Desde 1810 hasta hoy los Larraín han sido de los más prominentes dueños de Chile. En la Independencia se les llamaba “los 800”: había, al menos, un Larraín en cada uno de las distintas reparticiones del Estado colonial. Se sabe que los Larraín eran los grandes enemigos de José Miguel Carrera y de toda su familia, y todo por el poder.
Hay que ser muy “Cándido” (Voltaire), para creer que el dinero del fisco corresponde, por derecho, a todos los chilenos, pues siempre la caja fiscal ha pertenecido a la plutocracia, que tiene “todo el derecho” a hacer uso del dinero de los impuestos como si fuera el propio