13 de agosto de 1973: «Estamos al borde de una guerra civil»
«Estamos al borde de una guerra civil. Y hay que impedirla. La población sufre en exceso y esto no puede continuar. La gente modesta y humilde, que no tiene medios de locomoción, sabe lo que significa tener la angustia de un enfermo y no poder llegar al hospital. Una madre que no tiene leche, frente al llanto de su hijo, comprende quienes son los culpables.»
Boric y Ucrania
No me ha sido fácil escribir estas líneas. Me entregué por entero a lograr la victoria de Gabriel Boric en las últimas elecciones presidenciales y durante su mandato me he esforzado intensamente por lograr el mayor éxito posible en sus políticas de vivienda y desarrollo urbano. Continuaré haciéndolo. Esta columna tiene el propósito de hacerle presente sus contradicciones en materias de política exterior, que es urgente rectificar.
Una convocatoria que más parece una insensatez
Tomic lo advirtió una vez: cuando se gana con la derecha es la derecha la que gana. Con esos personajes no puede celebrarse acuerdo alguno. Porque representan la continuidad de la dictadura.
La central hidroeléctrica de Kajovka: una represa, un plan y mentiras precipitadas
La primera pregunta: ¿De qué orilla están más cerca los daños, a la de Ucrania o a la de Rusia?
La guerra que viene
«El auge del fascismo en Europa es incontrovertible. O “neonazismo” o “nacionalismo extremista”, como prefieran. Ucrania, como colmena fascista de la Europa moderna, ha visto resurgir el culto a Stepan Bandera, el apasionado antisemita y genocida que alabó la “política judía” de Hitler que masacró a 1,5 millones de judíos ucranianos. “Pondremos vuestras cabezas a los pies de Hitler”, proclamaba un panfleto banderista a los judíos ucranianos.»
Raúl Zurita: “Mi deber, contra todo y aunque sea con los ojos muy llorosos, es la esperanza»
Han hecho de la democracia una guerra de rating, entonces parece que todas las acciones se toman en función de ellos lo que es una perversión. Pero siempre, siempre, o si no nos hubiéramos muerto muchas veces, hay una variable desconocida que interviene y hace que las cosas cambien su curso. Esa variable es lo que llamo esperanza. Yo soy un comunista y mi deber, contra todo y aunque sea con los ojos muy llorosos, es la esperanza.
¿Es posible negar el facismo en Ucrania?
Desde el derrumbe del mundo socialista, Ucrania, al igual que el resto de las repúblicas que siguieron ese camino, ha experimentado una brutal restauración del capitalismo. Se desmontaron todas las conquistas en materia de educación, salud, previsión social y desarrollo urbano, todo esto acompañado de una gigantesca campaña anticomunista en los medios de comunicación, destinada a bloquear la memoria histórica de sus pueblos.
27 de febrero de 1933: Incendio del edificio del Reichstag (Parlamento alemán)
Es tan evidente que el incendio fue una acción gestada y llevada a cabo por los nazis, para justificar la supresión de todas las libertades civiles y así poder desatar la represión contra todos aquellos que se oponían a sus afanes dictatoriales.
Ucrania: Los fascistas de ayer y de hoy
Desde el derrumbe del mundo socialista, Ucrania, al igual que el resto de las repúblicas que siguieron ese camino, ha experimentado una brutal restauración del capitalismo. Se desmontaron todas las conquistas en materia de educación, salud, previsión social y desarrollo urbano, todo esto acompañado de una gigantesca campaña anticomunista en los medios de comunicación, destinada a bloquear la memoria histórica de sus pueblos.
Discurso de odio
La memoria y el respeto a las víctimas son una fronteras inexpugnable para el debate político, un mínimo de decencia en una sociedad democrática.