A los hipócritas: «Del Sáhara Occidental también les expulsan, pero a Maduro le exigimos respeto y a Mohamed VI le rendimos honores»
Ni el PP, ni el PSOE, ni la Unión Europea han expresado su queja por las expulsiones de españoles del Sáhara Occidental, cuyas aguas se han incluido en el reciente acuerdo pesquero con Marruecos acordado por el Parlamento Europeo, en contra de la doctrina del Tribunal de Justicia de la UE que establece que el Sáhara Occidental y Marruecos son territorios diferentes. Como ha escrito Fito de Por un Sáhara Libre “Del Sáhara Occidental también les expulsan pero a Maduro le exigimos respeto y a Mohamed VI le rendimos honores”.
Sepulcros blanqueados
“Los sepulcros blanqueados” de hoy, que se llenan la boca en defensa de la vida del nonato, no tuvieron ningún asco en propiciar y aplaudir los crímenes de lesa humanidad durante la dictadura de Pinochet, incluso, el reaccionario Jaime Guzmán – ideólogo de la UDI y de misa diaria – expresó que era partidario de la pena de muerte y que el condenado tenía una oportunidad para arrepentirse y salvar su alma.
¡Sepulcros Blanqueados!
No puede sino escandalizarme que quienes se oponen tan tenazmente al proyecto del Ejecutivo sean curiosamente muchos de los cuales alentaron el terrorismo de estado, promovieron las ejecuciones sumarias, la tortura y la desaparición de personas durante la Dictadura. Que avalaron por años los asaltos a las poblaciones marginales donde yo mismo fui testigo de la forma en que se acribilló a mujeres y niños. Siempre recordaré como una de las imágenes más duras de mi trayectoria periodística la de aquella joven embarazada que llegó a la Morgue con su vientre abierto por una bayoneta militar.
Los hipócritas pechoños de la derecha
Los beatos pechoños dicen defender la vida del niño que está por nacer, sin embargo, muchos de ellos añoran la restauración de la pena de muerte, es decir, el asesinato practicado por Estado – la ex ministra de Justicia de Pinochet, (RIP) – sostenía, poco menos, que el condenado seguía la huella de Cristo hacia el Calvario y que su alma se purificaba en el sufrimiento. El santo protector de los fascistas de la UDI, Jaime Guzmán, justificaba la pena de muerte diciendo que el condenado, ante el pelotón de fusilamiento, podía convertirse y arrepentirse de sus fechorías y pecados.