Pasados los cinco días de “buenos oficios” o “conciliación” entre los empleados y la gerencia de Recursos Humanos, la Asamblea del Sindicato Interempresa Gasco GLP (Gas Licuado de Petróleo) resolvió hacer efectiva la huelga frente a la nula oferta de la empresa. Al parecer, el “efecto Piñera” ya muestra su dentadura antilaboral.