Te aseguro, por mis ojos que no mueren, que seguiré viendo las caras de la muerte, buscándome impaciente por las efervescentes calles de octubre en primavera. No me detendrá su funesta amenaza, ataviada de uniformes y galones, agazapada en las esquinas, dispuesta a torturar, violar y matar en nombre de tu paz social y tu infame guerra.
Te aseguro, por mis ojos que no mueren, que seguiré viendo a la pérfida muerte, vestida de sombríos personajes del ayer y que reaparecen siempre en nuestra engañosa historia de silencios y traiciones. Viene, como ha venido siempre, al llamado urgente del bandido que gobierna, del dictadorcillo de turno, que se aferra a cualquier costo a sus privilegios amenazados.
Viene a buscarnos a las calles y plazas de la dignidad de un país que agobiado se cansó y airado dijo basta, ya no más con tu oasis de fantasía, con tu triste copia feliz del edén, con tu infantil pretensión de ser únicos y distintos en Latinoamérica mestiza. Aprendimos por dura experiencia propia, que el verdadero cáncer que debemos con premura extirpar de raíz, que enferma a Chile y amenaza la paz, es la codicia compulsiva, y la ambición sin frenos, la desigualdad y el abuso normalizado, el todo vale, la ley del embudo. Lo demás son cuentos de pacotilla, discursos vacios, delirantes arengas patrioteras de fantasmales y poderosos enemigos conspirando contra la nación.
Pero, ya no estamos solos, es la buena noticia, estamos unidos, esa es la gracia y la tarea que faltaba. Somos miles, somos millones, somos más, siempre fuimos y seremos más. Solo que nos cuesta reconocerlo, y asumirlo como fuerza invencible para concretar necesarios y urgentes cambios. Estábamos demasiados inmersos y confundidos en el sopor del consumismo, en las ilusorias bondades del modelo y en el precario confort de interminables cuotas, que no lo supimos, hasta que una nueva generación con renovados bríos nos arrancó abruptamente del letargo, y nos empujó con su desenvuelta osadía trasgresora, a saltar los torniquetes de un sistema perverso que oprime y envenena el alma.
Así empezó a escribirse la nueva historia. Recuperamos la calle, levantamos viejas y nuevas demandas, izamos en lo más alto banderas no reconocidas, porque la patria, la verdadera, es larga, generosa y diversa, y no se resume en un emblema. Hemos juntado nuestras voces y gritado al que no escucha la rabia y los dolores acumulados.
Y en ese dolor indecible por los caídos, y en su memoria, nos hacemos más fuertes que la bala fatal que acecha. Somos la primera y última línea, la que da cara, somos los que siempre sobraron en la mesa de mantel largo de tu satisfecha soberbia, de tu prosperidad labrada con esfuerzo ajeno, y ostentación que insulta y violenta a los humildes y carenciados.
Te aseguro, por mis ojos que no mueren, que seguiré viendo las caras de los míos, de mi gente, de los que me apañan y me inspiran, con su inagotable amor y solidaridad a no retroceder, porque esta historia no tiene vuelta atrás. Seguiré viendo las caras de los amigos/as, de los miles que lucharon hoy conmigo, y lo harán resueltos y multiplicados mañana, hermanados y decididos a derribar los muros de la humillación y la prepotencia legalizada de tu mentirosa democracia.
Hasta que la dignidad se haga costumbre; hasta que la dignidad se haga tan cotidiana como la marraqueta en la mesa diaria, gratificante y simple como un beso, una sonrisa, un abrazo, como un verso inacabado, un brindis por el nuevo país que está naciendo.
Qué hermoso y motivante es volver a ver las calles inundadas de vida, de reencuentros, fraternidad es la consigna declarada, los barrios en ebullición, transformados de la noche a la mañana en espacios de reflexión, debate y participación sobre lo que nos incumbe, nos afecta y nos duele. No hay duda, no solo recuperamos las calles y avenidas, lo más valioso es que recuperamos el sentido de comunidad, el “nosotros”, la confianza en nuestras propias fuerzas, solo de nosotros depende construir un nuevo Chile.
Ninguna elite envilecida, demagoga y rastrera, se apropiará de nuestro sudor y hablará con nuestras voces y nos dibujará el camino a recorrer hacia el futuro.
Te aseguro, por mis ojos que no mueren, que seguiremos abriendo alamedas, derrochando valentía, regalando entusiasmo, creando y cantando nuestros himnos de rebeldía, ganando todos los espacios, donde tengan cabida todas las voluntades, todos los sueños y las esperanzas en un mundo más humanizado.
Aquí ya no caben tus ambiciones de seguir acumulando y engordando faltriqueras sin fondo. Esta vez, te lo aseguro, la vida será más grande y potente que la oscura muerte que tramaste, tu último recurso para detener inevitables procesos sociales que avanzan junto a un pueblo movilizado. Somos torrente incontenible de vida, vibrante y consciente, desbordando y remeciendo desafiante hasta el último rincón de esta franja larga y angosta.
La historia, hace bien reiterarlo, la hacen los pueblos, lo dijo un gran hombre desde el palacio presidencial, sitiado y bombardeado. Y la muerte que planeaste y convocaste para otros, se volverá contra ti, sepultando también tus ridículas pretensiones de estadista con afanes de nombradía y grandeza. Te aseguro desde ahora que ninguna calle llevará tu nombre, ni se replicará en bronce tu semblante de personaje de comedia.
Te aseguro, por mis ojos que no mueren, que más temprano que tarde, no veré nunca más las mil caras de la muerte, disfrazada hipócritamente de orden público, de seguridad de Estado, de fuerzas especiales, de institucionalidad caduca, de justicia escamoteada, de voraz libre mercado, de insaciable lucro, de sacrosanta propiedad privada.
Parapetados en la coraza invencible de nuestras impetuosas ganas de vivir, te aseguro que ninguna represión será suficiente para impedir el despliegue luminoso y avasallante de esta aventura, de estar en las calles, escribiendo cada día la nueva historia, exigiendo justas demandas, más respeto, igualdad. La vida es la experiencia más maravillosa y única que se nos ha concedido, hagamos que sea fecunda, que no valga la pena sino la alegría de vivirla, cada instante en plenitud, para amar, crear, trabajar y construir, con la frente y la dignidad en alto, otro Chile.
Te lo aseguro por mis ojos, y por los cientos de ojos que arrancaste, por mis hermanos, hombres, mujeres y niños, asesinados, torturados, violados y mutilados; por esa generosa sangre vertida en las calles, por todas las vidas que tronchaste, que mis ojos, vigilantes como dardos de fuego, te seguirán viendo, juzgando y condenando, no importa a donde vayas, allí estarán mis ojos y los ojos que cercenaste, te seguirán como filosas espadas hurgando en tu conciencia, día y noche, hasta cuando intentes dormir en tu exquisita y cómoda morada.
Será mi dulce y más terrible venganza. Te lo dije, no estamos solos, ya no nos asustas, perdimos el miedo, ya ganamos lo más preciado para empezar a caminar con paso firme hacia adelante, ganamos la siempre esquiva unidad, virtud que escaseaba.
Es lo menos que puedo notificarte, junto con la implacable certeza que el futuro será nuestro. Te lo aseguro…Será nuestro…
Artículos Relacionados
Propuesta para un Manifiesto Ciudadano por la Cultura y el Arte – Región de Tarapacá
por Iván Vera-Pinto Soto (Iquique, Chile)
10 años atrás 30 min lectura
Imperdón I. Mirar atrás es sano
por Victoria Aldunate Morales (Chile)
17 años atrás 6 min lectura
La mujer que fue Lunes (Cuento en 100 palabras)
por Juan Godoy (Basel, Suiza)
17 años atrás 1 min lectura
Documental «Üxüx xipay (El Despojo)» sobre la historia del pueblo mapuche
por Dauno Tótoro (Chile)
15 años atrás 3 min lectura
Muere Eugenio Trías, un filósofo que quiso llevar el pensamiento más allá del límite
por Jesús Garcia Calero (Madrid, España)
9 años atrás 4 min lectura
Belén, Navidad a la sombra del muro
por Beatriz Lecumberri (Francia)
8 años atrás 2 min lectura
Ofician al Ministerio de JUsticia por millonaria adjudicación directa a empresa para Plan Nacional de Búsqueda
por
11 segundos atrás
Las diputadas Lorena Pizarro, Nathalie Castillo, María Candelaria y el diputado Matías Ramírez oficiaron al Ministerio de Justicia para recabar antecedentes sobre la millonaria adjudicación vía trato directo a la empresa Unholster en el marco del Plan Nacional de Búsqueda.
Fidel: «en los tiempos difíciles es cuando se prueban, realmente, los que valen algo»
por Fidel Castro Ruz (Cuba)
23 horas atrás
14 de agosto de 2024 Este discurso. del 5 de septiembre de 1992, recien desaparecida la Unión Soviética y los países del campo socialista, en medio de las loas…
Israel: Infierno en prisión
por La Base (España)
7 días atrás
En el programa de hoy, 8/8/2024, Irene Zugasti e Inna Afinogenova analizan la violación de derechos humanos en las prisiones israelíes tras la revelación de unas imágenes sobre un centro de detención que muestran cómo un prisionero palestinos es agredido sexualmente por un soldado y la publicación de un informe de la ONG israelí B-tselem que define el sistema penitenciario israelí como una red de campos de tortura.
Gaza / Israel: Bolivia, Brasil, Chile, Colombia y México remiten sus observaciones a la Corte Penal Internacional (CPI)
por Nicolás Boeglin (Costa Rica)
1 semana atrás
El 6 de agosto del 2024, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia y México remitieron a la Sala de lo Preliminar de la Corte Penal Internacional (CPI) sus observaciones con relación al anuncio hecho por parte del Fiscal a la CPI el pasado 20 de mayo, solicitando la emisión de una órden de arresto contra tres dirigentes del Hamás y contra dos dirigentes en Israel: su Primer Ministro y su Ministro de Defensa.