Mohamed El Ayubi, saharaui, uno de los 24 presos de Gdeim Izik, ha muerto esta tarde en El Ayún.
Mientras tanto el ocupante marroqui sigue torturando a los presos, y la comunidad internacional sigue sin reaccionar. Desde noviembre de 2010, los presos de Gdeim Izik padecen unas condiciones espantosas, a merced de sus torturadores. Y están separados entre ellos, lejos de sus familias, alejados de sus abogados y tienen problemas con las visitas. Aislamiento para ocultar su difícil situación. No es el primer preso saharaui fallecido por torturas de Marruecos, pero es el primer caído del grupo de Gdeim Izik, un grupo compacto, con una entereza y un coraje admirables. Algo tiene que cambiar.