Cinco documentos desclasificados en Estados Unidos por el organismo civil Archivo Nacional de Seguridad, revelan que Pinochet fue informado por el director de Carabineros de la época, Rodolfo Stange, de que fueron militares los que quemaron vivos a dos jóvenes, y de cómo se urdió desde el Ejército y los mandos civiles de la Moneda el encubrimiento, el amedrentamiento a testigos y las operaciones para dejar impune a los autores y hacer creer al país que los mismos jóvenes se habían prendido fuego al portar elementos explosivos.