad se haya recuperado, pero el tremendo dolor porque fueron injustamente ejecutados. Lisa y llanamente asesinados, al amparo de la dictadura y de quienes manejaban el campo de prisioneros de Pisagua en el año 1973
El “Lebu”, terror flotante de la derecha
A las 7.00 horas de cada mañana luego de una intensa sesión de gimnasia subíamos a cubierta en grupos de 10, desnudos debíamos ducharnos bajo un descomunal chorro de agua fría proveniente de una manguera de incendio. Tratábamos de evitar el turno en que mientras recibías el agua te sorprendiera la ceremonia de “honores de pito” que se realizaban en los barcos de la marina, “honores” que debíamos imitar, lo mortificante era que el ritual consideraba la entonación del himno nacional el que debíamos cantar marcialmente, cuadrados y “ en pelota”… bajo el chorro de agua, frente a los cerros de Valparaíso.
Archivo testimonial sobre prisión política, constituyó para 40 ex prisioneras y prisioneros de Pisagua, un acto simbólico de reparación
En un verdadero acto de reparación simbólica, se transformó el reencuentro de 40 ex prisioneras y prisioneros políticos de Iquique y Pisagua quienes se reunieron este lunes, tras el término del Proyecto de Archivo Testimonial de Tarapacá, en el que participaron entregando su testimonio, tras su paso por el campo de prisioneros políticos de Pisagua.
Gobierno de Piñera en Pisagua: «Miente, miente que algo queda»
El Subsecretario del MOP Lucas Palacios y la senadora Ebensperger lideraron visita a Pisagua en lo que han denominado gobierno en terreno, luego publicaron en todas las redes sociales fotos y videos dando a conocer la visita y las promesas efectuadas a los pisagüinos, lo que omitieron fue señalar eran que las mismas promesas, las mismas falsas promesas, las habían realizado 5 años antes en el mismo escenario y con la misma locuacidad. El gobierno de Piñera definitivamente tomó el camino de Goebbels: «Miente, miente que algo queda.»
Estado chileno comprará cárcel de Pisagua para rescatarla como sitio de memoria
El viejo anhelo de comprar la cárcel de Pisagua, que fue lugar de prisión política y tortura, se comenzó a materializar, luego que la Intendenta de Tarapacá, Claudia Rojas, firmara la documentación donde se oficializa la decisión gubernamental, para adquirir el inmueble, a los propietarios de la histórica edificación, quienes residen en Arica.