Con la misma perseverancia demostrada por los gobiernos de la Concertación para liberar de un juicio internacional al ex dictador Augusto Pinochet hoy el actual gobierno se empeña en repatriar a uno de los presuntos culpables del homicidio del ex fundador de la UDI, Jaime Guzmán Errázuriz. Para ello, intentan que el nuevo gobierno transandino revoque el estatus de asilado político del ex frentista Galbarino Apablaza y lo extradite a Chile para que enfrente judicialmente aquí las acusaciones que se le imputan.