Una de las razones por las cuales se orquestan escándalos mediáticos, es para ocultar otras noticias puntuales que interesa que pasen desapercibidas, siguiendo uno de los principios de la propaganda de Goebbels, ya enumerado en otro artículo:
Principio de la silenciación.
Acallar las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen al adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.