El “te-Fontaine” se parece al cuento del tío
Ricardo Lagos Weber y el pequeñín Andrés Zaldívar se ven conminados a realizar ingentes esfuerzos para convencernos de que en esta reunión de té y galletas no ha ganado la derecha, como lo pronosticara el gran Radomiro Tomic, sino que habría que cambiar la frase de este ilustre república, por la expresión: “cuando se negocia con la derecha, es siempre la izquierda la que gana”. Estos caballeros de la política creen que somos aún tan ingenuos como para creer que salieron derrotados los Monckeberg y los Coloma.
Yo acuso. Carta abierta a los ciudadanos de la República de Chile
Me permito distraer su atención para denunciar un doloroso despojo que se viene produciendo en forma ininterrumpida en contra de casi todos los chilenos, en especial de los más pobres, desde hace ya 30 años. Al hacerlo, no me anima motivación política alguna. Soy absolutamente independiente. No milito en partido político alguno y jamás he desempeñado cargos públicos. Sólo es la indignación lo que me lleva a exponer esto. Soy un ciudadano hastiado, aburrido, de ser víctima de un abuso tan burdo, que lleva ya tres décadas consumándose, y que lo seguirá haciendo, según parece, durante los próximos cuatro años.