Las banderas de las organizaciones sociales, sus pancartas y grupos artísticos volverán a hacerse presente en las calles de Chile. Como las ‘oscuras golondrinas’ de Bécquer, volverán. Volverán, sí, pero no para colgar sus nidos en algún balcón sino para recordar a todos que la época de cambios y transformaciones no ha concluido sino, muy por el contrario, se encuentra activa y animosa.