El Paro de Mujeres no es simbólico: es político. Y también es económico: “Parar la violencia machista significa parar el sistema que la produce”. La discusión coloca en la agenda de los gremios le emergencia por los femicidios, marca las diferencias en el mundo laboral, el debate por los derechos, la autonomía y la violencia de la pobreza. Tres referentes explican cuál es la trama económica del Miércoles Negro que nos afecta a todos.