¿Para qué quiere la Unión Europea un ejército propio?
por Manuel Medina (España)
9 años atrás 4 min lectura
Las burguesías europeas se reorganizan militarmente ante un futuro social y económicamente incierto.
Vientos de guerra soplan nuevamente tras la nuca europea. Durante las tres últimas décadas, el eje Estados Unidos – Unión Europea pudo mantener sin competencias apreciables su hegemonía económica y política sobre el resto del planeta
Sin embargo, transcurridos 25 años desde que se produjera el derrumbamiento de la Unión Soviética el panorama mundial ha dado un giro de 180°. Nuevas potencias capitalistas emergentes están sometiendo a las economías de los imperios históricos a un duro desafío. Aquel planeta de «paz» que los exégetas del capitalismo nos dibujaban después de que desapareciera el socialismo en el este europeo, parece haber llegado a su fin.
La enorme capacidad productiva y económica algunos países asiáticos está poniendo en jaque a las economías de las potencias industriales de Europa y América del Norte. Por otro lado, América Latina, condenada por su vecino del norte a desempeñar el papel subsidiario de suministradora de materias primas, intenta abrirse paso en mercados diferentes a los tradicionales, bajo condiciones financieras menos lesivas a las que les imponían los organismos internacionales, controlados por las entidades financieras de los Estados Unidos y de la Unión Europea.
¿POR QUÉ AHORA LA MILITARIZACIÓN?
No es, pues, casual que en las últimas fechas, y con reiterada insistencia, destacados portavoces tanto de la UE como del gobierno alemán estén realizando llamamientos al rearme y a la reorganización militar. El despliegue militar es la «ultima ratio» a la que recurren las clases hegemónicas para imponer a otros la preeminencia de sus intereses económicos. Así ha ocurrido siempre a lo largo de la historia, y no existe ninguna razón que permita pensar que esta regularidad ha sufrido hoy alguna variación.
Hace unos días, el presidente de la Comisión Europea, el derechista Jean-Claude Junker, se pronunciaba abiertamente por la creación de un «Ejército europeo». Su razonamiento al respecto fue de una gran nitidez, propia de aquellos hombres y mujeres que tienen las ideas claras y mandatos expresos. «Éste ejército – auguró sabiamente Junker – nos permitiría conformar una política exterior y una política de seguridad comunes, y compartir las responsabilidades de Europa ante los sucesos en el mundo». Junker añadió a sus razones un cometido clave que debería tener el «ejército comunitario»: «Permitiría a la UE reaccionar ante las amenazas contra los países miembros de la Unión y estados vecinos». A cualquier lector le bastaría con descifrar el significado de lo que Junker entiende por «política de seguridad comunes», «compartir responsabilidades» y «ante los sucesos en el mundo», para detectar el largo alcance del mensaje del presidente de la Comisión Europea.
Esta iniciativa no es baladí. Contiene explosivos significados que afectan no sólo a la llamada «política exterior europea». En un continente instalado en una crisis crónica desde hace 8 años, la única política económica que los intereses del gran capital contemplan como posibilidad para su relanzamiento expansivo consiste en la aplicación de drásticas reducciones salariales, acompañadas por políticas autoritarias. Pero las burguesías europeas y sus portavoces en las instituciones políticas y administrativas, que poseen una centenaria experiencia acumulada en la gobernanza de sus respectivos países, son conscientes de que la aplicación de ese tipo de políticas puede tener – como ya se está empezando a observar – arriesgadas y perturbadoras repercusiones en los escenarios sociales europeos. El «ejército comunitario» que las cúpulas de la UE están proponiendo crear tiene también por objeto responder a la posible aparición y recrudecimiento de esas «contingencias» sociales.
UN DESAFÍO CRUCIAL PARA LAS CLASES POPULARES
Sin entrar ahora en mayores precisiones, hoy conocemos qué es lo que entienden las burguesías y los banqueros europeos por «unidad». La unidad económica europea no supuso solamente que los países periféricos del Sur y del Este del continente fueran convertidos en simples consumidores de mercancías manufacturadas producidas por Alemania, Holanda, Francia y otros países industriales del Norte. Además, mediante la imposición de onerosos préstamos estas potencias industrializadas les condenaron a depender de su diktat con carácter de perpetuidad.
Ahora, la creación de una «Unión europea» con dimensiones castrenses no tendrá perfiles diferentes a los que conocemos de la Europa económica. Ambos se encuentran solidamente vinculados en sus objetivos. Si ese proyecto militarizador llegara a materializarse, los escasos restos que quedan de la soberanía de los pueblos europeos quedarían fulminados. Tanto los asalariados como las capas medias del viejo continente quedarían imposibilitadas para pronunciarse por un modelo de sociedad diferente al modelo impuesto por la sociedad de «libre mercado».
Un proyecto como el que se propone desde las cúpulas de la UE blindaría a la banca y a las burguesías locales intermediarias ante la posibilidad de que en el marco de las sociedades donde operan se produzca algún tipo de transformación social, económica o política que afecte a sus intereses. Para evitar que esa posibilidad fuera siquiera soñada por los pueblos, existiría siempre un ejército «europeo» dispuesto a impedirlo.
Gracias a: Canarias semanal
Fuente: http://canarias-semanal.org/not/15621/-para-que-quiere-la-union-europea-un-ejercito-propio-/
Fecha de publicación del artículo original: 12/03/2015
URL de esta página en Tlaxcala: http://www.tlaxcala-int.org/article.asp?reference=14451
Artículos Relacionados
Saqueadores post terremoto II: La horda que nunca llegó a las casas (Aprendiendo del pasado)
por Juan Andrés Guzmán (Chile)
5 años atrás 14 min lectura
Valores por parir nuevos valores
por Emilio Cafassi (Uruguay)
8 años atrás 7 min lectura
El Banco del Sur: Avances y desafíos
por Isabel Ortiz y Oscar Ugarteche (AlaiAmlatina)
16 años atrás 10 min lectura
España: De encrucijadas electorales y corruptelas
por Alberto Magnet (Barcelona, Cataluña)
8 años atrás 7 min lectura
La izquierda latinoamericana hoy: entre la emancipación y el reformismo
por Beatriz Stolowicz.(México)
18 años atrás 15 min lectura
Las 10 etapas que viviría el mundo con la introducción de una divisa BRICS
por Actualidad RT
11 años atrás 6 min lectura
De la democracia a la oligarquía de los partidos
por Karl Jasper (Alemania)
7 segundos atrás
«La dirección del Estado está en manos de la oligarquía de los partidos…. Su posición, ausente de cualquier tensión con otro poder, seduce…. Los partidos quieren ocupar los espacios con su propia gente. Esta es la recompensa al trabajo del partido, el botín de la victoria tras la batalla electoral ….»
Increíble: Justicia absuelve al general (r) Juan Miguel Fuente-Alba y a su esposa Ana María Pinochet
por Medios Nacionales
3 horas atrás
“este tribunal, por unanimidad, ha decidido absolver a Juan Miguel Fuente-Alba y Anita María Pinochet, de los cargos formulados por el Ministerio Público, Consejo de Defensa del Estado, de ser presuntos autores de un delito de lavado de activos… del artículo 27 de la ley 19.913 en relación con el delito base de malversación de caudales públicos… del Código Penal”.
Los párrafos de la condena a Llaitul que amenazan la libertad de expresión
por Myrna Villegas Díaz (Chile)
2 días atrás
A tan solo tres días de haberse celebrado en Santiago un gran encuentro en defensa de la libertad de expresión, el dirigente de un grupo activista mapuche ha sido condenado a severas penas por delitos contra el orden público de la Ley de Seguridad del Estado (LSE) y otros delitos comunes.
Nace la Federación Internacional de Periodistas por la Causa Saharaui
por Por Un Sáhara Libre
6 días atrás
En la primera conferencia internacional de medios de comunicación, celebrada en los campamentos de refugiados saharauis, se ha anunciado la creación de la Federación Internacional de Periodistas y Profesionales de los Medios de Comunicación en Solidaridad e Interesados por la Causa Saharaui.